La Comisión de Asuntos Jurídicos de la Cámara de Representantes entró hoy lunes en una fase crítica para dar a conocer las conclusiones de la investigación sobre si el presidente Donald Trump presionó a Ucrania para que investigue a sus rivales políticos mientras retenía asistencia financiera previamente aprobada por el Congreso.
“La acusación principal es que este presidente colocó varias veces sus intereses por encima de los intereses nacionales, que buscó varias veces la interferencia extranjera en nuestras elecciones, tanto en 2016 como en 2020, y que, además, trató de encubrirlo”, dijo Nadler.
“Esto revela un patrón que presenta una amenaza real y actual para la integridad de las venideras elecciones. Esta es una de las razones por las que no podemos dejar hasta las próximas elecciones la resolución de este asunto”, añadió.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, se enfrenta al desafío legal y político de satisfacer la energía de los demócratas y al mismo tiempo cumplir con el requerimiento constitucional de determinar que el presidente ha cometido “traición, soborno o crímenes y faltas de suma gravedad”.
El demócrata Adam Schiff presentó formalmente sus hallazgos al Comité Judicial de la Cámara. “La evidencia es abrumadora: el presidente abusó de su poder presionando a Ucrania y a su nuevo presidente para investigar a un oponente politico”, dijo Barry Berke, abogado del personal del Comité Judicial. “Un presidente no puede abusar de su poder para asegurar una elección”.
Los demócratas argumentan que Trump debería ser acusado porque presionó al gobierno de Ucrania para que investigara al ex vicepresidente Joe Biden, que se postula como presidente. Sostienen que la evidencia muestra que la administración retuvo una reunión de la Casa Blanca entre Trump y el presidente ucraniano, utilizándola como palanca sobre las autoridades de Kiev. Y encontraron evidencia significativa de que la retención de aproximadamente $ 400 millones en asistencia militar a Ucrania también se usó para tratar de obligar al país a ayudar al presidente a obtener lo deseado.
Por su parte, los republicanos lo rechazan todo. “Es muy simple, la evidencia en la investigación de juicio político de los demócratas no respalda la conclusión de que el presidente Trump abusó de su poder para su propio beneficio político personal”, dijo Stephen R. Castor, abogado que representa a los republicanos.
Según Castor, “simplemente no haya pruebas claras” de que Trump tuviera “intenciones maliciosas de retener una reunión o asistencia de seguridad”. Acusó a los demócratas de haber ido “buscando un conjunto de hechos sobre los cuales acusar al presidente” y de fabricar un escándalo donde no lo había.
La Casa Blanca se negó a participar, una vez más, en los procedimientos, a pesar de los llamamientos de los demócratas. Trump y sus aliados ahora han dirigido su atención hacia un juicio en el Senado, controlado por los republicanos, donde les será más fácil organizar una defensa.
Pero el propio Trump no dejó de opinar. Después de publicar o reenviar alrededor de un centenar de mensajes en Twitter el domingo, la mayoría atacando a los demócratas, tuiteó lo mismo de siempre: “¡Los demócratas no hacen nada, son una desgracia!”.
De acuerdo con trascendidos, los artículos de destitución se centrarán en la obstrucción al Congreso y abuso de poder, pero aún no se han resuelto todos los detalles.
AP/OnCuba