ES / EN
- mayo 16, 2025 -
No Result
Ver todos los resultados
OnCubaNews
  • Cuba
  • Cuba-EE.UU.
  • Economía
  • Cultura
  • Cartelera
  • Deportes
  • Opinión
  • Podcasts
  • Videos
  • Especiales
  • Cuba
  • Cuba-EE.UU.
  • Economía
  • Cultura
  • Cartelera
  • Deportes
  • Opinión
  • Podcasts
  • Videos
  • Especiales
OnCubaNews
ES / EN
Inicio Opinión Columnas On-Décimas

Santi Feliú, el adoptado

Santi Feliú era un poeta tartamudo y zurdo que cantaba sus versos, un joven eterno que se dejaba el pelo largo y la barba bohemia para que todo aquel que pasara a su lado supiera, de golpe, los peligros de la zurdería, las bondades de la tartamudez, el desparpajo de la poesía.

por
  • Alexis Díaz-Pimienta
    Alexis Díaz-Pimienta
febrero 12, 2016
en On-Décimas
20
Foto: Alejandro Ramírez Anderson.

Foto: Alejandro Ramírez Anderson.

Santi Feliú era tartamudo. Como Wiston Churchil, Napoleón Bonaparte, Anthony Hopkins, Demóstenes, Lewis Carrol, Marylin Monroe (por citar solo algunos). Santi Feliú era zurdo. Como Beethoven, David Bowie, Bob Dylan, Kurt Kobain, Jimi Hendrix, Paul Mc Cartney, Mozart, Schumann, Atahualpa Yupanqui (por citar solo algunos). Santi Feliú era poeta. Como Silvio Rodríguez, Leonard Cohen, Lezama Lima, T.S Eliot, Borges, Vallejo, Eliseo Diego (por citar solo algunos). Y cantaba.

Santi Feliú era un poeta tartamudo y zurdo que cantaba sus versos, un joven eterno que se dejaba el pelo largo y la barba bohemia para que todo aquel que pasara a su lado supiera, de golpe, los peligros de la zurdería, las bondades de la tartamudez, el desparpajo de la poesía.

Así lo supe yo la primera vez que nos cruzamos en los años 80, en el ya mítico Patio de María, cuando todos éramos “feliuzmente” jóvenes (el flaco Ireno, la estilizada Gattorno, y hasta Migdalia, la viuda de Roberto Branly, y hasta el propio Branly, desde un retrato hecho, pensaba entonces, para las páginas de una enciclopedia). Y así lo supe cada vez que lo vi (pocas, por cierto) en La Habana, esa ciudad que lo adoptó, definitivamente. Porque los genios como Santi Feliú son siempre seres adoptados. Siempre. La ciudad, el país, los amigos, los hermanos, los colegas, las amantes, hasta los padres biológicos terminan adoptándolos, porque es mejor, más coherente con su forma de hacer, ser, ah-ser, lo más complejo.

Con creadores como Santi la adopción crea unos lazos más sanguíneos que la consanguinidad, hay algo de ejercicio responsable que define y mejora la relación, su envoltorio afectivo. Santi, al final, fue adoptado por todos. La Habana lo adoptó, Cuba lo adoptó, los demás trovadores lo adoptaron, incluso la música y la poesía fueron sus novias adoptivas. Pero quien mejor lo adoptó, fue, sin duda, la guitarra.

Su fiel guitarra, que lo aceptó todo. La zurdería, la voz ahumada, su aire de funámbulo feliz, su silencio cargado de puntos suspensivos, incluso su infidelidad instrumental, incluso sus coqueteos con la prosa. En sus canciones, si algo se ve a primera oída, es esa comunión perfecta (cuasi incestuosa) entre esa madre musical y el eterno hijo pródigo. Tan cómplices. Tan uno-para-el-otro. Tan mitológicos en su fusión hombre-instrumento.

Ahora parece fácil hablar de Santi y verlo así, hecho un Todo. Pero no nos engañemos. Santi Feliú, como los verdaderos genios, se fue haciendo de a poco, juntamos los demás sus pedacitos. Primero fue el hermano de. Y luego el autor de. Y luego el intérprete de y de y de, hasta que el flaco aquel adolescente y díscolo, sin nadie saber cómo, se sentó al piano y cumplió los 50. Los árboles del Patio de María se deshojaron de la risa el día que supieron (por la prensa, dicen) que Santi había cumplido 50 años. Branly mandó a comprar una botella, dicen, con una sola condición: que el primer trago lo echaran en la tierra, para él, el eterno anfitrión, el callado testigo. Yo (intuición o accidente) tomé un avión en Madrid y aterricé en La Habana. Durante más de 20 años mi relación con Santi había sido tangencial, solo tangencial: abrazos a su hermano, charlas con sus amigos, aplausos a su música,  siento que mis destellos ahogan tu brisa… citas de sus canciones en los oídos de varias Bárbaras que respondían a otros nombres.

La última vez que lo había visto, en Infanta y Manglar, donde por pocos meses no fuimos vecinos (cuando él llegó, yo me había ido ya del edificio), confieso que olvidé decirle, Santi, gracias, bróder, yo también te adopté, nos debemos un ron y unos poemas, bróder, yo soy zurdo también, ¿lo sabías?, pero, ¿no te acuerdas de mí?, yo soy aquel negrito que iba a la Peña de Ireno y María en Paseo y 37, antes que el rock y los aviones, antes que el punto guajiro… Pero él no responde. Tu brisa que presiento inagotable, azul, infinita… La última vez que nos vimos ni siquiera tuve el tino de advertirle que leyera los versos de mi admirado Gil de Biedma: “Que la vida iba en serio, uno lo empieza a comprender más tarde”.

Y ya ven, ahora es tarde, claro. Cuando tomé el avión y aterricé en La Habana en febrero del 2014, yo viajaba, como casi siempre, a la Feria del Libro. Y en medio del jolgorio literario, como un prosaico golpe en el mentón, me llegó la noticia. Y lo primero que pensé, desconcertado, fue un pelín egoísta: “anda, que uno se puede morir joven”. El desconcierto tiene eso: saca tus propios miedos y los coloca en el rostro del otro, del amigo adoptado, del genio muerto sin aviso, un miedo salpicado de etéreos “no me jodas”, de “no me lo puedo creer”, “¿Santi Feliú?”, “¿pero cuándo?”, “¿pero cómo?” En momentos así es cuando una gran ciudad, como La Habana, se vuelve un barrio chico.

Todo se sabe. Todos nos conocemos. Todos repetimos a coro (afinadísimos) el mismo “no me jodas” con los ojos abiertos. Así que al poco rato la noticia pasó de ser rumor o chisme de farándula, a nota necrológica y voz ceremoniosa de locutor televisivo. Y hablaron, pronto, de una cantata en los jardines del Instituto de la Música, de un homenaje póstumo.

Y por supuesto, yo, con todos los Santiagos, Santiaguitos y Santis que había conocido en la memoria, me alisté a ir, y a sentarme entre el público para rendir un silente homenaje al artista, al poeta, al músico, al amigo adoptivo. Llegué al jardín del Instituto con mi hermana y mis hijos. Y sucedió lo que sucede siempre en estos casos: parecía un concierto, un gran concierto suyo con cientos de fans dispuestos a escucharlo. Solo que esta vez Santi, el genio adoptado, no estaría en escena, tras el micrófono, con la guitarra entre los brazos. En su lugar, todo un ejército de admiradores cantaría sus temas, tocaría su música, le pondría voz a la incredulidad, al des-concierto.

Frank Fernández al piano. Gerardo Alfonso. Frank Delgado. Y muchos otros. Entre el público músicos y poetas, poeta-músicos. Su huérfano Vicente, por supuesto. Y Polito Ibañez. Y el dúo Buena Fe. Y Rochi Ameneiro. Y Otros. Como el narrador Abel Prieto, el novelista. Lo recuerdo porque fue Abel quien me contó, cuando yo pregunté pero cómo, cuándo, por qué, con mi cara de recién aterrizado, que Santi estaba en su casa de Infanta y Manglar, de madrugada, tocando el piano, cuando la muerte lo sorprendió con un agudo Do de pecho. “Estaba tocando el piano”, repitió Abel. Y a mí me sorprendió aquello: otro desconcierto dentro del des-concierto, porque en mi imaginario Santi seguía siendo un ser mitológico pegado a una guitarra.

“Estaba tocando el piano”, repetían todos. “Y la esposa embarazada”, insistían, otro octosílabo perfecto, aunque tan doloroso, que no me cupo luego en la garganta. El primero sí, era perfecto. Por eso cuando el propio Abel Prieto me pidió que subiera, yo también, y homenajeara con mis décimas improvisadas al amigo adoptivo que improvisó su muerte, no solo no pude decir no, sino que el primer verso estaba claro: era una foto octosilábica, evocadora, compartible, de esas fotos en las que luego todos nos sentimos “etiquetados”, algo equivalente a un “yo también estaba ahí” eterno. Así llegó mi turno.

Subí a escena. Tomé el micro. Pasaron, no sé, dos, tres segundos de silencio, y dejé que el cerebro encontrara qué decir, guiado por ese primer verso que ya era vox populi (“estaba tocando el piano”), y las décimas llegaron, fluyeron, se las pude decir, recitar, gritar, escupir a la muerte en la cara. Hablé con ella. La miré de frente. Hablé con ella y con Santi Feliú y con todos sus incondicionales adoptivos.

Luego bajé del escenario, escuché cómo todos aplaudían no a mí, sino a Santi, su concierto inesperado al piano, inesperado e interrupto. Y vi cómo luego todos me agradecían con abrazos y besos y lágrimas la foto colectiva. Algunos esa noche, y al día siguiente, y durante varias días, me pidieron las décimas, querían releerlas, publicarlas. Y una vez más tuve que contarles los gajes de la oralidad, y de la improvisación poética: no, no existe texto. Aquellas décimas nacieron allí, y allí quedaron. Recibí incluso varios mensajes por las redes sociales reclamando el texto, “el poema que escribiste para Santi”. Y tuve una vez más que “defender” mi “honor repentista”: lo siento, se perdieron, fueron improvisadas.

Incluso ahora, para este homenaje periodístico de OnCuba, la editora me pidió “el poema” que había escrito para Santi. Y aquí estamos. Volví a explicarle que había sido una improvisación. Pero, por suerte, le dije luego, estamos en el siglo XXI, y aquel ejército de admiradores estaba armado con videocámaras y teléfonos móviles. Gracias a eso, varios meses después mi amiga Yvette Carnota, otra testigo, localizó la grabación, transcribió el texto, y lo compartió en Facebook, ese otro barrio en el que todos nos conocemos y nos etiquetamos. Así llegaron hasta mí las décimas improvisadas para Santi Feliú a pocas horas de su muerte. Y así las pude “re-leer” y compartir con otros en mi Blog, ahora que la adopción de Santi se ha vuelto asignatura universal, en toda América y gran parte de Europa. Y así las puedo compartir, ahora, en OnCuba, con el mismo estupor con que nacieron aquella extraña noche. La secuencia es la misma. Imaginen, lectores: llega mi turno. Subo a escena. Tomo el micro. Pasan, no sé, dos, tres segundos de silencio, y dejo que el cerebro encuentre qué decir guiado por ese primer verso que ya era vox populi:

“Estaba tocando el piano”
Cuando sintió un dolor fuerte.
Callada llegó la muerte
Para callar al hermano.
Estaba tocando el piano
Tranquilo, de madrugada.
Estaba como si nada,
Como siempre, componiendo,
Estaba sueños tejiendo
Con el sol en la mirada.

Estaba tocando el piano
Cuando la muerte llegó.
Una canción se quedó
Sangrando entre mano y mano.
Estaba tocando el piano
Cuando se le fue la vida.
Su cuerpo tuvo una herida
Que no pudo soportar.
En todo Infanta y Manglar
Se escuchó su voz dormida.

Estaba tocando el piano,
Componiendo una canción,
Diciéndole a la razón:
Aún queda aquí un ser humano.
Estaba tocando el piano,
Donde quiera se escuchaba
Una tercera, una octava,
Una tecla, otra, su voz.
Y de pronto pasó Dios
Porque lo necesitaba.

Todo el mundo lo recuerda
Como un hombre coherente,
Viviendo derechamente
Pero soñando a la izquierda.
Su mano zurda concuerda
Con el zurdo ser humano.
Muerte, quisiste temprano

Callarlo, ponerlo triste.
Muerte, pero te jodiste:
¡Estaba tocando el piano!

Así fue que unas décimas que nacieron en la oralidad, en la improvisación, llegaron a la escritura, y han estado dos años esperando que algún músico las devuelva hecha canción, para cerrar el círculo. Aunque eso sí: tendrá que ser al piano, la manera perfecta de evocar el adiós de un gran poeta tartamudo y zurdo que cantaba sus versos, ese joven eterno, ese eterno adoptado.

Foto: Alejandro Ramírez Anderson.
Foto: Alejandro Ramírez Anderson.

 

Noticia anterior

El hentai y el eros japonés en un libro cubano

Siguiente noticia

Firmarán acuerdo sobre vuelos regulares entre Cuba y EE. UU.

Alexis Díaz-Pimienta

Alexis Díaz-Pimienta

Artículos Relacionados

Inmigrantes subsaharianos que intentaban llegar a Lanzarote en una patera. Foto: EFE/ Adriel Perdomo.
On-Décimas

OnDécimas: Letanía de los sin papeles

por Alexis Díaz-Pimienta
mayo 13, 2025
0

...

Trump durante una reunión de su gabinete, el 10 de anbril de 2025. Foto: EFE/EPA/SHAWN THEW / POOL.
On-Décimas

On-Décimas: Trump, aranceles, pingüinos

por Alexis Díaz-Pimienta
abril 14, 2025
0

...

Foto: Kaloian.
On-Décimas

On-Décimas: Tengo celos de la IA

por Alexis Díaz-Pimienta
abril 7, 2025
0

...

Tel Aviv (Israel), 04/02/2025. La gente pasa junto a un gran cartel que muestra al presidente estadounidense Donald Trump pidiendo completar el acuerdo sobre rehenes entre Israel y Hamás. Foto: EFE/EPA/ABIR SULTAN
On-Décimas

On-Décimas: El show de Trumpman

por Alexis Díaz-Pimienta
febrero 10, 2025
0

...

Foto: Kaloian.
On-Décimas

On-Décimas: Cuba 2024, Cuba 2025. Un resumen, mil deseos

por Alexis Díaz-Pimienta
enero 2, 2025
0

...

Ver Más
Siguiente noticia
Foto: EFE

Firmarán acuerdo sobre vuelos regulares entre Cuba y EE. UU.

El papa Francisco y el patriarca ortodoxo ruso Kiril, durante un encuentro en La Habana en 2016. Foto: Alessandro Di Meo / EPA / Archivo.

Francisco y Kiril en la capital de la unidad

Comentarios 20

  1. marymar says:
    Hace 9 años

    Nunca escribo comentarios en ningún sitio, pero ahora no puedo quedar callada y sin embargo no tengo palabras. Es Alexis Díaz-Pimienta, simple, grande, tierno, hermoso y contundente. Bellas palabras y bella canción. Ojalá encuentre la música que le corresponde.

    Responder
  2. El Kuko says:
    Hace 9 años

    Sencillamente Excelente como siempre Alexis es un improvisador genial ! Gracias por este artículo ! recordando a alguien que nunca se ha ido…

    Responder
  3. onalvis says:
    Hace 9 años

    alexis diaz pimienta estudio conmigo es un talento desde pequeno humilde de corazon muy inteligente buena persona te recuerdo amigo mio ojala encuentres el paralelo al poema lleno de amor armonia sentimientos y sobre todo sobrepasa la muerte .QUIEN SE RIE DE LA MUERTE SOLO EL QUE ESTABA TOCANDO EL PIANO.

    Responder
  4. Hugo Luis Sánchez says:
    Hace 9 años

    Gracias.

    Responder
  5. Yai says:
    Hace 9 años

    K Decir en momentos como este(,o como ese)cuando te enteras k un gran amigo,esposo,hermano,hijo,compositor,arreglista ,e interprete se va?pues solo k alli donde valla seguira alegrando s todos con su musica,desde alli mirara y cuidara a su esposa e hijo,y le cantara nanas ,desde alli escuchara como otros siguen su legado musical.Hasta siempre SANTIAGO FELIU !!!!
    Alexis Diaz Pimienta ,el mejor de todos ,haces esas decimas de corazon,con sencillez y bondad lograste entrar en el corazon de cada cubano,gracias por regalarnos tanto talento,gracias por tu poesia y esa bella sonrisa k contagia a todos.mi admiracion y respetos para ti ,k Dios te bendiga siempre.saludos desde New York

    Responder
  6. Sonia Schiaffino says:
    Hace 9 años

    Hermosas tus palabras! Santiago estará siempre en el corazón de los argentinos que lo amamos!!!

    Responder
  7. Lautaro says:
    Hace 9 años

    Santiago fue una hermosa persona, un talento único, un amigo de los de verdad. Lo conocí a sus 14 años yo tenía 8, desde esa tierna infancia nos hicimos amigos. Llore su partida, pero sé que llego a ser feliz. Murió feliz y vivió todo lo que tenía para vivir. Mateo conocerá a su padre seguro. Muy lindas palabras. Y aunque parezca increíble, Santi era diestro, agarro al revés la primera vez una y de terco nunca la dio vuelta. Así era el. Determinado y convencido.

    Responder
  8. Blanca Nieves García Cruz says:
    Hace 9 años

    Brillante, que exquisita la lectura que nos has regalado.. Muchas gracias por expresar con tus palabras poeticas el dolor que nos causa a todos esa perdida de quien nos acompanara siempre con el legado de su obra.

    Responder
  9. carolina says:
    Hace 9 años

    Emocionante verdaderamente, mis respetos

    Responder
  10. Ledys says:
    Hace 9 años

    Fantastico, yo estaba ese dia en el concierto de despedida, pero no estaba cuando expresastes esas decimas, manera hermosa para un gran hombre que su Santi

    Responder
  11. Julio Cintado says:
    Hace 9 años

    En esta batalla que es la vida, observó con pánico y estupor cómo caen casi en primera línea de fuego los soldados de mi generación . Me duele la pérdida, me entristece la ausencia y me aterra lo cotidiano que se convertido ver caer al lado a compañeros de lucha. Magnífico artículo .

    Responder
  12. Heriberto López says:
    Hace 9 años

    Genial, por sentidos los versos improvisados. Magnifico, por homenaje a tiempo a un merecido adoptado. Gracias miles por leer esto un día creado para homenajear a los amigos enamorados y estimados. Heriberto López.

    Responder
  13. Rosario Segovia says:
    Hace 9 años

    Viniste a estos pagos
    a inquietarnos el alma,
    con verdades amargas
    y amores encarnados
    Tus dedos adiestrados
    tocaron a la izquierda
    tu guitarra es protesta
    por tanto sufrimiento cruel
    El mundo y Cuba ha de saber
    tu canto fue una gesta.
    Dedicado con toda nostalgia y amor por sus obras, a Santiago Feliú, a dos años de su partida.
    Rosario Segovia
    Desde Chile

    Responder
  14. Claudia says:
    Hace 9 años

    Un grande Santiago!!!

    Responder
  15. Elsie Carbó says:
    Hace 9 años

    Hermosa crónica, te felicito

    Responder
  16. Martha says:
    Hace 9 años

    Conmovedoras tus palabras Alexis. Gracias!!! Santi era una persona especial y lo llevo en mi corazón!!

    Responder
  17. Mariela says:
    Hace 9 años

    Sublime …..

    Responder
  18. Ana says:
    Hace 9 años

    Lo amamos, está siempre presente, pero después de leer tu nota cayó mi estructura y puedo llorar !!!

    Responder
  19. Alexis Díaz Pimienta says:
    Hace 9 años

    Queridos lectores de OnCuba, gracias por sus comentarios. Una vez más, mis respetos y mi recuerdo lleno de admiración para Santi Feliú y su obra. Qué pena, pienso siempre, que la muerte nos sorprenda así, y que uno no pueda escribir estas cosas mientras el amigo admirador está en vida. Pero quién iba a pensar que pasaría. Y cuántas veces más debe pasarnos!En fin, un abrazo grande para todos. Y vida eterna a Santi.

    Responder
  20. Nanchy says:
    Hace 5 años

    EPD

    Responder

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

La conversación en este espacio está moderada según las pautas de discusión de OnCuba News. Por favor, lea la Política de Comentarios antes de unirse a la discusión.

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbete

Lo mejor de OnCuba, cada semana. ¡Únete a nuestra comunidad!

Más Leído

  • Putin Díaz-Canel_ Rusia Cuba

    Rusia dispuesta a ofrecer millones de dólares para incentivar inversiones de sus empresas en Cuba

    839 compartido
    Comparte 336 Tweet 210
  • Apagones en Cuba: Aumentan las termoeléctricas con problemas y los parques solares no despegan

    462 compartido
    Comparte 185 Tweet 116
  • La odisea del gas licuado en Cuba: comercialización en Villa Clara y Sancti Spíritus, pero escasez en otras provincias

    723 compartido
    Comparte 289 Tweet 181
  • Cuba autoriza a banco canadiense prestar servicios financieros al sector privado

    290 compartido
    Comparte 116 Tweet 73
  • Subastan pelota de béisbol dedicada por Fidel Castro a Antonio Pacheco

    134 compartido
    Comparte 54 Tweet 34

Más comentado

  • ¿Quién podría ser el próximo presidente de Cuba?

    666 compartido
    Comparte 266 Tweet 167
  • Turismo cubano: más que el honor en juego

    259 compartido
    Comparte 103 Tweet 65
  • La odisea del gas licuado en Cuba: comercialización en Villa Clara y Sancti Spíritus, pero escasez en otras provincias

    723 compartido
    Comparte 289 Tweet 181
  • 8 preguntas a Rodrigo García

    30 compartido
    Comparte 12 Tweet 8
  • El sector privado cubano no se ha debilitado, al contrario

    437 compartido
    Comparte 175 Tweet 109

Cannabidiol

  • Sobre nosotros
  • Trabajar con OnCuba
  • Política de privacidad
  • Términos de uso
  • Política de Comentarios
  • Contáctenos
  • Anunciarse en OnCuba

OnCuba y el logotipo de OnCuba son marcas registradas de Fuego Enterprises, Inc, sus subsidiarias o divisiones.
© Copyright OnCuba Fuego Enterprises, Inc Todos los derechos reservados.

No Result
Ver todos los resultados
  • Cuba
  • Cuba-EE.UU.
  • Economía
  • Cultura
  • Cartelera
  • Deportes
  • Opinión
  • Podcasts
  • Videos
  • Especiales
Síguenos en nuestras redes sociales:

OnCuba y el logotipo de OnCuba son marcas registradas de Fuego Enterprises, Inc, sus subsidiarias o divisiones.
© Copyright OnCuba Fuego Enterprises, Inc Todos los derechos reservados.

Consentimiento Cookies

Para brindar las mejores experiencias, utilizamos tecnologías como cookies para almacenar y/o acceder a información del dispositivo. Dar su consentimiento a estas tecnologías nos permitirá procesar datos como el comportamiento de navegación o identificaciones únicas en este sitio. No dar o retirar el consentimiento puede afectar negativamente a determinadas características y funciones.

Funcional Siempre activo
El almacenamiento o acceso técnico es estrictamente necesario con el fin legítimo de posibilitar el uso de un servicio específico solicitado explícitamente por el suscriptor o usuario, o con el exclusivo fin de realizar la transmisión de una comunicación a través de una red de comunicaciones electrónicas.
Preferences
The technical storage or access is necessary for the legitimate purpose of storing preferences that are not requested by the subscriber or user.
Estadística
El almacenamiento o acceso técnico que se utilice exclusivamente con fines estadísticos. The technical storage or access that is used exclusively for anonymous statistical purposes. Without a subpoena, voluntary compliance on the part of your Internet Service Provider, or additional records from a third party, information stored or retrieved for this purpose alone cannot usually be used to identify you.
Marketing
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para crear perfiles de usuario para enviar publicidad o para rastrear al usuario en un sitio web o en varios sitios web con fines de marketing similares.
Administrar opciones Gestionar los servicios Gestionar {vendor_count} proveedores Leer más sobre estos propósitos
Ver preferencias
{title} {title} {title}