John Bolton, el asesor de seguridad nacional del presidente estadounidense, Donald Trump, anunció hoy que visitará Río de Janeiro el próximo 29 de noviembre para reunirse con el mandatario electo de Brasil, Jair Bolsonaro, para hablar sobre comercio, Cuba, Venezuela y China, entre otros temas.
“Veré al próximo presidente de Brasil, @JairBolsonaro, en Río el 29 de noviembre. Compartimos muchos intereses bilaterales y trabajaremos estrechamente para expandir la libertad y la prosperidad por todo el continente americano”, escribió Bolton en su cuenta de Twitter.
Look forward to seeing Brazil’s next President @JairBolsonaro in Rio on November 29th. We share many bilateral interests and will work closely on expanding freedom and prosperity throughout the Western Hemisphere.
— John Bolton (@AmbJohnBolton) November 21, 2018
Esta será la primera reunión conocida entre el Gobierno estadounidense y Bolsonaro, y se producirá en LA víspera de la cumbre de líderes del G20 en Buenos Aires, a la que asistirá Trump.
Bolton hablará con Bolsonaro sobre una posible “estrategia regional sobre las crisis creadas por los regímenes de Cuba y Venezuela”, explicó a Efe una fuente de la Casa Blanca.
También conversarán sobre “una estrategia regional para lidiar con la influencia política y económica de China” en Latinoamérica, sobre la que Washington ha aumentado recientemente sus críticas.
En la agenda también estarán posibles pasos para “expandir las relaciones de comercio, inversión y negocios” entre Estados Unidos y Brasil, así como para “mejorar la seguridad energética regional”, agregó el funcionario, que pidió el anonimato.
Bolton describió a Bolsonaro como un “aliado de ideas afines” en un discurso este mes, y el hecho de que aproveche su viaje a Buenos Aires con motivo de la cumbre del G20 para parar en Brasil es una nueva muestra del interés de la Casa Blanca en tejer una temprana relación con el presidente electo.
Trump telefoneó a Bolsonaro el pasado 29 de octubre para felicitarle por su victoria electoral y acordó “trabajar estrechamente” con él “en materia comercial, militar y todo lo demás”, según explicó entonces en un mensaje publicado en Twitter.
El ultraderechista Bolsonaro recibió el apodo del Donald Trump brasileño durante la campaña electoral, debido a su admiración por el presidente estadounidense y su historial de declaraciones de tinte machista y racista, además de por su costumbre de rebatir las críticas calificándolas de “fake news” (“noticias falsas”).
Aunque la Casa Blanca ha minimizado esas comparaciones, también ha dejado claro su interés en entablar una buena relación con Bolsonaro, que asumirá el poder el 1 de enero.