El Senado de Estados Unidos desestimó el miércoles el juicio político contra el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, al considerarlo “inconstitucional”.
El juicio contra Mayorkas, quien ha sido blanco de críticas de los republicanos por su manejo de la política de inmigración y la frontera sur, duró apenas tres horas. Los votos se comportaron de acuerdo con líneas partidistas, 51-49.
El líder de la minoría republicana del Senado, Mitch McConnell, se levantó después del dictamen y dijo que los miembros del Senado “sientan un precedente muy peligroso aquí”. “Al hacer lo que acabamos de hacer, en la práctica hemos ignorado las instrucciones de la Cámara de celebrar un juicio”, expresó.
“No teníamos pruebas. No es un día de orgullo en la historia del Senado”, dijo el líder de mayoría del Senado, Chuck Schumer, demócrata por Nueva York. “Lo que vimos hoy fue un microcosmos de este juicio político desde el primer día: sagrado, frívolo, político”, dijo. Y añadió: “El precedente peligroso no era aquel del que hablaban los republicanos, sino el de permitir que el juicio político ocupara el lugar de los desacuerdos políticos”.
Los republicanos de la Cámara de Representantes aprobaron en febrero acusar a Mayorkas alegando su “negativa, deliberada y sistémica de cumplir la ley” sobre política de inmigración, así como de “abusar de la confianza pública”.
Mayorkas calificó ambas acusaciones de “infundadas” y “motivadas políticamente”.
Los senadores republicanos intentaron varias veces pasar a una sesión a puertas cerradas o aplazarla temporalmente, incluida una moción para diferir el procedimiento hasta el día después de las elecciones de noviembre, pero fracasaron.
“El líder de la mayoría del Senado ha argumentado que el desafío del secretario Mayorkas a la ley federal de inmigración y su activa complicidad en la peor invasión extranjera ilegal en la historia de Estados Unidos no constituye un delito grave o un delito menor”, dijo el senador Ted Cruz, republicano por Texas. mientras intentaba llevar el debate a puertas cerradas.
“No ha presentado ningún argumento sobre esa cuestión. No ha presentado ningún informe sobre esa cuestión… la única forma racional de resolver esta cuestión es debatirla, considerar la Constitución y considerar la ley”, añadió.
Todos los senadores presentes en el debate de ayer miércoles estaban sentados en sus escritorios mientras se votaban las distintas mociones.
En algunos momentos, se podía ver a los legisladores repartiendo dulces o reuniéndose en grupos para conversar.