La bailarina Viengsay Valdés, elegida recientemente subdirectora artística del Ballet Nacional de Cuba(BNC), dijo que tiene como principal objetivo actualizar el trabajo de la compañía y mantener el legado de su histórica directora, Alicia Alonso, de 98 años.
“Tengo que mantener el legado de Alicia Alonso, pero también tengo que actualizar la compañía”, dijo al diario The New York Times (NYT) durante una visita a Nueva York la semana pasada.
Durante su viaje asistió a varias presentaciones y conversó con los líderes del New York City Ballet, el American Ballet Theatre y el Joyce Theatre.
Viengsay, de 42 años, explicó que iba a perfeccionar todo el trabajo de la compañía cubana desde la propia base e incrementar todos los detalles que tributen a su organización.
El influyente diario recordó cómo Viegnsay llegó a la cúspide del ballet mundial bajo la formación de Alicia Alonso.
“Bailando en giras internacionales con la compañía y como invitada en el circuito de gala, ganó elogios por su belleza y entusiasmo, y especialmente por sus giros interminables”, señaló el periodista Brian Seibert.
Seibert citó varios elogios dedicados a la cubana por conocidas figuras del ballet norteamericano, entre ellas Lourdes López, la directora cubana-americana de Miami City Ballet.
“La Sra. Valdés “es la elección perfecta”, dijo López. “Ella es un producto de la escuela y la compañía, pero también del país, y ha superado sus desafíos. Ella baila fuera de Cuba, pero se ha mantenido muy leal “.
Viengsay Valdés: Quiero que el Ballet Nacional de Cuba esté entre las mejores compañías del mundo
Valdés se refirió a los conflictos que trajo para la compañía la deserción de varios bailarines de relieve durante la década del 90, una de las coyunturas económicas más difíciles para la sociedad cubana. Causó “un agujero generacional”, afirmó la bailarina.
El NYT recordó, sin embargo, que la actual subdirectora artística del Ballet Nacional de Cuba, decidió quedarse en su país para desarrollar una carrera con la que ha sido reconocida mundialmente y obtenido premios de gran relevancia en la escena del ballet.
Viengsay insistió en su interés en modernizar lo más posible el BNC y actualizarlo acorde a los tiempos que corren en el mundo de la danza.
“Necesitamos obtener más información para nuestros bailarines”, expresó y reiteró su propósito de traer más coreógrafos extranjeros a Cuba para impartir talleres e impulsar el intercambio.
Viengsay Valdés nació en La Habana el 10 de noviembre de 1976, y vivió sus primeros años en Laos, donde su padre fungía como embajador de Cuba. A los 6 años regresó a La Habana, y a los 9 ingresó en la escuela de ballet hasta que se graduó en el Ballet Nacional de Cuba con 17 años.
Sus actuaciones en obras como El lago de los cisnes, Don Quijote, Giselle o El Cascanueces han sido aclamadas por el público y la crítica en los escenarios más prestigiosos del circuito internacional del ballet.