Tras media década de lucha en el Congreso, Chile aprobó este miércoles una Ley de Identidad de Género que permite a los transgéneros el cambio registral de nombre y género, aunque excluyó a los menores de 14 años.
La Cámara de Diputados votó el proyecto con 95 a favor y 46 en contra. La semana anterior había sido aprobado por el Senado con 26 sufragios a favor y 14 en contra. La oposición de centroizquierda logró la mayoría con el apoyo de cuatro votos oficialistas.
Gran momento! Así celebramos aprobación de Ley de Identidad de Género. #LIGAhora no es un tema valórico, es un tema de derechos humanos. En @Liberales_Chile no nos perdemos. Desde el Congreso seguiremos defendiendo la libertad y la igualdad. #LosLiberales pic.twitter.com/wlROrjInwl
— Alejandro Bernales M (@abernales) 12 de septiembre de 2018
La ley permitirá a los adultos y a los mayores de 14 años cambiarse el nombre y el sexo registrado en su partida de nacimiento con un simple trámite en el Registro Civil. Entre los 14 y 18 años, los menores transgéneros necesitarán el permiso de uno de los padres o de un tutor, además del consentimiento de un tribunal de familia.
Las personas transgénero suelen percibir a temprana edad de que su cuerpo no responde al género al que sienten que pertenecen y, generalmente, son obligados a ponerse ropa y zapatos del sexo que rechazan, son discriminados en las escuelas, especialmente en el uso de los servicios higiénicos, en las consultas médicas y en otros ámbitos de su vida.
¡LO CELEBRAMOS! Cámara de Diputad@s votó y despachó el proyecto de ley de identidad de género, que patrocinamos hace más de cinco años. ¡UNA GRAN VICTORIA PARA LAS PERSONAS TRANS! #LIGAhora pic.twitter.com/0b8Iod0QAE
— Fundación Iguales (@IgualesChile) 12 de septiembre de 2018
Este año, la película chilena Una mujer fantástica, del director Sebastián Lelio, logró el Oscar a al mejor filme de habla no inglesa. La cinta retrata la relación de una joven trans con un hombre mayor y el maltrato al que es sometida tras la muerte de este, a manos de sus familiares y los agentes que investigan el deceso.
Su protagonista, la actriz trans Daniela Vega, es una fuerte activista por los derechos de la comunidad transgénero en su país.
“Los gobiernos deben entender los reclamos de la comunidad trans como una necesidad. Vernos como seres humanos y no como un grupo minoritario que aspiramos a que se nos complazca por un capricho. La nuestra es una necesidad porque la dignidad humana, que traspasa la corporalidad, es algo que no se puede negociar”, dijo Vega en una visita a Cuba el año pasado.
AP / OnCuba