El gobierno de España ha anunciado que el próximo 10 de junio se realizará la exhumación de los restos del dictador Francisco Franco enterrado actualmente en el conjunto monumental Valle de los Caídos, en lo que la vicepresidenta del gobierno ha llama “una tumba de Estado”, por todo el privilegio simbólico del que se autodotó Franco.
Los restos serían trasladados en inhumados nuevamente en el cementerio público El Pardo de Madrid, específicamente en el panteón Mingorrubio donde también está enterrada la esposa del dictador.
Con esta medida, el gobierno socialista de Pedro Sánchez pretende satisfacer las peticiones de quienes rechazan el enaltecimiento del dictador en su actual lugar de enterramiento.
Desde que Sánchez encabeza el gobierno, tras la moción de censura que expulsó a Mariano Rajoy del Partido Popular de la presidencia, el tema de la exhumación de Franco ha estado en su agenda.
El ejecutivo contó con un apoyo mayoritario del parlamento para hacer avanzar esta decisión, y continúa insistiendo en que se está cumplimentando lo pautado en la Ley de Memoria Histórica.
La familia de Franco, que se opone a este procedimiento, ha recurrido a la justicia buscando evitar la exhumación o proponiendo como lugar definitivo de inhumación la catedral de La Almudena, en el centro de Madrid.
El gobierno ha rechazado esta variante por considerar que representaría otorgar un nuevo lugar privilegiado de culto a Franco. “Ninguna democracia debe permitirse monumentos que ensalcen una dictadura”, ha dicho Pedro Sánchez.
No obstante la determinación del gobierno socialista, el logro de la medida en ese plazo dependerá de que el Tribunal Supremo decida no aprobar medidas cautelares, a pedido la familia, lo cual podría paralizar las acciones.
El próximo 28 de abril las diferentes formaciones políticas se medirán en elecciones generales en España.
Aún si no resultara vencedor Pedro Sánchez, la fecha del 10 de junio, según medios políticos, le permitiría ejecutar la decisión al propio gobierno socialista mientras no se produzca la nueva investidura, que podría demorarse, considerando que quedarían por el medio las elecciones autonómica pautadas para el 26 de mayo de 2019.
En el Valle de los Caídos están enterradas más de 33 mil personas, combatientes de ambos bandos caídos durante la Guerra Civil española. Los restos ni siquiera son identificables y no fueron dispuestos de forma indistinguible por las posiciones que tuvieron unos y otros durante la Guerra.