El empresario y corredor de seguros dominicano José Uribe testificó este lunes que el senador demócrata Bob Menéndez le comentó en el verano de 2019 que “investigaría un caso penal estatal que amenazaba su negocio” y luego le aseguró “que no había amenaza”. Por ello, “se jactó de haberlo salvado”.
En ese momento, según trascendidos, Uribe asumió que Menéndez sabía que él había hecho un pago inicial de 15 000 dólares y que estaba haciendo pagos mensuales por un Mercedes-Benz para la entonces novia de Menéndez, su esposa un año después.
Los fiscales sostienen que el automóvil, junto con los lingotes de oro y cientos de miles de dólares en efectivo encontrados en la casa de Menéndez, en Nueva Jersey, fueron sobornos pagados por tres empresarios, incluido Uribe. Estos pagos buscaban que el senador usara su influencia para servir sus propósitos y favorecer sus negocios.
Testigo estrella en el caso que se le sigue al senador por Nueva Jersey, Uribe trató de convencer al jurado de que tenía una gran relación amistosa con Nadine Menéndez, la esposa del congresista.
Los abogados defensores de Menéndez han argumentado que la reunión que sostuvo con Uribe, no era más que “una reunión de un senador con los electores”, en la cual estaba haciendo lo que podía “para ayudar a su estado en su papel como uno de sus representantes en el Congreso.
Menéndez se vio obligado a renunciar a su poderoso puesto como presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado después de que se revelaran los cargos el otoño pasado.
Durante los dos días de testimonio, que comenzaron el pasado viernes, Uribe contó que había conocido a Menéndez en un evento de recaudación de fondos donde recaudó 50 000 dólares para la campaña del senador en 2018. Pero dijo que no mencionó el tema de las investigaciones allí ni en varias otras reuniones.
Según su testimonio, citado por varios medios, dijo que pensaba que el tema ya había sido planteado a Menéndez por su amigo, Wael Hana, un empresario que comentó a Uribe en 2018 que el senador “podría ser reclutado para ayudar a que sus problemas legales desaparecieran, pero que costaría entre 200 000 y 250 000 dólares”, según reporte.
Hana y un tercer empresario, Fred Daibes, están siendo juzgados junto con Menéndez. Al igual que Menéndez, se han declarado inocentes. A la espera de juicio está Nadine Menéndez, quien se recupera de una cirugía. También se ha declarado inocente.
Jose Uribe, quien se declaró culpable en marzo y coopera con la fiscalía, fue interrogado en el estrado de la corte. Declaró al jurado que había sobornado a Menéndez y conspirado con otro empresario, Wael Hana. También que la esposa del senador, Nadine Menéndez, había aceptado los sobornos que él había pagado.