Al menos 52 personas murieron y 98 resultaron heridas hoy viernes cuando dos misiles impactaron una estación de trenes en la ciudad de Kramatorsk, al este de Ucrania, mientras la invasión llega a su día 44, dijo el gobernador de la zona de Donetsk, de Ucrania, Pavlo Kyrylenko.
Ubicada en esa zona, la estación se utiliza para evacuar a los civiles de las áreas bombardeadas por las fuerzas rusas. Unas 4 000 personas, la mayoría ancianos, mujeres y niños, estaban en ese lugar cuando fue alcanzado por cohetes de fabricación rusa, dijo el alcalde Oleksander Honcharenko.
Sin embargo no está claro qué tipo de misil se disparó, solo que era de fabricacion rusa. Figuras públicas ucranianas afirmaron que se trataba de un Iskander o un Tochka. Solo Rusia tiene acceso a Iskanders, dijeron fuentes militares.
Fotografías de la estación en Kramatorsk mostraban a los muertos cubiertos con lonas, así como los restos de un cohete que tenía pintada la frase en ruso “Para los niños”. Alrededor de 4 000 civiles se encontraban dentro y en los alrededores de la estación al momento del ataque. Se les había pedido abandonar la zona antes de que la lucha se intensifique en el Donbás, dijo la fiscalía general de Ucrania.
La embajadora del Reino Unido en Ucrania, Melinda Simmons, dijo que era “una depravación rusa indescriptiblemente brutal”.
“Los rusos sabían que la estación de tren de Kramatorsk estaba llena de civiles esperando ser evacuados. Sin embargo, la atacaron matando al menos a 30 personas e hiriendo al menos a cien”, tuiteó el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba. “Esta fue una matanza deliberada. Llevaremos a todos los criminales de guerra ante la justicia”.
Kyrylenko publicó una fotografía on line que muestra varios cuerpos en el suelo, junto a montones de maletas y otros equipajes. Junto a ellos había policías armados con chalecos antibalas.
“Los rashists [fascistas rusos] sabían muy bien hacia dónde apuntaban y lo que querían: querían sembrar el pánico y el miedo, querían llevarse a tantos civiles como fuera posible”, escribió el ministro en una publicación on line. Agregó, además, que su objetivo era evitar que los civiles fueran evacuados y dijo que los misiles llevaban municiones en racimo. Pero hasta ahora no hay imágenes de ese aserto.
Según el asesor de la Oficina del Presidente de Ucrania, Oleksy Arestovych, el ataque partió de Rusia y fue precedido por un reconocimiento exhaustivo. “Debe entenderse que esos ataques están precedidos por un reconocimiento cuidadoso de los objetivos”, dijo en Facebook.
La Casa Blanca, por su parte, denunció el viernes las “imágenes horribles y devastadoras” de un ataque mortal a una estación de tren en Ucrania.
Estados Unidos seguirá apoyando a Ucrania contra la agresión rusa, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Kate Bedingfield, en entrevista con CNN.
Rusia culpa a Ucrania
Pero Rusia lo negó enfáticamente. En respuesta, Eduard Basurin, secretario de prensa de la República Popular de Donetsk (RPD), el estado prorruso controlado por los separatistas, afirmó que el ataque con cohetes no fue hecho por tropas rusas o fuerzas prorrusas, y que en realidad constituyó una “provocación del ejército ucraniano, informó la agencia TASS.
“El objetivo del ataque del régimen de Kiev a la estación de ferrocarril de Kramatorsk era interrumpir la salida masiva de residentes de la ciudad para utilizarlos como ‘escudo humano’ y defender las posiciones de las fuerzas armadas ucranianas, al igual que en muchos otros núcleos de población de Ucrania”, dijo el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
El presidente de la RPD, Denis Pushilin, nombrado personalmente por el mandatario ruso Vladimir Putin, incluso criticó el ataque con misiles como un crimen de guerra, informó TASS.
Según el ministerio, el misil utilizado para atacar la estación solo es utilizado por el ejército ucraniano y era del mismo tipo utilizado por Ucrania el 14 de marzo, cuando supuestamente atacaron una ciudad en Donetsk, matando a 17 personas.
Este tipo de misil es un Tochka, subrayó en una entrevista con el canal de televisión ruso Channel One. Y especificó que no se usó en Rusia ni en los ataques controlados por los separatistas prorrusos.
Los misiles Tochka son misiles balísticos tácticos de la era soviética.
Rusia ha usado misiles Tochka antes, específicamente durante la guerra de Osetia del Sur en 2008.
Además, han sido empleados ampliamente por el ejército sirio, que sirve al régimen del presidente Bashar Assad, alineado con Rusia hasta al menos 2018.
Si bien Ucrania los ha utilizado en el conflicto actual con Rusia, se cree que esta también los usó al comienzo de la invasión para atacar cerca de un hospital en Donetsk. De hecho, Amnistía Internacional identificó el misil ruso como un Tochka.
Rusia niega tener más misiles Tochka y afirma haberlos reemplazado con Iskanders desde 2019, según TASS.