Osvaldo Montero es uno de los compositores de moda de la música popular cubana. Tiene colaboraciones con grupos e intérpretes famosos de la Isla, como Anacaona, Los Ángeles y la Charanga Habanera, de David Calzado, pero no cierra la puerta a ninguna iniciativa que signifique un éxito más en su carrera.
Dice que en Cuba, escribir temas para géneros bailables puede resultar más rentable que hacerlo para otros estilos, aunque sabe que nada es absoluto. Además de compositor, es guitarrista y cantante, talentos que se complementan y ayudan a triunfar en un mundo muy competitivo.
Desarrollar su proyecto musical propio es la prioridad del compositor cubano, para consolidar una carrera prominente. Por eso apuesta por Luz Larga, una banda “para mis ideas como compositor, arreglista y cantante”, dijo a OnCuba el autor de temas populares en la Isla como Subasta de amor (con JG) o Llora si te duele (Anacaonas).
¿Cómo ha sido la experiencia al frente de Luz Larga?
Siempre quise hacer música de la forma en que verdaderamente la siento; y en otros proyectos, lógicamente, prevalecen los criterios de sus respectivos directores. Luz Larga es la agrupación que me ha permitido desarrollar mis ideas como compositor, arreglista y cantante. Ha sido una experiencia difícil porque tengo sobre mis hombros la responsabilidad de dirigir a varias personas con realidades diferentes. No obstante, es un trabajo muy gratificante que me permite brindarle al público lo que siempre he soñado.
Mi prioridad actualmente es ofrecer conciertos y desarrollar mi agrupación. Quiero seguir el largo camino de producir música y dar a conocer mis temas en otros países, sin descuidar al público cubano. Más allá de eso, continúo colaborando con artistas nuevos y agrupaciones populares cubanas.
¿Qué es lo que más te incomoda al trabajar con otros artistas?
Respeto todos los puntos de vista, pero las cosas absurdas o las ideas caprichosas, sin una base real y sólida, me pueden hacer sentir mal. No obstante, intento convencer a los demás, sin caer en la tentación de pensar que tengo la verdad absoluta.
¿Cómo fue el proceso de producción del disco Voy a ser yo?
Se trata de un material independiente que recopila sencillos de mi agrupación. Incluye temas como Voy a estar contigo o Baila como quiera. Yo produje todas las canciones con la colaboración de muchos amigos, entre ellos Halio Ávila, Juan Kemell, Carlos Lara (Anarkiólogo). También los músicos de mi agrupación me ayudaron a materializarlo.
¿Escoges los temas a partir de vivencias personales o te fijas en las experiencias de los demás para escribir?
Los compositores tenemos que escribir sobre todo lo que nos rodea y nos sucede. La búsqueda constante de experiencias nuevas y de explicaciones sobre nuestras inquietudes son las mejores musas que nos pueden acompañar a la hora de componer.
¿Qué consideras sobre el reconocimiento social a los compositores y los músicos en Cuba?
El trabajo de los compositores no tiene mucho reconocimiento en el país. La mayoría de las personas, incluso del medio artístico, no conoce quién es el autor de muchos temas y creo que eso sucede por falta de interés, o porque le dan poco valor al que escribe.
En los últimos tiempos, los artistas que más popularidad y reconocimiento internacional han alcanzado son aquellos que no tienen usualmente una buena promoción en los medios de comunicación nacionales. Hay ejemplos que demuestran que muchísimos artistas han tenido que salir de Cuba para que se les reconozca su trabajo.
Por ejemplo, Gente de Zona, Jacob Forever, El Chacal, Descemer Bueno, Los Orishas… Ahora mismo, Alain Pérez está nominado a los Premios Grammy después de vivir muchos años fuera de Cuba.
¿Qué debería suceder para que ese trabajo fuese más valorado en Cuba?
Es necesario que se hagan más proyectos para fomentar con respeto y calidad todos los géneros que se cultivan en la Isla, sin discriminaciones. Es importante hacer eco de lo más novedoso e interesante del talento nacional, el cual muchas veces no cuenta con las condiciones apropiadas. Solamente de esta forma se desarrollará nuestra música. Pienso que el reconocimiento alimenta al espíritu y estimula la creación.
¿Cuáles son las mayores dificultades que tiene un compositor joven cubano para ubicarse en el mercado musical?
Yo tengo una formación de música clásica, y mi mayor dificultad ha sido conquistar un público heterogéneo, así como buscar un lenguaje adecuado, sin vulgaridad ni banalidad, con el que se identifique una mayor cantidad de personas. En estos tiempos hay mucha gente que prefiere tendencias muy actuales que no siempre tienen un lenguaje cuidado. No obstante, he tenido mucha suerte de lograr una media donde mi objetivo, por lo general, logra cumplirse.
Creo que un compositor puede abrirse paso de manera exitosa dentro de la escena musical cubana si tiene perseverancia y suerte. También es importante mantener los códigos musicales actualizados. Estas cosas te pueden llevar a ser más efectivo, aunque todo depende también de los intereses de cada compositor y de las metas que tenga con sus canciones.
¿Te han censurado algún tema en los medios de comunicación?
En ese sentido he tenido mucha suerte, quizás por el cuidado que tengo a la hora de componer. Por ejemplo, en la radio nacional se ponen mis canciones y hasta ahora no tengo información alguna de que me hayan censurado nunca.
En la televisión no he corrido con la misma suerte, aunque tampoco han dejado de poner mis videos. Sin embargo, ha habido comentarios y observaciones de algunas personas con las cuales no coincidimos los realizadores y yo. Pero cada cual en lo suyo: lo mío es componer y transmitir mensajes de mis vivencias, y el arte en general tiene muchas lecturas.
¿Qué no puede fallar al intentar llegar como compositor, a artistas ya insertados en el mercado musical cubano?
Creo que son muchos los factores, pero en el mayor de los casos es necesario ser coherente con sus trabajos anteriores, y que tu propuesta sea atractiva para su carrera.
¿Es posible trazarse una carrera como compositor y artista y poder vivir de eso en la Cuba actual?
Como en cualquier parte del mundo, eso depende del éxito que tengas con lo que haces. En la actualidad hay más posibilidades para los artistas empíricos, pues con las tendencias de moda pueden hacer carrera y tener relevancia en el país. Esta realidad les permite vivir adecuadamente y, en muchos casos, mejor que otros músicos que han tenido una formación más académica.