El ejército israelí mató a 30 534 palestinos e hirió a 71 920 desde el inicio de su agresión contra la Franja de Gaza el 7 de octubre último, reportaron este lunes fuentes médicas del enclave palestino.
Esa cifra representa 4,34 % de la población gazatí, que antes de la guerra era de poco más de 2 300 000 personas.
Sin embargo, la cifra de muertos es, de hecho, mucho mayor.
Miles de cuerpos continúan insepultos bajo los escombros de una Franja semiderruida entre 60 % y 70 % de su espacio, construido sobre una superficie de apenas 365 kilómetros cuadrados, aproximadamente la mitad de La Habana.
“Es simplemente la tremenda velocidad del daño. Todos estos otros conflictos de los que estamos hablando [Ucrania, Siria, Yemen] duran años. En cambio, el nivel de destrucción en Gaza se ha llevado a cabo en poco más de dos meses”, dijo en diciembre Jamon Van Den Hoek, profesor de la Universidad Estatal de Oregón.
El experto en el mapeo de daños en zonas de guerra indicó que no solo es la escala de la destrucción, sino su ritmo. “No hay nada que se pueda comparar con este grado de destrucción en tan corto tiempo”, aseveró.
Por su parte, el periódico británico Financial Times hizo un análisis estadístico comparando el bombardeo israelí de Gaza con la campaña de bombardeos aliados sobre Alemania durante la Segunda Guerra Mundial.
Tres ciudades alemanas fueron destruidas desde el aire durante ese conflicto: Colonia, Hamburgo y Dresde. En Hamburgo y Dresde una mezcla de explosivos de alta potencia y bombas incendiarias crearon las condiciones de tormenta de fuego que hicieron derretirse las calles.
Para el pasado 5 de diciembre, el porcentaje de edificios de Gaza dañados o destruidos ya había superado la destrucción en Colonia y Dresde, y se acercaba al nivel de Hamburgo.
Incluso los expertos resaltan que las cifras de ataques aéreos no tienen en cuenta los miles de proyectiles de artillería disparados contra Gaza desde el 7 de octubre.
"Mi vida se acabó, mis hijos murieron, mi marido murió… que dios tenga piedad de ellos".
La madre palestina Rania Abu Anza despidió hoy a sus 2 bebés gemelos, Wissam y Naeem, que fueron asesinados esta noche junto su padre, debido a un bombardeo sionista a su casa en Rafah. pic.twitter.com/EezP64SRbX
— Daniel Mayakovski (@DaniMayakovski) March 3, 2024
Kamala Harris, consternada
La ofensiva militar israelí contra Gaza, que este lunes cumplió 150 días, se produce en un contexto de intensos contactos en El Cairo, Egipto, para buscar un alto al fuego y un intercambio de prisioneros entre Israel y el Hamás, según notificó un despacho de la agencia Prensa Latina.
La ONU advirtió que la hambruna es “casi inevitable“ para 2,2 millones de los 2,4 millones de habitantes del estrecho territorio, sometido a un bloqueo terrestre, aéreo y marítimo desde que Hamás tomó el poder en 2007.
Barrios enteros han sido arrasados y 1,7 millones de personas desplazadas. La mayoría viven hacinadas en Rafah, en el sur de Gaza, junto a la frontera cerrada con Egipto.
La situación humanitaria en la Franja de Gaza es “simplemente intolerable”, dijo este lunes, por su parte, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, expresó su deseo de que el Consejo de Seguridad de la ONU pida un alto al fuego en Gaza.
La petición de Borrell en la red X sucede después de que la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, se ha mostrado favorable a ello.
“Lo que vemos todos los días en Gaza es devastador. Hemos visto informes de familias que comen hojas o alimento para animales. Mujeres que dan a luz a bebés desnutridos con poca o ninguna atención médica y niños que mueren de desnutrición y deshidratación”, denunció Harris.
En un discurso pronunciado este domingo, la vicepresidenta estadounidense dijo que “dada la inmensa magnitud del sufrimiento en Gaza, debe haber un alto el fuego inminente, durante al menos las próximas seis semanas, dado que es (la propuesta) que actualmente está sobre la mesa”.
Incógnita sobre rehenes
Hamás afirmó este lunes que no sabe cuántos de los rehenes capturados por sus efectivos en el ataque del 7 de octubre en Israel y llevados a Gaza siguen vivos, de un total de 135 que quedaban retenidos luego de los primeros intercambios de prisioneros.
Desde El Cairo, Basem Naim, un dirigente de Hamás al frente de las relaciones internacionales, declaró que “es necesario un alto al fuego“ para poder llevar a cabo comprobaciones sobre los nombres, las cifras, el estado de salud de los rehenes y “si están vivos o muertos“.
Dr Basem Naim, a senior Hamas official, told the BBC that "practically, it is impossible to know who is still alive" because of continuing Israeli bombing.
Naim added that such "valuable information" about the hostages could not be given "for free." https://t.co/3BESzkhx7w
— Jacob N. Kornbluh (@jacobkornbluh) March 4, 2024
El tema de los rehenes es clave en las negociaciones en curso en El Cairo para lograr una tregua en Gaza antes de que el próximo 10 de marzo comience el mes sagrado del Ramadán.
El Gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu exige que Hamás entregue una lista de los rehenes y al no tenerla aún no ha enviado una delegación a El Cairo.
Los prisioneros están retenidos por varias facciones palestinas en diferentes lugares del enclave.
Persisten posiciones irreconciliables
Para aceptar un acuerdo, Hamás demanda el regreso al norte de Gaza de los desplazados, un aumento de la ayuda humanitaria, un alto al fuego definitivo y la retirada de los militares israelíes.
Israel rechaza estas condiciones y afirma que continuará sus operaciones militares hasta aniquilar a Hamás.
Otros frentes de guerra
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, advirtió en Ginebra que la guerra en Gaza puede conducir a una “conflagración mucho más amplia”, en referencia a los crecientes golpes y contragolpes en la frontera entre Israel y Líbano y a los ataques de los rebeldes hutíes de Yemen en el mar Rojo.
Rebeldes hutíes lanzaron este lunes misiles contra un buque propiedad de la compañía israelí ZIM Integrated Shipping Services, y le causaron daños en su estructura.
Por su lado, el buque Rubymar, con bandera de Belice, se hundió irremediablemente luego de ser alcanzado por un misil balístico antibuque hutí hace dos semanas en el estrecho de Bab el-Mandeb.
Su carga, 22 mil toneladas métricas de fertilizante, causará un desastre ecológico en el Mar Rojo.