Equipos de rescatistas recorrían el jueves el norte de Florida tras el paso del huracán Michael, en busca de personas atrapadas entre los escombros. La luz del día reveló un panorama dantesco de innumerables viviendas destrozadas por el tercer huracán más poderoso –por la fuerza de sus vientos– que haya azotado el territorio de Estados Unidos, detrás del Labor Day, de 1935, y el Camile, de 1969.
Al informar al presidente Donald Trump, el jefe de la Agencia Federal de Emergencias (FEMA), Brock Long, dijo que Michael es el huracán más intenso que azota el área desde 1851. Sus olas anegaron calles y puertos y sus fuertes vientos arrancaron árboles y tejados.
https://www.facebook.com/mirka.pratts/posts/2410969692253719
Al menos dos personas murieron como consecuencua de Michael, que aunque reducido a tormenta tropical desde la madrugada de este jueves, seguía azotando con vientos y lluvias intensas varias zonas del sureste de Estados Unidos que no terminaban de recuperarse de las épicas inundaciones provocadas por el huracán Florence el mes pasado.
Bajo un cielo totalmente despejado, las familias en Florida salían temerosamente de los refugios y hoteles para encontrarse con un panorama desconocido de casas y centros comerciales arrasados, el sonido de alarmas de seguridad, el ulular de sirenas y el rugido de helicópteros.
Más de 900,000 viviendas y negocios en Florida, Alabama, Georgia y las Carolinas carecían de electricidad.
“Esta mañana, la costa del Golfo (de México), el Panhandle y el Big Bend se encuentran con un escenario de destrucción inimaginable”, dijo el gobernador Rick Scott. “Muchas vidas alteradas para siempre. Muchas familias han perdido todo… Este huracán fue un monstruo total”.
Sin embargo, la verdadera magnitud de los daños apenas se empieza a conocer, ya que algunas de las zonas afectadas eran de acceso difícil debido a los caminos cubiertos de escombros o inundados.
Para enfrentar el desastre, FEMA tiene más de 3,000 personas en el terreno, mientras el gobernador Scott dijo que había activado a 3,500 efectivos de la guardia nacional.
.@MyFWC is heading into the Panhandle and Big Bend this morning. They have more than 70 boats and more than 200 off-road vehicles ready for search & rescue operations pic.twitter.com/xPYsviC8zK
— Rick Scott (@SenRickScott) October 11, 2018
Uno de los lugares más afectados fue Mexico Beach, donde Michael llegó a tierra el miércoles como un monstruo de categoría 4 y con vientos de 250 km/h. El video tomado por un helicóptero de CNN el jueves mostró la destrucción generalizada de la población de 1,000 habitantes.
Cuadras enteras de casas cerca de la playa fueron arrasadas y solo quedaban planchas de cemento en la arena. Otras quedaron reducidas a pilas de escombros o inclinadas a ángulos extraños.
Un equipo de la Guardia Nacional que llegó a Mexico Beach durante la noche halló 20 sobrevivientes, pero se desconocía la suerte de muchas otras personas. Las autoridades dijeron que 285 residentes se negaron a acatar la orden de evacuación.
A las 11 de la mañana, el ojo de Michael se encontraba 60 kilómetros al sur de Charlotte, Carolina del Norte. Con vientos de 85 km/h, se desplazaba hacia el noreste a 37 km/h.
Here are the 11 AM EDT Key Messages for #Michael pic.twitter.com/i5zh6XB8c0
— National Hurricane Center (@NHC_Atlantic) October 11, 2018
Los meteorólogos pronosticaron que dejaría caer unos 18 centímetros de lluvia sobre las Carolinas y Virginia antes de volver al mar por la noche.
Las autoridades dijeron que un hombre murió aplastado bajo un árbol en las afueras de Tallahassee, Florida, y que una niña de 11 años en Georgia murió cuando el viento dejó caer el techo de un estacionamiento sobre el techo de su casa. Una de las patas de la estructura atravesó el techo y la golpeó en la cabeza.
AP / OnCuba