“Es ese tipo de jugador que, por sí solo, puede ganarte un juego de pelota. Tuvo una serie excepcional”. Esas fueron las palabras de Xander Bogaerts, torpedero de Boston, refiriéndose al brutal despliegue ofensivo del cubano Yordan Álvarez, quien se llevó de MVP de la Serie de Campeonato de la Liga Americana y condujo a los Houston Astros a su tercera Serie Mundial en los últimos cinco años.
Álvarez fue un auténtico dolor de cabeza para los Red Sox, al punto de que les conectó jit en cada uno de los duelos del match, además de anotar al menos una carrera en cinco de los seis choques, con particular destaque en los dos últimos.
Entre las noches del miércoles y el viernes, el tunero pegó siete cohetes en nueve turnos, con cinco extrabases, cuatro remolques y cuatro anotadas que fueron cruciales en las victorias de los Astros. Ese empujón final permitió al antillano terminar la serie con línea ofensiva de .522/.538/.870, números de otra galaxia que solo podían apuntar al MVP.
Para tener una idea, el promedio de bateo de Yordan es el más alto en la historia de las Series de Campeonato de la Liga Americana, superando sin problemas a Kevin Youkilis (.500 con Boston en el 2007), Alcides Escobar (.478 con Kansas en el 2015) y José Altuve (.462 con Houston en el 2020).
Este viernes, Álvarez estuvo perfecto ante la frenética fanaticada del Minute Maid Park de Houston, donde se corearon a viva voz sus cuatro imparables de la noche, incluidos par de dobles y un triple, los cuales representaron un récord para Cuba, pues ningún pelotero de la Isla había conectado antes tres extrabases en un mismo partido de postemporada.
Ya Yordan había enseñado su poder en el quinto choque de la serie en Fenway Park, donde pegó par de extrabases ante Chris Sale. Sumando su despliegue de los dos choques, el espigado slugger se convirtió en el primer cubano con 2+ extrabases en duelos consecutivos de play off.
Lo mejor es que sus batazos impactaron temprano en la pizarra. Por ejemplo, con su primer doble impulsó carrera y abrió el marcador para los Astros, y luego, tras llegar anclar en tercera por el triple, anotó la segunda con un gran corrido en una conexión por el infield de Kyle Tucker.
“Solo estaba concentrado en hacer el trabajo. Sabía de la importancia del partido y el ganarlo”, dijo Yordan al final del encuentro, cuando se convirtió oficialmente en el cuarto cubano que gana el MVP en una Serie de Campeonato, tras Liván Hernández (1997), Orlando “El Duque” Hernández (1999) y Randy Arozarena (2020).
Álvarez se unió al venezolano José Altuve (2019) y Justin Verlander (2017) como MVP ganador de la Serie de Campeonato de la Liga Americana de los Astros, después de que Mike Scott (1986) y Roy Oswalt (2005) ganaran el MVP de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional antes de que Houston cambiara de ligas.
El premio para Yordan estaba cantado, sobre todo después de sus cuatro imparables en la noche del viernes, cifra que solo un cubano (Yulieski Gurriel ante Boston en el 2017) había conseguido en partidos de postemporada. Además, el tunero se unió a su manager, Dusty Baker, como uno de los diez peloteros que han conectado cuatro jits en un partido de potencial clasificación a la Serie Mundial.
“Él golpea la pelota en el campo opuesto y se mantiene recta. No tiene un corte y todo el mundo sabe que puede tirar de la pelota, pero también tiene poder al revés. Solo va a mejorar. Y ha trabajado excepcionalmente duro para mantener las piernas juntas. Le operaron ambas rodillas y no sabíamos cuánto iba a jugar ni si iba a poder jugar en los jardines. Eso es un homenaje para él, el hecho de lo duro que ha trabajado y ha seguido trabajando para mantener la fuerza allí”, dijo Baker sobre Álvarez.
Ahora los Astros esperan por el ganador del duelo entre Atlanta y los Dodgers, quienes discuten el cetro de la Liga Nacional. Los Braves están a un paso (3-2) de consumar su primer avance a la Serie Mundial desde 1999, pero ya el pasado año desperdiciaron una ventaja similar ante los angelinos, quienes se aferran a la posibilidad de defender la corona.
Houston llegará a la instancia decisiva con tres cubanos en su nómina. Además de Yordan, también estarán Yulieski Gurriel y Aledmys Díaz, tridente que ya jugó un Clásico de Otoño en el 2019, cuando perdieron ante Washington.
Yulieski fue otro de los baluartes de los Astros en el duelo frente a Boston, a quienes les bateó .455/.520/.636, con 10 imparables, seis remolques, cuatro anotadas, un doble y un jonrón. El inicialista espirituano, flamante campeón de bateo de la Liga Americana, se recuperó tras una renqueante Serie Divisional (tres jits en 17 turnos y cinco ponches) ante los White Sox.
En el caso de Yulieski, ya sabe lo que es ganar una Serie Mundial tras su victoria del 2017 frente a los Dodgers.
Con información de Efe.