La primera parte de la temporada 2023 ya está en los libros de historia y, por tanto, tras el Juego de Estrellas, nos encontramos en un buen momento para analizar lo más importante que aconteció en los primeros tres meses y medio de la campaña.
El béisbol se jugó más rápido y la paridad reinó gracias a las nuevas reglas y a un calendario más justo. Por otro lado, presenciamos el primer juego perfecto desde 2012, un no hitter combinado, dos innings inmaculados y cuatro bateadores que consiguieron ciclos (sencillo, doble, triple y jonrón en el mismo desafío).
En el plano individual, me atrevería a decir que la carrera por el MVP de la Liga Americana ya cerró: no sabemos quién reina en el planeta de Shohei Ohtani, pero en el nuestro reina el japonés. En la Liga Nacional hay un bateador al que le llaman “La regadera” porque no se cansa de pegar jits. El venezolano Luis Arraez intenta batear para .400 en una contienda completa por primera vez desde 1941. Al mismo tiempo, otro morocho, Ronald Acuña Jr. puede convertirse en el quinto ser humano con una campaña de 40-40 (40 jonrones y 40 robos de base) en la historia del mejor béisbol del mundo.
Para los cubanos ha sido la mejor primera parte en la historia del “Big Show”, por ende, decidí comenzar analizando algunos apuntes de nuestros coterráneos, principalmente los que se ganaron el derecho de estar en el “Clásico de Verano”.
Entre todos los antillanos que van teniendo una gran temporada, quizás no haya uno que nos sorprenda más que Yennier Cano. Recordemos que el avileño debutó con 28 años en Las Mayores, en parte porque los Twins nunca vieron un gran potencial en él. Al poco tiempo de su debut en 2022 lo terminaron mandando a los Orioles en el famoso canje de Jorge López.
En lo que va de temporada, López lanza para una efectividad de 4.80 con un alto WHIP (Promedio de corredores embasados por entrada) de 1.33 y su ERA+ es 9 puntos inferior a la del relevista promedio (91). Yennier, en cambio, posee el cuarto fWAR (1.4) más alto entre los apagafuegos calificados de la Liga Americana, su efectividad es de 1.48 y el ERA+ es 183 veces mejor que el del relevista promedio (283).
Una de las recetas que Cano está empleando para conseguir el éxito es que está lanzando su sinker y el cambio de manera muy parecida, aunque con 6 millas de diferencia. Mucho se ha hablado sobre la evolución y los ajustes de Cano, como un artículo muy profundo de Mike Petriello en el que hace hincapié en su biomecánica y las métricas de sus lanzamientos.
Tras Yennier, no podemos obviar el impacto que ha tenido el dúo Yandy & Randy para los Rays, el mejor equipo de la Liga Americana. En la primera mitad de la contienda, Díaz se ha convertido en uno de los bateadores más completos del negocio, en parte porque su slugging se he elevado considerablemente. Ahora mismo, él y Ronald Acuña Jr. son los únicos bateadores calificados con un promedio de embasado (OBP) de .400 o más y un slugging de .500 al menos. A eso le sumamos que ambos está bateando más de .320, entonces, apreciamos la magnitud de lo que está logrando el villaclareño.
Randy, por su parte, tiene 16 jonrones —4 menos que su mayor cantidad para una temporada completa— y, al igual que Yandy, su tasa de golpes fuertes (conexiones de 95 millas o más de velocidad de salida) es la mejor de su carrera (50.9 %). Arozarena va siendo el jardinero de la Liga Americana con el mejor wRC+ (147).
Díaz y Arozarena poseen el mejor OBP de su liga (.408) y (.388), respectivamente. En la historia de este circuito, jamás un cubano ha terminado siendo el líder de OBP; veremos si alguno de ellos puede lograrlo.
¿Quiénes son los mejores jardineros en el nuevo circuito según fWAR?
Luis Robert 3.7
Adolis García 3.5
Mike Trout 3.1
Randy Arozarena 2.8
Entonces, tres de los cuatro patrulleros con más fWAR son antillanos. ¡Histórico! Todos sabíamos que si Robert estaba sano y mantenía la consistencia podía lograr grandes cosas. Pues hasta ahora va fijando el tercer mejor OPS de la Liga Americana (.899) y la segunda mayor cantidad de bases totales (193) y jonrones (26). Eso lo consiguió haciendo swing al 41.8 % de los lanzamientos que observa fuera de la zona.
Adolis sumó 75 remolques (líder de MLB) y 23 cuadrangulares en la primera parte de la campaña. “El Bombi”, uno de los bateadores más oportunos del béisbol, se convirtió en el quinto jugador en la historia de los Rangers que logra esas cifras en la primera parte de la temporada. Anterior a él, solo las lograron Juan Igor González (1998-99), José Canseco (1994), Iván Rodríguez (2000) y Josh Halminton (2012). El OPS de .848, aunque no parezca asombroso, sí lo es para el avileño, quien ha mejorado notablemente su OBP.
Yordan Álvarez estaba entre los tres mejores bateadores de MLB cuando entró en la lista de lesionados. Para ser justo, Álvarez es uno de los tres mejores bateadores de toda la Gran Carpa desde que debutó en 2019, pero, lamentablemente, se ha perdido mucho tiempo por distintas dolencias. En esta campaña solo ha estado en 57 de los 91 choques de los Astros, y, desde 2021, ha podido jugar en el 81 % de los choques que han disputado los siderales, sin incluir la postemporada.
Otro rostro cubano que ha sobresalido es Lourdes Gurriel Jr., quien está halando la bola más que nunca, a la vez, su slugging es decente y su porciento de ponches es inferior al del bateador promedio. Lleva 15 jonrones y 54 remolques en 79 choques; si mantiene ese ritmo establecerá récords personales en ambos parámetros. Hasta el sol de hoy, Arizona va saliendo bien del canje que hicieron con los Blue Jays a finales de 2022.
También debemos hacer una mención a Aroldis Chapman. En Kansas apostaron por una recuperación del zurdo y ganaron. Por eso lo terminaron canjeando a los Rangers, donde ahora tendrá la oportunidad de pelear por jugar en la postemporada. Su ritmo de ponches y prevención de carreras son top, la única mancha va siendo el control, pero esperemos que lo mejore en su nueva franquicia.
De cara a la segunda parte, ojalá Néstor Cortés (Yankees), Cionel Pérez (Orioles) y José Abreu (Astros) puedan recuperarse tras varios meses de mucha inestabilidad. Si logran corregir el rumbo serán un respaldo importante para sus equipos, que están en la carrera por llegar a la tierra prometida en octubre.
En sentido general, Cuba jamás había tenido siete jugadores en un All Star (pudieron ser ocho si no fuera por la lesión de Yordan), tampoco tuvo tres bateadores con al menos 23 cuadrangulares en una primera parte, ni seis con al menos 50 remolques. Todo eso ha sucedido en 2023, el año con la primera mitad más asombrosa de los cubanos en la historia de MLB.
El impacto de las nuevas reglas
Hablemos ahora sobre algunos apuntes que nos ha dejado la liga con los nuevos cambios de reglas. Para eso, tomé varias notas que les quiero compartir a continuación:
* En la primera temporada del reloj, el tiempo promedio de un juego de 9 entradas es de 2 horas y 38 minutos; va en camino de ser el más rápido desde 1984.
* Los bateadores zurdos están promediando .248,13 puntos más que en la pausa del Juego de las Estrellas el año pasado. Los derechos están bateando .248, un punto arriba, dejando el promedio general de bateo 6 puntos arriba respecto al curso anterior.
* Las carreras por juego han aumentado de 8.7 a 9.1 y los robos por juego de 1.0 a 1.4.
* La asistencia promedio de 28 404 personas aumentó un 8.1 % con respecto a un período similar el año pasado y está en camino de ser la más alta desde 2018.
En resumen, sabíamos que las nuevas reglas traerían buenas cosas, que los cambios serían positivos y el resultado se ha mantenido: más acción en los juegos en menor cantidad de tiempo y más asistencia en los estadios ¡Bingo! No todo lo que hace Rob Manfred es malo.
ShoTime no tiene límites
Shohei Ohtani sigue siendo espectacular y, como escribimos al principio, es muy probable que la carrera por el MVP de la Liga Americana haya terminado. “El extraterrestre” lidera todo el béisbol en OPS (1.050) y en jonrones (32). Para colmo, su OBP (.387) y average (.302) están entre los 10 mejores. Por si fuera poco, lidera el nuevo circuito en fWAR (4.3), wRC+ (181), wOBA (.433) y se ha robado 11 bases; todo eso lo ha hecho permitiendo el menor promedio de bateo (.189) cuando lanza y registrando el segundo mayor porciento de ponches (32.4 %) desde la lomita. No hay competencia para algo así.
¿Bateará .400?
Asombroso también es lo que va logrando Luis Arraez. El venezolano posee un promedio de .383 y no pierde la esperanza de batear para .400. Su OBP es de .434 y su slugging también es decente (.471), pero lo más impresionante es que solo se ha ponchado en el 5.2 % de sus comparecencias en home, el mejor porciento del béisbol. “La regadera” es el out más difícil de todo el negocio.
Persigue un 40-40
Arraez sería un candidato unánime para ganar el MVP de la Liga Nacional, pero su compatriota Ronald Acuña Jr. está poniéndole la vara un poco alta. “El abusador” quiere ser el primer jugador con un 40-40 desde el año 2006, cuando lo logró Alfonso Soriano. Ya tiene una parte del camino recorrida, porque lidera su liga en bases robadas (41). Ahora le resta seguir en la carrera de los jonrones (suma 21). Pero eso no es todo. Acuña tiene el segundo mejor slugging (582) de la Liga Nacional y está a solo 4 puntos del mejor (.586 de Mookie Betts). Solo cinco jugadores han logrado liderar su circuito en bases robadas y slugging en un mismo curso, pero el último fue Willie Mays en 1957.
Domingo Germán y la perfección
Pasaron 3969 días y 40 no hitters desde aquella calurosa tarde en Safeco Field (actual T-Mobile Park), en la que Félix Hernández recetó un juego perfecto. El destino y los dioses del béisbol quisieron que esperáramos más de una década para presenciar otra joya monticular de esa magnitud. En esta ocasión, ocurrió en Oakland la noche del pasado 28 de junio.
Al menos el viejo Coliseo de los Athletics, en una de sus últimas temporadas, ha logrado sumar otro evento histórico en sus anales. Me refiero al juego perfecto del dominicano Domingo Germán. Lo recordaremos por ser el vigésimo cuarto en la historia y el primero para un lanzador quisqueyano.
La perfección siempre es magistral y asombrosa, no por gusto es lo más difícil de lograr desde el box. Cada vez que tengamos la posibilidad de presenciar un juego perfecto seremos afortunados. En un año donde nuestro querido deporte está cambiando, pues le viene como anillo al dedo.
¡Elly show!
Debutó el pasado 6 de junio y ya es uno de los jugadores más queridos del béisbol. Con su alegría, picardía y dinamismo en el campo, Elly De La Cruz está conquistando el “Big Show”. En tan solo 33 días en MLB, ha logrado batear para un ciclo (es el quinto jugador más joven en lograrlo), también se robó segunda, tercera y home en la misma jugada, algo que solo había ocurrido 28 veces y no pasaba desde el año 2020.
En 30 juegos, está posteando una línea ofensiva (Average/OBP/Slugging/OPS) de .325/.363/.524/.887, con 4 jonrones y 16 remolques en 135 comparecencias. A los Reds les hará mucha falta de Elly para seguir luchando por un puesto en los playoff.
La paridad está en pleno apogeo
SI algo ha marcado la primera mitad de la temporada es la paridad. De los 10 equipos con más victorias de todo el béisbol hay 5 que se ubican entre las 10 nóminas que menos dinero gastan en Grandes Ligas: Orioles (segunda más baja), Rays (cuarta más baja), Cincinnati (quinta más baja), Marlins (octava más baja) y Arizona (décima más baja).
Al otro lado de la balanza, nos encontramos a algunos conjuntos que han invertido una fortuna sin buenos resultados. Los Mets, por ejemplo, con la nómina más alta de MLB, están jugando para 42-48, mientras los Padres (tercera más alta) tienen balance de 43 triunfos y 47 derrotas. Por último, los Angels, con la sexta más alta, exhiben un récord de 45-46.
Tenemos a unos Reds que dominan la división Central de la Liga Nacional, los D´backs están empatados con los Dodgers en la cima del Oeste y los Orioles están a solo dos victorias de liderar el Este de la Liga Americana. La paridad ha generado una competencia más equilibrada.
¿Eso es bueno para el béisbol? La respuesta puede variar dependiendo de cómo se mire. Por una parte, que la competencia sea pareja es positivo, pero el mercado puede sufrir impactos en el futuro si los equipos que más han invertido siguen con mal paso y otros con menos ingresos salen adelante gracias a la analítica, la sabermetría y el cuidadoso manejo de las granjas.
De momento, esta última variante cobra fuerza, pero el tiempo dirá la última palabra. ¡Bienvenidos a la nueva era del béisbol!