Funcionarios federales revocaron hoy viernes las restricciones de la administración Trump sobre el uso de tejido fetal humano en investigaciones médicas.
Los cambios despejan el camino para utilizar dinero del gobierno en trabajos que el pasado han llevado a tratamientos para varias enfermedades, incluida la COVID-19
Los científicos del gobierno ahora podrán reanudar la investigación utilizando tejidos de abortos. Los de las universidades también pueden solicitar subvenciones federales sin obtener la aprobación de un panel de ética especial.
El secretario de Salud y Servicios Humanos de la administración Biden, Xavier Becerra, determinó que no había “nuevos problemas éticos que requieran una revisión especial”, por lo que la agencia volverá a utilizar los procedimientos vigentes durante décadas antes de que la administración Trump los cambiara en junio de 2019, dijo un comunicado de la agencia.
Dos docenas de miembros del Congreso que le habían escrito a Becerra pidiendo el cambio, elogiaron la medida. Las restricciones fueron “políticamente motivadas e innecesarias”, escribieron. La Sociedad Estadounidense de Medicina Reproductiva también emitió un comunicado aplaudiendo el cambio. “El gobierno de Estados Unidos ha desarrollado un sólido sistema de supervisión […]. No se debe permitir que políticos motivados ideológicamente interfieran con este sistema por sus caprichos”, dijeron.
Investigaciones que utilizaron tejidos fetales condujeron a vacunas contra la rubéola, la rabia y a medicamentos para el VIH.
Pero eso ha sido durante mucho tiempo objetivo de los opositores al aborto. El Comité Nacional por el Derecho a la Vida condenó lo que llamó una “decisión repugnante” de la administración Biden. Tony Perkins, presidente del Family Research Council, escribió en un comunicado que los contribuyentes ahora se verán obligados a pagar por “experimentos bárbaros” utilizando tejido de abortos “en lugar de utilizar alternativas éticas y efectivas”.
Associated Press/OnCuba.