Un bombardeo israelí golpeó una escuela utilizada como refugio en el sur de Gaza; mientras en el norte y en el centro del territorio palestino miles de personas huyeron ante la intensificación de la ofensiva contra Hamas, que no da señales de agotamiento y se reagrupa en zonas de donde se ha retirado el ejército.
Las familias gazatíes se vieron obligadas, una vez más, a huir bajo el fuego y con los tanques avanzando en la ciudad, relataron varias agencias internacionales de noticias.
Una fuente del hospital Naser de Jan Yunis reportó que el ataque contra la escuela Al Awada, en Abasan, causó 29 muertos, la mayoría mujeres y niños.
El Ministerio de Salud del enclave, entretanto, indicó que otras 53 personas resultaron heridas, algunas en estado grave y crítico.
El nuevo ataque terrestre de Israel en la ciudad más grande de Gaza es su último esfuerzo para combatir a los efectivos de Hamás, que se reagrupan en áreas que el ejército antes había dicho que prácticamente estaban despejadas.
Ciudad de Gaza arrasada
Tras nueve meses de combate y con más de 38 mil muertes documentadas, gran parte de Ciudad Gaza y de las zonas urbanas circundantes han quedado arrasadas o convertidas en paisajes desolados.
La mayoría de la población huyó al principio de la guerra, pero miles de palestinos permanecen en el norte, describió un despacho del pool estadounidense AP.
“Los combates han sido intensos”, evaluó Hakeem Abdel-Bar, quien huyó del distrito de Tuffah de Ciudad Gaza a casa de unos familiares en otra parte de la ciudad.
El testigo afirmó que los aviones de combate y los drones israelíes estaban “atacando todo lo que se movía” y que los tanques se habían desplazado a los distritos centrales.
La Oficina de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) se declaró consternada por las órdenes de evacuación y la intensificación de la ofensiva en el norte y centro del enclave costero.
La orden dictada por Israel obliga a los desplazados a huir a zonas del oeste y del sur, también blanco de ataques y donde se están matando civiles.
Por su parte, Ismail Al-Thawabta, director de la oficina de medios de comunicación del Gobierno de Gaza, denunció que los ataques israelíes en zonas del centro del territorio mataron este lunes a 60 palestinos e hirieron a decenas.
“La ciudad de Gaza está siendo arrasada. Esto es lo que está ocurriendo. Israel nos obliga a abandonar nuestras casas bajo el fuego”, dijo a la agencia Reuters la palestina Um Tamer, madre de siete hijos, a través de una aplicación de chat.
Para Tamer es la séptima vez que su familia huye de su casa en la ciudad. “No podemos soportarlo más, basta de muerte y humillación. Que termine la guerra ya”, clamó.
Mientras, algunos expertos de la ONU afirmaron que en Gaza hay niños muriendo de hambre y acusaron a Tel Aviv de ejercer una campaña de hambruna intencionada y selectiva.
Treinta y cuatro palestinos han muerto de desnutrición desde el 7 de octubre, la mayoría niños, agregaron los expertos.
La primera pregunta que surge cada mañana es la misma: ¿qué vamos a comer hoy?, contó Maysa Saleh, una representante de la ONG Norwegian Refugee Council,
En un hospital de la ciudad gazatí de Jan Yunis, Ghaneyma Joma relató: “es angustioso ver a mi hijo […] tendido ahí muriendo de desnutrición porque no puedo proporcionarle nada debido a la guerra, el cierre de los pasos fronterizos y el agua contaminada”, afirmó, sentada en el suelo junto a su hijo inmóvil, que tenía un goteo intravenoso conectado a la muñeca.
Negociaciones estancadas
Las esperanzas de los gazatíes de una pausa en los combates se habían reavivado después de que Hamás aceptó en una importante concesión, no exigir la retirada del ejército invasor en el inicio del alto el fuego y negociar el asunto durante la pausa.
Los mediadores cataríes y egipcios, respaldados por Washington, aceleraron sus esfuerzos y hoy se reanudarán las conversaciones en Doha, según medios de comunicación egipcios.
Sin embargo, la intensificación de la ofensiva israelí podría poner en peligro las negociaciones, advirtió Hamás.
Las masacres, asesinatos y desplazamientos constantes en la ciudad de Gaza y las consecuencias catastróficas de los acontecimientos actuales, podrían devolver las negociaciones al punto de partida, dijo el líder político de la organización, Ismail Haniyeh.