El cambio de partido de Robert F. Kennedy esta semana de demócrata a independiente ha provocado una afluencia de donaciones, anunció hoy martes un súper PAC afiliado a su campaña.
El lunes Kennedy dio a conocer cambio formal a independiente en un mitin en Filadelfia. “Los demócratas tienen miedo de que le arruine las elecciones al presidente Biden, y los republicanos tienen miedo de que le arruine las elecciones al presidente Trump”, dijo durante su discurso de aproximadamente una hora. “Mi intención es estropear los planes de ambos“.
American Values, el comité de acción política que impulsa la candidatura presidencial de Kennedy, dijo que había recaudado 11 millones de dólares solo seis horas después de que el candidato se presentara ante los votantes como un aspirante independiente a la Casa Blanca.
“A los estadounidenses no les gusta la censura ni la propaganda y están cansados de que les mientan”, dijo en un comunicado Tony Lyons, cofundador del American Values PAC.
“Está claro que Bobby está inspirando un movimiento populista que une a izquierda y derecha, negros y blancos, rurales y urbanos, jóvenes y mayores”, dijo Lyons.
“Su campaña es un movimiento construido para y por el pueblo, no políticos y corporaciones corruptos. Se puede ver de ciudad en ciudad en todo el país: hay electricidad real y un deseo palpable de cambio“.
Kennedy, que proviene de una dinastía, no tiene problemas de dinero. Pero la gran suma de fondos recaudada es el último indicio de que podría tener poder de permanencia en la impredecible carrera presidencial de 2024.
“Millones de estadounidenses de mentalidad independiente están viendo la campaña de censura y propaganda más poderosa contra cualquier candidato en la historia política estadounidense“, añadió Lyons al anunciar el total de la recaudación de fondos.
El abogado y activista antivacunas también ha visto signos de popularidad en las encuestas entre votantes descontentos con la probable elección entre Biden y el expresidente Trump.
Ha protagonizado una campaña de outsider, introduciendo teorías conspirativas que los demócratas en el poder que incluso algunos republicanos tradicionales desautorizan, sobre todo en torno temas como las vacunas, la historia política estadounidense y el actual proceso de primarias presidenciales.
También ha hecho comentarios carentes de toda base científica, como que los judíos y los chinos son inmunes al coronavirus.