El presidente Joe Biden firmó el viernes una orden ejecutiva que impide las importaciones de productos rusos como el vodka. La acción tambien prohíbe las importaciones de sectores clave de la economía de Rusia, como mariscos, alcohol y diamantes no industriales.
Según cifras disponibles, el año pasado en Estados Unidos se consumieron 77 millones de galones de vodka. En 2019 se vendieron cerca de 57 millones de cajas de 12 botellas, las últimas cifras disponibles para este rubro. Sin embargo, no está claro si todo el consumo es de vodka destilado en Rusia porque Estados Unidos, además de tener fabricas propias, importa esa bebida de Suecia, Polonia, y hasta de Japón.
Desde el inicio de la invasión a Ucrania varias tiendas de licores han decretado un boicot al vodka ruso, pero se desconoce el impacto que ha tenido en la ventas.
La orden ejecutiva de Biden bloquea más de 1 000 millones en ingresos a Rusia y ayudará a garantizar que los ciudadanos estadounidenses no estén “financiando” la guerra en Ucrania, dijo la Casa Blanca en una nota informativa.
La orden también evitará que Estados Unidos exporte lo que la administración llamó “artículos de lujo” a cualquier persona en Rusia. Esos productos incluyen relojes y ropa, joyas, licores de primera y vehículos de lujo, todos los cuales ocupan un lugar destacado en el estilo de vida de los oligarcas rusos.
Las nuevas restricciones a la exportación están valoradas en casi 550 millones por año, dijo la Casa Blanca.
“No son los últimos pasos que estamos dando”, afianzó Biden en un discurso en la Casa Blanca el viernes por la mañana. “Putin es el agresor y Putin debe pagar el precio”, agregó.
La Casa Blanca reveló los últimos pasos para castigar a Moscú por invadir Ucrania después de que Biden pidiera al Grupo de los 7 que revocara el estatus comercial de nación más favorecida de Rusia, abriendo la puerta a nuevos aranceles.
Se espera que la Unión Europea y el Grupo de los 7 acepten la propuesta.