Con uno de sus ases en la lomita y ventaja de 2 carreras al entrar en la segunda mitad del partido, los San Francisco Giants pensaban que tenían segura su victoria sobre los Miami Marlins este lunes, pero a la altura del séptimo capítulo el cubano Jorge Soler se encargó de darle la vuelta a la pizarra con uno de sus violentos swines.
El slugger antillano entró en el cajón de bateo como emergente después de 2 outs en el inning de la suerte, que definitivamente tenía un botín reservado para la franquicia del sur de la Florida. Con el empate a 90 pies del plato, Soler no esperó mucho y mandó a volar el segundo picheo de Logan Webb, uno de sus más crueles verdugos en MLB.
Una slider de 83.2 millas se quedó justo al medio de la zona y el cubano la mandó a volar por todo el jardín central del del loanDepot Park, en Miami. La pelota salió disparada a 106.1 millas y recorrió 413 pies hasta perderse más allá de las cercas para darle la vuelta a la pizarra y dejar marcador definitivo de 4-3.
“Obviamente fue un gran batazo. Le dije que iba a estar disponible como emergente en su día libre, por lo que se encontraba listo. Seré sincero, no creo que pensara que iba a ser contra Webb; esa fue una de las razones por las que no jugó de titular. El jonrón es un testimonio de que todavía tiene confianza en que puede hacerlo, a pesar de que realmente lucha contra Webb”, dijo el manager de los Marlins, Skip Schumaker.
Estas palabras del mentor eran una clara referencia a lo mal que le había ido a Soler contra Logan Webb en su carrera. En total, sumaba 10 turnos en blanco y 7 ponches contra el lanzador de los Giants, que ahora no pudo dominarlo.
“Me preparé de la manera correcta con [el asistente del entrenador de bateo] Jason Hart y sentí que lo iba a hacer. Y eso no es fácil cuando tienes 0 de 10 con siete ponches contra ese lanzador. Fue un gran golpe, un gran momento y una victoria emocionante para nosotros”, aseguró Soler, quien ha estado lidiando con algunas molestias en la espalda durante los últimos días.
Según un reporte de MLB, esta es la cuarta victoria sin derrotas para los Marlins cuando Soler jonronea, en gran medida porque 4 de sus 5 bambinazos han sido para empatar o dar ventaja a su equipo. Ese nivel de oportunidad vivió su máxima expresión este lunes con el segundo cuadrangular de su carrera saliendo de la banca, luego del que conectara en el mismo rol el 21 de septiembre del 2015 frente a los Brewers.
Ningún jugador de Miami despachaba jonrón como emergente desde el 22 de septiembre del 2021, cuando Nick Fortes dio un estacazo de 3 carreras saliendo del banco en la novena entrada frente a Washington.
En total, son 60 los peloteros de los Marlins que han pegado vuelacercas como emergentes desde la fundación de la franquicia en 1993. El listado lo lideran con 3 bambinazos Preston Wilson (todos en 1999), Justin Bour (1 en 2015, 2016 y 2018) y Derek Dietrich (2 en el 2016 y 1 en 2017).
“Fue increíble. Tan pronto como lo golpeó, se quedó allí, y lo supimos. Soler es un tipo grande. Una vez que consigue un batazo sólido, lo sabes si se va. Estoy feliz de que él entrara como emergente en un gran escenario, y lograra conectar. Así que estamos súper felices”, dijo el abridor de los Marlins, Jesús Luzardo.
El zurdo aceptó 3 carreras en 4.1 innings y pudo cargar con la derrota, pero el trabajo combinado de 4 relevistas (4.2 episodios en blanco con solo un jit permitido) y el jonrón de Soler en el séptimo lo salvaron de la derrota.
Este fue el quinto cuadrangular de Soler durante la actual temporada, en la que ya suma 11 extrabases, válido para ubicarse entre los 12 jugadores de mayor slugging (.623) en Las Mayores. De acuerdo con un reporte de MLB, el 91.7 % de los jits de Soler este año han sido extrabases, el mayor porcentaje de Grandes Ligas entre todos los peloteros con al menos 10 imparables y 40 eventos de pelotas puestas en juego.
Además, este vuelacercas es el 139 en la carrera de “El Crudo”, cifra que lo ubica en la décima posición del listado histórico de la isla, justo por delante de José Cardenal (138). El ranking de jonroneros cubanos en Grandes Ligas lo encabeza Rafael Palmeiro (569), escoltado en el podio por José Canseco (462) y Tany Pérez (379), los únicos que han superado la barrera de los 300. El Top-10 lo completan José Abreu (243), Tony Oliva (220), Kendrys Morales (213), Orestes Miñoso (195), Yasmani Grandal (178) y Yoenis Céspedes (165).
Los Marlins juegan por encima de .500 (9 triunfos y 8 fracasos) en el Este de la Liga Nacional, división extremadamente complicada con Atlanta, los Mets y los Phillies como rivales más sólidos.