El secretario de Defensa interino de Estados Unidos, Patrick Shanahan, calificó el sábado los intentos chinos de robar tecnología a otras naciones y militarizar los puestos de avanzada artificiales en el Mar del Sur de la China como una “caja de herramientas para la coerción”.
El funcionario dijo que Beijing debe desistir de las actividades que Estados Unidos considera hostiles.
En su primer discurso importante en el escenario internacional, Shanahan combinó las críticas a China y las advertencias sobre la amenaza “extraordinaria” de Corea del Norte con promesas de que Estados Unidos está dispuesto a invertir miles de millones de dólares para garantizar la estabilidad de la región indo-pacífica.
Sin nombrar a China en los inicios del discurso, dejó en claro a quién apuntaba con referencias a la campaña de Beijing para instalar sistemas armamentistas de punta en las islas disputadas de la región.
“Si continúan las tendencias de estas conductas, las construcciones artificiales en los recursos comunes podrían convertirse en cabinas de cobro de peaje. La soberanía podría convertirse en exclusividad de los poderosos”, dijo Shanahan.
Sus declaraciones ponen de relieve el deterioro de las relaciones de Estados Unidos con China cuando el gobierno de Donald Trump libra una guerra comercial con Beijing, sanciona al gigante tecnológico Huawei y aprueba la venta de armas a Taiwán, la isla autónoma que el país comunista continental reclama como territorio propio.
Y reflejan la nueva estrategia de defensa de Washington, que considera prioritaria la competencia con China y Rusia como grandes potencias.
Al mismo tiempo, con su discurso Shanahan se presenta al mundo y a los que mandan en el Congreso en Washington, ya que Trump aún no ha sometido su postulación como secretario permanente.
En el auditorio, atentos y nerviosos, se encontraban los aliados y socios de Estados Unidos en la región, temerosos de las repercusiones económicas de la disputa comercial y las consecuencias de las quejas estadounidenses ante los rápidos avances chinos en armas hipersónicas, tecnología nuclear y vuelos espaciales.
El teniente general Shao Yuanming, del ejército chino, dijo que se felicitaba por la mayor comunicación entre China y Estados Unidos, pero objetó enérgicamente algunas de las declaraciones de Shanahan sobre las relaciones con Taiwán y las maniobras chinas en el Mar del Sur de la China. Dijo que su país tiene fundamentos legales para reclamar el mar, donde Beijing ha colocado “instalaciones disuasivas” en respuesta a la provocación que significan las maniobras militares estadounidenses en la región.