La embajada de Estados Unidos en Puerto Príncipe, Haití, se ha blindado encerrándose en sí misma tras la súbita agudización este miércoles del clima de violencia a su alrededor, alertó una fuente de la entidad a OnCuba.
El Departamento de Estado ordenó que todo su personal, sea diplomático o empleados haitianos, se mantenga alli hasta que desaparezcan los tiroteos que se escuchan a su alrededor y se logre un perímetro de seguridad para los centenares de haitianos que se presentaron en el lugar buscando refugio al final de la tarde del miércoles.
En un comunicado, la embajada hizo un llamamiento a la población para evitar la zona, abstenerse de realizar manifestaciones o grandes reuniones, no intentar atravesar barreras en las calles y dirigirse a un área segura.
La espiral de violencia se disparó durante las últimas semanas luego de la virtual ausencia de poderes públicos. La policía disolvió una manifestación no autorizada con gases lacrimógenos, pero los tiroteos de las pandillas se reactivaron durante la mañana de este miércoles.
Entretanto, en Estados Unidos funcionarios del Departamento de Estado y el Pentágono han contactado a Naciones Unidas sobre la posibilidad de promover otra invasión para lograr la pacificación. La última vez que eso sucedió, en la década de 2000, la ocupación duró casi diez años, con la coordinación de Estados Unidos y Brasil.
“Mucha gente aquí habla de otra misión de paz, pero no veo nadie en el Gobierno (haitiano) queriendo asumir la responsabilidad”, agregó una fuente de la embajada.