Hoy martes la ONU advirtió sobre el aumento de enfermedades infecciosas en Gaza en medio de condiciones de vida muy difíciles y de un sistema de salud pública abrumado mientras Israel continúa librando ataques contra la población.
Según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de la ONU, la propagación de enfermedades “al parecer se ha intensificado” con un estimado de 360 000 casos de enfermedades infecciosas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha informado sobre casos de meningitis, varicela e infecciones del tracto respiratorio superior. En declaraciones dadas a la prensa el pasado el fin de semana, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió sobre “señales preocupantes” de enfermedades epidémicas, incluidas la diarrea con sangre y la ictericia.
La OCAH dijo que el director del Hospital Abu Youssef An Najjar, ubicado en el sur de Gaza, confirmó que la diarrea y la influenza se están propagando entre las personas desplazadas en la ciudad, incluidos 1 500 casos de enfermedades intestinales debido a la escasez de alimentos.
La crisis sanitaria se ve exacerbada por un sistema de salud que Tedros dijo estaba de “rodillas. El jefe de la OMS añadió que el sistema de salud “se ha reducido a un tercio de lo que era”.
La afluencia de civiles desplazados (aproximadamente el 80 % de la población civil de Gaza) que se trasladan a escuelas de la ONU convertidas en refugios y hospitales ya superpoblados, se suma a la crisis a medida que continúan los combates.
La OCAH señaló que si bien se está distribuyendo ayuda limitada en los alrededores de Rafah, la distribución en el resto de la Franja de Gaza “se ha detenido en gran medida” a raíz de las hostilidades y la restricciones de movimientos.
El mes pasado un alto el fuego de una semana entre Israel y Hamás permitió que llegara ayuda, pero los expertos advirtieron que no era suficiente, dada la gran demanda.
La ONU aprobó por abrumadora mayoría una resolución pidiendo un alto el fuego inmediato en Gaza. La resolución también exige la liberación de los rehenes restantes, después de que 100 de los cuales fueran liberados durante el alto el fuego temporal del mes pasado
Estados Unidos e Israel estuvieron entre los diez países que votaron contra de la resolución, mientras 23 se abstuvieron.