El ataque a tiros que el jueves dejó malherido a un diputado de la alianza oficialista y causó la muerte de un funcionario generó una gran conmoción en Argentina, que desde el fin de la última dictadura militar no era escenario de un hecho similar.
Héctor Olivares, diputado nacional de la Unión Cívica Radical por la provincia norteña de La Rioja, y Miguel Yadón, coordinador del Fondo Fiduciario del Transporte Eléctrico Federal de ese distrito, fueron atacados por dos desconocidos que les dispararon desde un automóvil mientras caminaban en las inmediaciones del Congreso por la mañana. El vehículo se dio a la fuga después del ataque.
El gobierno consideró que el hecho fue premeditado y mafioso” y tiene una “enorme gravedad institucional”.
El presidente Mauricio Macri dijo que la policía federal y la de la ciudad de Buenos Aires trabajan para esclarecer el ataque. “Vamos a ir hasta las últimas consecuencias para entender qué pasó y encontrar a los culpables”, sostuvo en un mensaje televisado desde la casa de gobierno.
Por su parte, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, dijo en conferencia de prensa que el ataque es “la constatación de las mafias que trabajan” en el país. La funcionaria consideró que el principal objetivo de los disparos fue Yadón, mientras proyectaba ante periodistas el video con las imágenes del ataque captadas por una cámara de seguridad de las cercanías del Congreso.
El video muestra un automóvil estacionado desde el cual salen varios disparos contra los dos hombres que pasan caminando por la acera del parque. Yadón cae muerto mientras el diputado se mueve con dificultad hasta que se recuesta sobre el suelo.
A continuación, del automóvil se baja un hombre corpulento que observa sin alterarse a ambos políticos sin volver a disparar mientras otro más joven también desciende del vehículo y luego se aleja caminando tranquilamente. Ante la llegada un policía, el coche huye lentamente del lugar.
El fondo fiduciario que coordinaba Yadón recibía recursos del sector privado para destinarlos a la ampliación del sistema de transporte de energía eléctrica. Entre 2004 y 2007, el funcionario fue subsecretario de Servicios Públicos en la provincia norteña de Catamarca.
Políticos señalaron que este es el primer ataque contra un miembro del Congreso desde el retorno de la democracia en 1983 luego de una dictadura militar de siete años entre cuyas miles de víctimas hubo legisladores.
Destacaron que en democracia, el atentado contra el diputado Olivares es el primero contra un legislador nacional desde el asesinato del diputado Rodolfo Ortega Peña y la bomba que destruyó el automóvil del senador Hipólito Solari Yrigoyen, quien logró sobrevivir, por parte de la ultraderecha peronista en 1974 y 1975, respectivamente.
La ministra Bullrich dijo que el vehículo de los agresores ha sido secuestrado y que ambos habrían sido identificados. “Creemos que tenemos a los asesinos pero no vamos a dar información porque necesitamos encontrarlos”, dijo la funcionaria.
Bullrich señaló que no se ha determinado el móvil del ataque, que calificó de “enorme gravedad institucional”.
Pablo Rossini, subdirector del Hospital Ramos Mejía, indicó que Olivares se encuentra en estado crítico a raíz de las lesiones causadas por un proyectil que “ingresó por el abdomen lateral izquierdo y tuvo salida en lateral derecho”. El diputado fue operado y podría ser intervenido nuevamente. En tanto, Yadón recibió varios impactos de bala letales.
Yadón y Olivares eran amigos desde la adolescencia y vivían en el mismo edificio en Buenos Aires, cercano al Congreso. Ambos se encontraban realizando su rutina diaria de actividad física.
Ulises Bencina, vocero de Olivares, dijo a The Associated Press que el diputado “es una persona de diálogo… Si las investigaciones demuestran que es violencia política estaríamos en presencia de un hecho institucional gravísimo”.
La Unión Cívica Radical es aliada del partido del presidente Macri.
El diputado Gustavo Galván, amigo y correligionario de Olivares, atribuyó el ataque a la labor parlamentaria que realizaba su compañero en el Congreso.
Olivares trabajaba en un proyecto de ley contra los barrabravas (hinchas violentos) del fútbol argentino y era uno de sus mayores impulsores. El legislador también es titular de la Comisión de Transporte de la cámara de baja.
En una entrevista la víspera con la televisión pública, el legislador cuestionó al gobernador de La Rioja, Sergio Casas, del Frente por la Victoria, por no fijar fecha para las elecciones provinciales después de haberlas suspendido. La Corte Suprema le había prohibido a Casas presentarse a su relección tras un reclamo de Olivares.
Todo el arco político, sindicalistas y otros dirigentes sociales repudiaron el ataque.
La expresidenta Cristina Fernández (2007-2015) publicó en su cuenta de Twitter: “Toda mi solidaridad con el diputado Héctor Olivares, con su familia y con la de Miguel Yadón. Exigimos el inmediato esclarecimiento del hecho”.
En tanto, el bloque peronista opositor Frente para la Victoria reclamó a las autoridades el esclarecimiento del ataque. Roberto Baradel, líder de un poderoso sindicato docente, dijo en tanto que el atentado configura “un claro ataque a la democracia”.