Diez residentes de Florida han demandado al gobernador republicano Ron DeSantis por poner fin a los beneficios de desempleo suplementarios de 300 dólares más de dos meses antes del plazo de vencimiento federal.
Los demandantes exigieron que DeSantis les restituya los beneficios, que en efecto suspendió en junio, y que les envíe pagos retroactivos. Sin esos beneficios, dijeron, no pudieron pagar renta, servicios públicos, alimentos, atención médica y cuidado de niños.
La demanda, presentada el domingo en el condado de Broward, también nombró al Departamento de Oportunidades Económicas de Florida (DEO) y a su director Dane Eagle como acusados. Presentaron la demanda “en nombre de ellos mismos y de todos los floridanos desempleados”.
Hasta ahora, 26 estados, casi todos con gobernadores republicanos, han terminado temprano al menos uno de los tres programas de seguro de desempleo pandémico. Los programas se introdujeron a través de la Ley CARES, en marzo de 2020, y vencerán el 5 de septiembre.
Algunos legisladores y dueños de negocios han culpado a los beneficios por la actual escasez de mano de obra, pero JPMorgan dijo a principios de este mes que había “pocas señales” de que esa fuera la causa.
La demanda dice que los acusados “han tomado medidas contra estos residentes del condado de Broward para privarlos de sus derechos de propiedad real y personal” al cortarles el acceso a la Compensación por Desempleo por Pandemia Federal (FPUC) de manera anticipada.
DeSantis anuncio en mayo que Florida pondría fin a su participación en el programa FPUC a partir del 26 de junio. La demanda alega que el hecho tuvo “fines puramente partidistas y políticos”. “Cada uno de los demandantes ha sufrido dificultades económicas debido a la COVID-19, ha tenido dificultades para encontrar trabajo y ahora, con la interrupción de la FPUC, enfrenta dificultades financieras aún más apremiantes”. Los demandantes “han sufrido y seguirán sufriendo daños sustanciales e irreparables” y no pueden pagar los gastos básicos de subsistencia.
El programa de compensación por desempleo de Florida paga un máximo de 275 dólares semanales durante doce semanas. Esto lo convierte en uno de los programas de compensación por desempleo más cortos y con los salarios más bajos del país, afirma la demanda. “Los acusados tienen la clara obligación legal de asegurar para los floridanos todos los beneficios federales de desempleo disponibles, incluidos los de la FPUC”, dice la demanda.
Florida no es el primer estado que enfrenta acciones legales por su decisión de terminar los beneficios antes de tiempo. Indiana reanudó el pago de los beneficios por desempleo pandémico, incluidos los pagos atrasados, a mediados de julio después de que el Tribunal de Apelaciones del estado negó el intento de continuar deteniendo el beneficio. Maryland también recibió la orden de continuar con sus pagos suplementarios federales por desempleo.
El Comité Económico Conjunto bipartidista dijo en junio que los estados que pongan fin a los pagos de la FPUC antes de tiempo podrían perder un total de 12 000 millones de dólares porque los residentes tienen menos ingresos disponibles para gastar.