El superintendente escolar de Miami-Dade, Alberto Carvalho, ha retado olímpicamente al gobernador de Florida, Ron DeSantis, y se decidió por la obligatoriedad del uso de una mascarilla en el próximo año escolar que comienza el 23 de agosto.
“Yo acepto 100 % la recomendación de un protocolo de mascarillas obligatorio en nuestro sistema escolar”, dijo Carvalho, tras una reunión con el grupo de asesores en salud pública compuesto por médicos y especialistas.
DeSantis firmó una orden ejecutiva estatal a fines del mes pasado donde instauró un sistema según el cual serán los padres de los estudiantes quienes decidirán el uso de las mascarillas.
Pero Carvalho, cuyo distrito no responde directamente a las autoridades escolares de Florida, le llevó la contraria y desde el inicio siempre tuvo dudas sobre la efectividad de la medida ordenada por el gobernador.
La decisión final del superintendente pasa por la aprobación de la junta escolar, que se reúne este miércoles, aunque varios observadores han apuntado que Carvalho cuenta ya con la mayoría de los votos.
“Creo que es importante para nosotros llegar a una conclusión que afirme las recomendaciones de este grupo de trabajo”, enfatizó Carvalho, quien ha declarado públicamente que no responde a “presiones políticas”.
La semana pasada, la oficina del gobernador DeSantis amenazó con retener los salarios de superintendentes y funcionarios de juntas escolares que no cumplan la orden sobre el uso opcional de mascarillas. Carvalho contestó en ese entonces que no permitiría que una posible retención de su salario afectara su decisión.
Un par de días después, la oficina de DeSantis señaló que no podía retener los salarios de funcionarios públicos locales, pero que estaba facultada legalmente para reducir los fondos de un distrito escolar por una cantidad “que sea igual a los salarios del superintendente y a los miembros de la junta escolar”, según Christina Pushaw, vocera del gobernador.
La más importante contribución del estado en los gastos escolares la constituyen el desayuno y almuerzo de los estudiantes, momentos que para muchos, en Miami-Dade, resulta la comida mas importante del día.
La recomendación del equipo de médicos y expertos propuso un protocolo que incluiría, según Carvalho, “máscaras en los autobuses, distanciamiento social apropiado, mayor desinfección, así como el enmascaramiento obligatorio con adaptaciones según lo prescrito por un médico para estudiantes”.
Entretanto, el republicano Lubby Navarro, miembro de la Junta Escolar del condado, tuiteó recientemente: “No apoyo el ‘enmascaramiento’ de nuestros niños. Me mantengo firme en darles la elección a los padres. La voz más fuerte en nuestro sistema educativo son nuestros padres”, una postura que sigue la política republicana en el condado.
No obstante, fuentes afines a la autoridad escolar anticipan que la medida será adoptada y el sindicato de maestros United Teachers of Dade, opuesto al gobernador, también respaldó la sugerencia del equipo de expertos.
Florida es uno de los tres estados del país con mayor número de casos diarios por coronavirus, unos 30 000; y en el área metropolitana de Miami se concentran más de 3000 todos los días.