On-Décimas: Un matrimonio rimado

Estas son unas décimas muy especiales. ¡¡Alexis y Lisset se casaron!! ¡¡Feliz unión!! ¡¡Feliz vida!!

Alexis y Lisset. Foto: Arlene Cabrera Díaz.

Ella: de blanco vestida.

Él: vestido de poeta.

Ella: elegante y discreta. 

Él: muerto de amor en vida.

Ella: de amor encendida.

Él: un pasional gourmet.

Ella: diosa del bouquet.

Él: feliz. Ella: luz toda.

¡Bienvenidos a la boda

de Pimienta con Lisset!

 

ACTA MATRIMONIAL

 

Yo, Ibis Rodríguez Migueles,

Notaria certificada,

a casar acostumbrada 

en diferentes niveles;

después de tantos papeles

y ejerciendo mi poder,

hoy, para corresponder

a tan lírico universo,

casaré a un poeta en verso,

que es como tiene que ser.

 

En la capital cubana,

31 el día, el mes,

julio, 2023

el año, en el Club Habana,

Lisset, joven ciudadana,

y Alexis, temba cubano,

a media tarde, temprano,

en busca de un doble SÍ

comparecen ante mí

(cogiditos de la mano).

 

Él es Alexis Andrés

Díaz Pimienta (poeta)

mayor de edad, con receta 

lírica contra el estrés.

(En el 2023

rimar es lo que se usa).

Y ella es, de amor reclusa

(mujer que ama sin más leyes),

Lisset Beatriz Argüelles 

Montesinos, novia y musa.

 

Lisset, cubana, habanera,

placeteña (doble pista) 

de ocupación periodista

y estado civil soltera.

Nacida en marzo (marcera).

Del 88 (aclara).

Lisset Beatriz, preclara

mujer que a la luz aturde,

hija de Manuel y Lourdes,

de Mayarí y Villa Clara.

 

Y Alexis, esta “beige cosa”,

habanero industrialista,

de profesión repentista 

y escritor (en verso y prosa).

Alexis, de voz nerviosa 

y palabra lisonjera.

Guajiro sin guayabera.

Tercer hijo —el hijo-esquina—

de Jesús y de Albertina,

pinareño y habanera.

 

Concurren por ellos mismos 

y en uso de sus derechos,

plenamente satisfechos 

sin cívicos atavismos. 

Concurren sin nerviosismos

y afirman de modo exacto

tener (en pleno contacto

y de manera verídica) 

la capacidad jurídica

necesaria en este acto.

 

Como notaria doy fe

de dichas declaraciones. 

Los contrayentes son clones 

del amor, eso se ve.

Y yo formalizaré 

el lazo matrimonial

que han concertado al final

con mucha más miel que luna, 

no habiendo denuncia alguna

de impedimento legal.

 

Les tengo que comentar

a los felices amantes 

artículos importantes 

del Código familiar.

La pareja debe estar 

en el mismo hogar presente.

Y deben celosamente 

guardarse, estímulo y reto,

consideración, respeto

y lealtad mutuamente.

 

Ambos están obligados

—un derecho y un deber—

a cuidar y a proteger 

la familia que han creado.

Ambos, como han afirmado 

en este acto que se quieren 

otro compromiso adquieren:

cooperar con voz y acción 

en la plena formación

de los hijos que tuvieren.

 

Toca entonces preguntar

a ambas partes si persisten,

si reconfirman, si insisten 

en que se quieren casar. 

Si quieren formalizar

el matrimonio conmigo.

Esto no es un juego, amigo.

Esto no es un juego, amiga.

Firmaré lo que se diga.

¡Y PICHI está de testigo!

 

—Lissett : ¿Aceptas casarte

con Alexis Díaz Pimienta?

ELLA: —Acepto. Me he dado cuenta 

de que amo una obra de arte.

Voy a la segunda parte.

La primera aceptó ya.

—Alexis: ¿Aceptará 

a Lisset como su esposa?

ÉL: —Claro que acepto. Es grandiosa.

¡Mire lo hermosa que está!

  

Habiendo ambos contestado

de manera afirmativa

y con la prerrogativa 

que la ley a mí me ha dado. 

No habiendo nadie dejado 

negativo matrimonio.

Sin haber más patrimonio 

que el AMOR, un común bien,

los declaro unidos en

legítimo matrimonio.

 

Y ahora sí, no falta nada.

Con papel y sin papeles,

yo, Ibis Rodríguez Migueles,

notaria certificada,

doy la boda por cerrada. 

Doy Fe de lo que es amarse.

Pueden ya desestresarse

que yo me voy a callar.

Ya pueden intercambiar

los anillos… y besarse.

 

(LOS NOVIOS VAN A BESARSE, PERO LA NOTARIA LOS INTERRUMPE)

 

No, no. Esperen un momento.

Se me olvidó algo importante.

Con tanta gente delante 

tal vez haya impedimento.

Tal vez algún descontento

hay con los enamorados.

Si alguien de los invitados 

se opone a este matrimonio

Que deje ahora el testimonio.

Eso sí: ¡en versos rimados!

Alexis y Lisset. Foto: Arlene Cabrera Díaz.

Yelene (sobrina de Alexis)

¡Me paso a la oposición!

¡¡¡Es que mi tía la Argüelles 

está incumpliendo las leyes

de la pimientización!!!

El Pimienta es un mangón, 

un Tembarriqui bonito.

(Perfume en frasco chiquito). 

Perdona que te lo diga: 

¡Tú sí que sabes, mi amiga!

¡Cogiendo mangón bajito!

 

Abel Geronés (cantautor y amigo)

Yo también voy a oponerme 

Porque lo vi en Internet :

Desde que está con Lisset 

ese muchacho ni duerme.

Me da miedo que se enferme.

No sé, que le dé una cosa.

Que por tener una esposa 

que es tan espectacular 

pierda el arte de rimar 

y termine hablando en prosa.

 

Alexander Benavides (artista y amigo)

Y yo me opongo, notaria.

(Oponerme me permito).

Porque él es “muy normalito”

y Lisset, extraordinaria.

Ella es de sonrisa diaria.

Ella es de porte elegante.

Ella es… ¡impresionante!

Y lo diré sin esfuerzo: 

¡Un guajiro que hable en versos 

para mí no es importante! 

 

Mirsi (alumna de Alexis, organizadora de la boda)

Yo escuché a Rubiera hablando

sobre el tiempo (sí, lo escucho).

Y él dijo: “Los que aman mucho

están el clima cambiando”.

Yo me opongo porque ando

empapada de sudor.

Estos se dan tanto amor

que ellos son los responsables

y verdaderos culpables 

de esta ola de calor.

 

Roberto Carlos Cruz (músico y amigo)

Yo me opongo porque creo 

—y eso nadie me lo quita—

que Lisset es muy bonita 

y Pimienta está muy feo.

Yo me opongo porque veo

que hay demasiado alboroto.

Yo me opongo porque noto

que hay mucho cabello en uno 

y en el otro no hay ninguno:

desequilibrio en la foto.

 

Leidys (nuera de Alexis)

Me opongo porque este “santo”

tiene tres hijos poetas 

y dos nueras y tres nietas, 

¡no puede alcanzar pa’ tanto!

Me opongo porque no aguanto 

que Alexa comparta abuelo.

Y porque su cerebelo 

salta al vacío y me agobia

pues desde que tiene novia

ya no se le ve ni el pelo.

 

Iván (hermano de Alexis)

Yo me opongo porque sí.

Porque no soporto intrigas. 

A menos que me consigas 

una Lisset para mí.

Yo me opongo porque fui

el primero que la vio.

Y me opongo, cómo no,

porque como se dan cuenta,

entre todos los Pimienta

el más poeta soy yo.

 

Javier (hermano de Lisset)

Me opongo como cuñado

porque yo soy escritor 

y creo que este señor 

ha escrito ya demasiado.

Encima nos ha quitado

a Lisset, mi única hermana.

¿Un guajiro de La Habana?

Eso es tremenda infladera.

¿Guajiro y sin guayabera?

Este puede salir rana.

 

Arlene (sobrina de Alexis)

Yo los veo tan hermosos 

Tan felices y esplendentes

que todos los oponentes

lo que están es envidiosos.

Algunos están celosos.

Malditos opositores.

¡Vivan los novios, señores!

Aunque eso sí: aquí hay engaño.

¿Casarse después de un año

durmiendo juntos en Flores?

 

(LA NOTARIA VUELVE A TOMAR LA PALABRA)

 

Después de haber escuchado 

los opuestos argumentos 

creo que todos son … ¡cuentos!

¡Ninguno ha clasificado!

¡Denegado! ¡Denegado!

¡Dejen la envidia! ¡A callarse!

(MIRANDO A LOS NOVIOS)

Pueden ya desestresarse.

Ahora sí, voy a callar:

ya pueden intercambiar

los anillos… y besarse.

Alexis y Lisset. Foto: Arlene Cabrera Díaz.
Salir de la versión móvil