Davide tenía 32 años cuando, mientras recorría el corredor principal de la Facultad de Ciencias Médicas de La Habana, un folleto llamó su atención. En aquella época era especialista de primer grado en Ginecología y Obstetricia en el Hospital Docente Ginecobstétrico “Ramón González Coro” de La Habana. No lo sabía entonces, pero aquel folleto cambiaría el rumbo de su vida y él se convertiría, un año después, en el primer médico gineco-obstetra cubano en obtener una Beca Chevening para estudiar en el Reino Unido.
“Me encontré la opción de la maestría en la misma Facultad de Medicina; recuerdo que la planilla de Chevening estaba expuesta en la entrada de la Facultad”, comentó a OnCuba Davide, quien terminó su maestría en 2002 y actualmente forma parte del staff médico del University College London Hospitals, en Londres.
“Cuando vi la planilla solicité autorización al decano y apliqué. Pasé la primera etapa y fui a la entrevista sin muchas expectativas. Eso fue en 2001. Pocas semanas después de la entrevista me notificaron que me habían aceptado y que Chevening estaría dispuesta a financiar mi maestría en el campo del diagnóstico prenatal, la medicina fetal y el ultrasonido, que era el área que me interesaba.”
No obstante, a esa altura del proceso y a pesar de tener aprobado el financiamiento de Chevening, Davide todavía debía garantizar que alguna universidad del Reino Unido diera el visto bueno a su proyecto de maestría y, además, obtener al menos una puntuación de 7 en la prueba del International English Language Testing System, conocida como IELTS.
“Entre los requisitos que especificaban para aplicar estaba hablar bien en inglés. Yo más o menos me defendía y, de hecho, en el González Coro eran famosos mis pases de visita quincenales, que hacía en mi inglés chamusqueado. Eso indudablemente me ayudó.”
Felizmente, Davide pasó la prueba y, al unísono, obtuvo la aprobación de la University College London (UCL). Vencidas esas etapas y con la garantía de la ayuda económica del programa de becas Chevening para costear su estadía, su sueño de convertirse en Máster en genética prenatal y medicina fetal en una de las diez mejores universidades del mundo estaba cada vez más cerca de realizarse. “Sin el financiamiento de Chevening no habría podido estudiar mi maestría en UCL; como la mayoría de los cubanos, ni siquiera soñaba con poder costear un curso de nivel superior en el exterior.”
Un año después, en septiembre de 2002, Davide defendió su tesis en UCL y regresó a Cuba, donde retomó su trabajo en el Hospital “González Coro”. No obstante, los caminos de la vida lo llevarían de vuelta al Reino Unido algunos años después.
“A mi regreso pude dar varias conferencias y contribuir con la discusión sobre Reacción en Cadena de Polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés) en la práctica clínica en obstetricia, que era algo de lo que apenas se hablaba en aquel momento. Entonces inicié un proyecto de investigación de diagnóstico del sexo fetal a través del ADN fetal en la sangre materna, que luego me permitió aplicar a un entrenamiento de un mes en la Universidad de Warrick. En 2007 me llegó una propuesta para hacer un diplomado en medicina fetal en el Kings College Hospital, en el que continúo trabajando hoy”, comentó a OnCuba.
Becas Chevening, una puerta de entrada a la educación superior británica
Como Davide, desde 1993 ciudadanos cubanos de cualquier edad y género pueden aplicar a las becas Chevening, cuya convocatoria para el año 2024 estará abierta hasta el próximo 7 de noviembre. Si son escogidos, durante un año los becarios tendrán la posibilidad de cursar maestrías en universidades de Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte y Gales.
El programa, promovido por el Gobierno británico, fue creado en 1983 y consiste en ofrecer financiamiento académico para personas interesadas en cursar maestrías a tiempo completo durante un año en el Reino Unido. Los candidatos deben obtener, en paralelo, la aceptación previa de cualquier universidad de la región.
Por ser un fondo destinado exclusivamente a la movilidad académica, el principal propósito de Chevening es ofrecer ayuda económica integral a aspirantes a cursos de maestría que 1) dominen el idioma inglés y lo hayan demostrado a través de pruebas de suficiencia como IELTS y TOEFL (estas últimas no son exigencia de Chevening desde 2020, y sí de las universidades a las que se aplica en paralelo) y 2) hayan obtenido aceptación previa de una universidad del Reino Unido. Además de estos requisitos básicos, la elegibilidad de los candidatos para la obtención de una beca Chevening depende de su capacidad de liderazgo y el plan de carrera que hayan proyectado, elementos que configuran su excepcionalidad en un proceso que suele ser altamente competitivo.
Para consultar los criterios de elegibilidad, inelegibilidad o postularse, los aspirantes pueden ver la descripción detallada sobre las becas aquí.
Según comentó a OnCuba Sir George Hollingbery, embajador Británico en Cuba, “el programa de becas Chevening es una oportunidad que ofrece el gobierno del Reino Unido para profesionales que no tienen los recursos o la posibilidad de tener una educación del más alto estándar en sus lugares de origen. También es favorable para nosotros como país, ya que personas talentosas de diversas nacionalidades nos visitan y aportan su cultura, su idioma y su comprensión del mundo a nuestras universidades y comunidades. Además, es una puerta a los valores británicos, para que otras personas conozcan nuestra sociedad y que, de alguna manera, lleven con ellas lo mejor que tenemos como país y puedan contribuir a mejorar sus propias realidades.”
Cubanos en el Reino Unido
A 40 años de fundado, el programa Chevening ya ha beneficiado a más de 55 mil becarios de diferentes nacionalidades.
Hasta el momento, 177 cubanos han recibido la ayuda económica que las becas conceden para cursar maestrías en universidades del Reino Unido, donde el acceso a educación superior de calidad supone costos elevados de matrícula y estadía. No obstante, cumplir el sueño de estudiar una maestría en Inglaterra u otra nación del Reino Unido ha dejado de ser una utopía para ciudadanos cubanos gracias a la existencia de fondos como Chevening.
Fue el caso de Liber Puente, ingeniero mecánico de formación, a quien en 2016 le llegó la feliz noticia de que había sido seleccionado para cursar la maestría en Administración de Negocios en la Universidad de Roe Hampton, Londres. No obstante, la confirmación de que podría matricularse al curso llegó después de que fuera seleccionado como becario Chevening.
“Haber sido electo como becario fue un cambio trascendental en mi vida profesional y en mi proyecto de vida personal. Desde mi perspectiva, lo mejor del Programa es que te permite entrar en contacto con profesionales de diversos países, además de darte la oportunidad de estudiar en universidades muy bien establecidas y experimentadas, junto con la posibilidad de integrarte socialmente en algunas de las zonas urbanas del Reino Unido”, dijo Puente a OnCuba.
A Liber, quien además es emprendedor y fundador de la empresa de soluciones informáticas TostoneT, la experiencia de movilidad académica le proporcionó un repertorio teórico y empírico favorable para replantearse el modelo de negocios de su emprendimiento, que había lanzado al mercado el 23 de octubre de 2012.
“Yo fui a Londres en septiembre de 2016. A mi regreso, en 2017, ampliamos y diversificamos el negocio”. La maestría le permitió “alcanzar una mejor y amplia perspectiva de este campo del conocimiento tan necesitado en nuestro país y que es una disciplina en desarrollo en el contexto regional e internacional.” Nada de eso habría sido posible sin la ayuda económica de Chevening.
En un área profesional totalmente distinta a la de Liber, la arquitectura, Gabriela García, a quien le fuera otorgada la beca en 2018, comentó a OnCuba que cuando aplicó a Chevening “tenía un plan de carrera enfocado en la rehabilitación de entornos urbanos. A través de la beca pude cursar el Máster en Rehabilitación Arquitectónica Internacional y Desarrollo, lo cual acabó fortaleciendo mi deseo de continuar enfocada en la línea profesional que me interesaba y, más que eso, diversificó mis aspiraciones.”
Gabriela, quien es máster por la Oxford Brooks University, señaló a OnCuba que, más allá de la experiencia de movilidad académica en sí, el Programa le permitió acceder a una red amplia de profesionales que han contribuido a su crecimiento profesional y al alcance de Our city, our space, una plataforma de debate para el desarrollo sostenible que fundó tras su regreso a Cuba.
El proyecto fue resultado de su paso por el Reino Unido y pudo materializarse gracias al apoyo del Chevening Alumni Programme Fund, un fondo que patrocina a algunos egresados del programa que, como ella, aspiran a liderar o crear emprendimientos con impacto social.
“La idea del proyecto nació durante mi estancia en el Reino Unido, cuando conocí a Leysi Rubio [ex becaria Chevening]. Juntas ideamos este sueño en el que se unía mi visión sobre el espacio público en la ciudad con la visión de Leysi sobre la comunicación“.
”Con el tiempo, otras personas, en particular de la red de alumni de Chevening y otros sectores fueron integrándose al proyecto, que evolucionó hacia una red de colaboración: PlacemakingX Cuba. Gracias al programa, hoy tengo acceso a su comunidad grandiosa y a otras. Pasar por Chevening también me ayudó a perder el miedo a dar pasos osados, tener iniciativa y arriesgarme profesionalmente. Además de eso, tuve acceso a la cultura británica, conocí gente nueva, cambié mi perspectiva. Entonces, más allá de hacerme cumplir la proyección de carrera que tenía, el paso por Chevening me permitió plantearme nuevos retos y sueños.”
El programa de becas cuenta con el financiamiento del Ministerio de Asuntos Exteriores, Mancomunidad y Desarrollo (FCDO) y organizaciones asociadas, entidades que proveen una cobertura financiera integral a los beneficiarios que incluye movilidad (pasajes de ida y vuelta), costos de obtención de visado, hospedaje, matrícula y un estipendio mensual.
“Chevening te apoya con todo para estudiar en el Reino Unido y te permite tener acceso a un sistema educativo muy prestigioso con programas de estudio muy interesantes, más allá del background económico que tengas y de tus posibilidades financieras. La beca te cubre los costos de pasajes, hospedaje y estipendio mensual y eso te permite enfocarte en tu crecimiento profesional allá y en absorber al máximo experiencia cultural, viajar por el país e intercambiar con otros estudiantes. Muchas actividades extra curriculares financiadas por el fondo de Chevening, una vez estás en la Mancomunidad, enriquecen la vivencia, tanto a nivel personal como profesional”, apuntó Gabriela García a OnCuba.
¿Qué hacer para aplicar si eres cubano o cubana?
Algunos criterios importantes de elegibilidad para los cubanos aspirantes a las becas son: ser ciudadano o ciudadana cubano/a; tener un pasaporte vigente y título de enseñanza superior legalizado y traducido oficialmente; regresar al país y permanecer en él por al menos dos años tras completarse su formación; haber concluido algún curso de nivel superior; tener al menos dos años de experiencia laboral; no haber recibido previamente apoyo financiero del gobierno del Reino Unido y haber obtenido al menos una oferta de una de las tres universidades elegibles a las que el candidato o candidata debe aplicar en paralelo al proceso selectivo de las becas, que es completamente online.
Las candidaturas deben seguir el cronograma establecido para cada etapa. En paralelo a la aplicación para la beca, los candidatos deben también documentarse individualmente sobre las opciones de cursos disponibles en las universidades que cubre el programa y postularse a estas.
La obtención de al menos una propuesta incondicional de una de las universidades a las que se aplicó es requisito imprescindible para que el candidato o la candidata se beneficien del apoyo financiero ofrecido por Chevening.
De acuerdo con Adriana Sigüenza, oficial de Chevening Cuba, además de otros datos referidos en la aplicación, “la competitividad de los candidatos parte de cuatro ensayos que demuestren sus habilidades o aspiraciones de liderazgo, de construir redes profesionales, la utilidad de un máster en el Reino Unido y el plan de carrera en Cuba a partir de dicho máster. Luego, si son seleccionados, los entrevistamos y a partir de ahí se hace la selección final.”
Las historias de Davide, Liber y Gabriela se suman a las de más de 170 cubanos que hasta hoy han podido vivir la experiencia transformadora que supone sumergirse en la educación superior y la cultura británicas. Hasta el 7 de noviembre próximo las puertas, y las posibilidades, estarán ahora abiertas para nuevos aspirantes.
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