El conflicto militar en Europa, desencadenado por la invasión rusa a Ucrania hace 74 días, está a punto de agravarse si Finlandia y Suecia, dos países tradicionalmente neutrales, deciden ingresar en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Por delante, luchando con todas sus fuerzas se encuentra Rusia, que ha acusado a Occidente de cercarla y de amenazar su integridad física. De hecho, por una curiosidad geográfica, la línea fronteriza de Finlandia con Rusia es mayor que la de Ucrania. Históricamente, en los tiempos de la difunta Unión Soviética, antes y durante la Segunda Guerra Mundial, Moscú llevó a cabo dos guerras fronterizas (1939 y 1944) contra Helsinki que logró ganar pese a la férrea defensa de los finlandeses, quienes perdieron el 10% de su territorio.
Entre el miércoles y jueves la generalidad de los líderes políticos de Finlandia anunciaron su intención de que el país se una a la OTAN “sin demora”, medida que reforzaría la alianza militar occidental y que provocó la rápida promesa de represalia por parte de Rusia.
Se espera que la nación nórdica, que comparte una frontera de 810 millas con Rusia, obtenga un rápido acceso para unirse a la alianza que se fundó para contrarrestar el poder del Kremlin. La vecina Suecia parece dispuesta a seguir ese ejemplo en los próximos días.
Moscú dijo que la movida de Finlandia representaba una amenaza y prometió tomar represalias con acciones técnico-militares y otras cuando el presidente ruso, Vladimir Putin, acaba de enfrentarse a la realidad de que la guerra en Ucrania ha resultado todo lo contrario a sus objetivos iniciales.
“Helsinki debe ser consciente de la responsabilidad y las consecuencias de esta movida”, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia en un comunicado que horas después fue reforzado por el portavoz del Kremlin, Dimitry Peskov.
“Finlandia se unió a los pasos poco amistosos tomados por la Unión Europea hacia nuestro país. Esto no puede dejar de despertar nuestro pesar y es una razón para las correspondientes respuestas simétricas de nuestro lado”, dijo Peskov a periodistas rusos, según la agencia Reuters.
El presidente finlandés, Sauli Niinistö, y la primera ministra, Sanna Marin, anunciaron su apoyo a la decisión en una declaración conjunta el jueves temprano. “La membresía en la OTAN fortalecería la seguridad de Finlandia. Como miembro de la OTAN, Finlandia fortalecería toda la alianza de defensa”, dijeron.
Y enfatizaron: “Finlandia debe solicitar su ingreso en la OTAN sin demora. Esperamos que los pasos que aún se necesitan para tomar esta decisión se tomen rápidamente durante los próximos días”.
La decisión es una señal de unidad europea y un posicionamiento ante la agresión de Putin a Ucrania con los países occidentales actuando para contrarrestar los temores de que el Kremlin quiera restablecer el poder ruso sobre sus vecinos más allá de Ucrania. Moldavia, al occidente de Ucrania, donde hay un fuerte movimiento separatista ruso pudiera ser otro objetivo de Moscú.
El fin del deseo de larga data de Kiev de unirse a la OTAN y la eliminación de las tropas occidentales en la región fueron fundamentales para las demandas previas a la guerra de Putin, pero la incorporación de Finlandia duplicaría la frontera de Rusia con la alianza transatlántica.
“Otra expansión de la OTAN no hace que nuestro continente sea más estable y seguro”, agregó Peskov.
Cuando se le preguntó el miércoles si Finlandia provocaría a Rusia al unirse a la alianza atlántica, el presidente Niinistö dijo que Putin sería el culpable. “Mi respuesta sería que tú causaste esto. Mírate en el espejo”, dijo.
Si Finlandia se convierte en miembro de pleno derecho de la OTAN, estaría cubierta por el Artículo 5, según el cual todos los miembros, incluido Estados Unidos, salen en defensa de cualquier otro miembro que sea atacado.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo el jueves que Finlandia será “bienvenida calurosamente a la OTAN” y agregó que el proceso será “fluido y rápido”.
“Finlandia es una democracia madura, miembro de la Unión Europea y un importante contribuyente a la seguridad euroatlántica”, dijo.
Helsinki no estará formalmente cubierta por el Artículo 5 durante su proceso de solicitud, pero se espera que los miembros de la OTAN le ofrezcan garantías de seguridad ante cualquier movida de Moscú.