Antes (no hace mucho), solo un par de Panamericanos atrás, los cubanos no le prestábamos mucha atención al medallero, solo lo consultábamos por complacencia. Lo hacíamos por mero cumplimiento, para decir que estábamos al corriente con los Juegos y que todo marchaba acorde lo esperado (siempre detrás de Estados Unidos y en la segunda plaza). El tiempo pasó y ese vistazo se ha transformado en una ojeada de terror, nos asomamos a la tabla de medallas con rostro ambiguo y sin querer mirar.
El pálido quinto lugar en el que amanece Cuba en Toronto no es común, no es digerible, es un golpe bajo que ha doblado a más de uno. Uno mira lo que le queda a los cubanos por competir en Toronto y parece una utopía pegarle el aliento en la nuca a Canadá (relegada al segundo escaño por los estadounidenses) o darle caza a Brasil en la tercera posición y, se supone, que a Colombia se le pase por al lado para que nos entrega ese cuarto escaño porque ya sería demasiado el descalabro, la pesadumbre.
Las cosas no han ido bien, preseas que se esperaban no cayeron, resultados claros se diluyeron, Cuba la tiene difícil, está contra la pared, casi no le quedan opciones de darle un vuelco a la justa: óleo perfecto que muestra el estado del deporte cubano.
Béisbol: “Ya no somos lo que éramos”
Cuba no llega a una final de Juegos Panamericanos en el béisbol desde Río de Janeiro en 2007. Después de encadenar 36 años (desde Cali 1971) accediendo a la discusión del trono continental, la selección nacional ha salido de ese sitio predilecto, Estados Unidos se ha encargado de despojarlo (ahora en Toronto y en Guadalajara 2011).
“Hemos perdido esa capacidad de ganar los partidos importantes, los buenos, antes nosotros no perdíamos un play definitorio con los americanos. Cuesta creerlo y duele, hay que decirlo, la pelota en Cuba no es la misma, la gente nos enfrenta sin miedo y eso refleja que ya no somos lo que éramos, seguimos en la élite pero ya no estamos en la cima”, nos comentó desde La Habana, Pedro Medina, gloria del deporte.
Medina luce frustrado por el fracaso del béisbol cubano en Toronto pero no deja de ser categórico y objetivo. “Nadie quiere perder, pero uno podría vaticinar este final, los topes que tuvo ese equipo Cuba demostró todas sus falencias, era un equipo con muchas limitaciones”, sentenció.
Los integrantes de la selección nacional no se lo creen, tenían el partido en las manos y vieron cómo se les escurrió, sin más ni más, como agua. “Hice mi trabajo, los dominé, pero esto es un trabajo de todos, los compañeros que vinieron detrás para relevarme no pudieron aguantar y se dio ese resultado, son cosas del béisbol. Nos queda solo el consuelo de que luchamos y lo dimos todo en el terreno” nos expresó el lanzador pinareño Yosvani Torres tras la derrota ante los Estados Unidos.
Uno de sus coterráneos, Liván Moinelo, uno de los que no pudo hacerse justicia frente a los norteños, nos dijo: “Tenemos una gran pena con toda Cuba, nos quedamos cortos, pero al menos alcanzamos la medalla de bronce”. Mientras, Roger Machado, director del plantel, tras obtener el tercer puesto del certamen, le brinda un balance general a OnCuba: “Por supuesto que estamos tristes, por supuesto que queríamos llegar al oro, pero no se pudo, obtuvimos un meritorio tercer lugar. Los muchachos lo dieron todo, se entregaron. El deporte es así, siempre no se puede ganar”.
Machado, en su reflexión, le da una gran importancia a los inconvenientes que tuvo el equipo: “No es para justificar, pero uno no puede esconder las cosas. Nosotros perdimos dos jugadores importantes antes de llegar a aquí, teníamos además a Mendoza lesionado, todo eso nos jugó en contra y afectó nuestras aspiraciones”, zanjó.
Rudy Reyes, líder de los bateadores del torneo, nos opinó que “perdimos pero dándolo todo, no nos guardamos nada, es un resultado que no esperábamos pero se dio, esa es la pelota. La manera en que hemos alcanzado el bronce nos da algo de aliento”.
En la discusión por el tercer lugar, Cuba dejo tendido en la grama del Ajax en la novena entrada a la selección de Puerto Rico. Los boricuas llegaron ganando al último capítulo 6 por 3, pero los cubanos combinaron jonrones consecutivos de Yorbis Borroto (con 2 hombres en base) y José Adolis García para sellar el triunfo.
Barrer con todo el mundo
Los dos únicos cubanos que no corrieron con suerte en el sorteo del boxeo fueron Erislandy Savón y Leinier Perot. Ambos tuvieron que cruzar guantes desde los octavos de final, mientras, sus compañeros de escuadra esperan a que el organigrama avance hasta los cuartos de final para subirse al ring.
Savón no tuvo problemas, ningún contratiempo y venció categóricamente a su rival. Tras el fácil combate, le señaló a OnCuba que “en lo personal yo prefiero empezar antes para ir calentando, me sentí cómodo, sin mucha exigencia, no espero otra cosa que el oro”.
Por su parte, Perot tampoco sudo mucho ante su oponente y sumó la segunda victoria de los cubanos en lo que va de Panamericanos. “Es bueno para nuestros compañeros estas victorias, eso nos impulsa, la idea es barrer con todo el mundo”.
Deportes colectivos siguen sin carburar
Si alguien puede cambiarle el rostro a la actuación de Cuba, eso son los deportes colectivos. Motores al fin, no hay nadie que mueva más adrenalina que ellos. En la última jornada, los varones del voleibol se sacudieron de la paliza recibida por los argentinos, para hacerle pagar los platos rotos a los auriverdes brasileños.
Ahora los pupilos de Rodolfo Sánchez archivan una foja de 1-1 y buscaron su pase a la próxima etapa en el postrero partido de su grupo clasificatorio. “Caímos ante Argentina, pero nos recuperamos para batir a Brasil, estamos vivos, tenemos posibilidades de seguir avanzando y luchar por las medallas”.
En tanto, las chicas del baloncesto cayeron ante Estados Unidos en la disputa del pase a la final. Y de esta forma tendrán la posibilidad de luchar por el tercer escaño en la próxima jornada. Alberto Zabala, DT del conjunto nos habló: “Estaba previsto este resultado, a pesar de que hemos hecho muy bien las cosas, más o menos era esto lo que estaba en los planes pre-competencia. Ahora nos queda luchar por estar en el podio”.
Una de las puntales del elenco femenino, Kenia Noblet, dio sus impresiones del torneo: “Hay que saber perder, ellas fueron mejores (se refiere a las norteñas), pero eso no nos quita que hayamos tenido una gran competencia”. Oyanaisis Gelis también piensa que “Cuba hizo bien las cosas, nos queda una sensación rara porque a nadie le gusta perder y menos de esta manera, pero hemos hecho lo que veníamos a hacer”.
Aguirre y Estupiñan traen las alegrías de la fecha
La taewandoca de los 49 kg Yania Aguirre alegró la fecha con su metal dorado. Fue paso a paso, derrotando a cada una de sus rivales, despachó en la ruta al oro a peleadoras de nivel como la guatemalteca Elizabet Zamora y la mexicana Itzel Manjarrez.
“Quiero dedicarle esta actuación a mi familia en Cuba y a mi entrenador que no dejaron de confiar en mí. Desde que me levanté en la mañana, sabía que iba a tener un gran día. Me merecía ya una actuación internacional a esta altura, estoy muy alegre conmigo mismo” nos comentó Aguirre.
Mientras tanto, el otro oro de la jornada llegó de la afinada puntería de Reinier Estupiñan quien se consagró como el mejor tirador a 50 metros en tres posiciones. El capitalino instauró una nueva marca para esta justa, al puntuar 450.4 unidades. “Es un gran resultado, trabajé muy duro para conseguirlo, la competencia fue durísima, estoy muy contento por ser el rey de américa” nos declaró el campeón panamericano.
Una de cal y una de arena
La dupla de Lianma Flores y Leila Martínez ya están en la final del voleibol de playa de estos Juegos. Lograron su boleto al derrotar en semifinales a las anfitrionas canadienses de Melissa Humana y Taylor Pischke en un emocionante partido que se extendió hasta el tie break. (Foto 3)
El choque fue bien parejo todo el tiempo, sin que hubiera un desbalance, hasta que las nuestras en el último parcial se emplearon a fondo con su potencia en el servicio y en el ataque para desestabilizar la defensa de sus rivales. Una vez concluido el encuentro, Flores nos dedicó unas breves palabras: “Vinimos a luchar y eso estamos haciendo, fue una gran victoria ante las canadienses que jugaron ante su público, ahora nos queda enfocarnos para tener un buen partido final”.
En tanto, la pareja masculina de Sergio González y Nivaldo Díaz no corrió con la misma suerte y cayó en semifinales ante el fortísimo dueto brasileño de Alvaro Magliano y Vitor Araujo. De esta manera, lucharán mañana por acceder al podio de premiaciones cuando disputen el metal de bronce.
Perdieron dos jugadores y Mendoza no pudo pichar,pero que ha hecho Mendoza realmente,la mayor parte de su tiempo en Japon ha sido en ligas menores y en el equipo grande solo ha tirado 3 entradad le han echo una carrera,y un partido de pelota esta en la mano cuando se saca el out 27.
Sin querer hacer leña del arbol caido, a esa frase de Machado “Nosotros perdimos dos jugadores importantes”, yo le responderia a aquella pretensiosa del finado Hector Rodriguez cuando se quedo uno de los puntales del pitcheo: “Eso no nos preocupa, tenemos peloteros hasta para hacer dulces”.
Bueno, parece que la mata se seco…
No sé que harán o qué podrán hacer los directivos del deporte en Cuba. Se supone que se había realizado la máxima peparación posible para todos los atletas y equipos colectivos, se habían invertido todos los recursos y dineros necesarios, se había realizado los análisis más profundos para esta importantísima competencia, entonces, ¿Qué quedaría por hacer? ¿Cuánto más habría que invertir? ¿Qué otra estrategia adoptar? La pregunta es, repito, ¿Qué hacer ahora?
Lo que sucede con el deporte general en cuba no solo en beisbol es que esos deportistas son nacidos la gran mayoria en pleno periodo especial o estaban bien pequeños y no tienen ese extra para sacar gracias a la ambruna de esos tiempos q gustale o no esa mala alimentación tarde o temprano sale.