Aunque gozaba de indudable capacidad táctica, Juan Corzo no fue un prodigio ajedrecístico. Más bien, un jugador que hizo sus mayores aportes en el campo de la divulgación del juego. Sin embargo, tiene alguna que otra partida memorable, inclusive una de ellas (como verá más adelante) a costa de José Raúl Capablanca.
Corzo nació en Madrid, España, pero llegó muy joven a Cuba, donde se aficionó por el ajedrez al presenciar en La Habana el primer match entre Wilhelm Steinitz y Mijaíl Chigorín. Por entonces se dio el lujo de entablar en unas simultáneas con el famoso Capitán Mackenzie, quien habló maravillas del promisorio mozalbete.
Su fuerza fue creciendo, y hacia 1898, con 25 años cumplidos, se convirtió en monarca nacional. La corona quizás habría durado bastante en su testa, pero quiso el azar que la escena de comienzos del siglo XX resultara propicia para la asunción de un genio.
Fue en diciembre de 1901 que Corzo y Capablanca –con solo 13 abriles- se enfrentaron en un match que deparó un nuevo campeón con score de +4-3=6. El inmensurable talento del futuro inmortal había podido contra Corzo, pero este no perdió la oportunidad de anotarse un triunfo trepidante.
Se trata de una Apertura Italiana que siguió los cauces del Gambito Evans, en la cual el hispanocubano dejó claro que, pese a no ser un romántico ‘a tiempo completo’, sentía predilección por el juego ofensivo y la elegancia sobre el tablero de 64 escaques.
Blancas: Juan Corzo. Negras: José Raúl Capablanca.
1.e4 e5 2.Cf3 Cc6 3.Ac4 Ac5 4.b4 Axb4 5.c3 Aa5 6.d4 exd4 7.0–0 d6 8.Db3 De7 9.e5 dxe5 10.Aa3 Df6 11.Cbd2 Ab6 12.Tae1 Cge7 [12…Ae6 13.cxd4 0–0–0 (13…Cxd4 14.Cxd4 Axd4 15.Dxb7+-) 14.dxe5 Dg6] 13.Ce4 Dg6 [13…Df4!? debería considerarse 14.Ceg5 0–0 15.Axe7 Cxe7 16.Cxf7 Cc6 17.C3xe5 Cxe5 18.Cxe5+ Rh8 19.cxd4 g6±] 14.Axe7± Rxe7 15.Ceg5
15…f6 [15…d3!? 16.Cxe5 Cxe5 17.Txe5+ Rf6 18.Axf7 Dxg5 19.Txg5 Rxg5 20.Dd5+ Rf6+-] 16.Da3++- Cb4?? conduce a un rápido final [16…Rd7 17.cxd4 Axd4 (17…fxg5 18.d5 Ad4 19.dxc6+ Dxc6 20.Cxe5+ Axe5 21.Txe5+-) 18.Ae6+ Re8 19.Af7+ Dxf7 20.Cxf7 Rxf7 21.Cxd4 Cxd4+-] 17.Dxb4+ [No 17.cxb4 Ag4 18.b5+ Rd7+-] 17…c5 18.Db3 h6 19.Cf7 Ah3 20.g3 [20.Ch4 lo haría todo más fácil para el Blanco 20…Dg4 21.cxd4 Dxh4 22.gxh3 Dxd4+-] 20…Axf1 [20…Thf8 21.C7xe5! un devastador golpe final 21…fxe5 22.Cxe5+-] 21.Cxh8 [Es inferior 21.Rxf1 Thf8 22.cxd4 Txf7+-; 21.Txf1 Thf8 22.cxd4 Txf7 23.dxc5 Rf8 24.cxb6 axb6+-] 21…Txh8 22.Axf1 Df7 23.Cxe5!
23…fxe5?? el negro cae [23…fxe5 24.Dxf7+] 24.Txe5+ Rf8 25.Ac4 Dc7 [25…Dd7 26.Db1 d3+- (26…dxc3 27.Ab5 c2 28.Dxc2+- (28.Axd7?? demasiado avaricioso 28…cxb1D+ (28…cxb1A?! 29.Te8+ Rf7 30.Txh8=) 29.Rg2 Rf7–+) ) ] 26.cxd4 cxd4 27.Df3+
[27.Df3+ Df7 28.Dxf7#]
1–0
LA FRASE: “Se puede sacar más provecho de una partida perdida que de cien ganadas”. José Raúl Capablanca.