Grupos de libertades civiles estadounidenses han demandado a Luisiana por una nueva ley “descaradamente inconstitucional” que exige que todas las escuelas financiadas por el estado exhiban los Diez Mandamientos en las aulas.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU por sus siglas en inglés) se unió a su filial de Luisiana y a otros dos organismos (Americanos Unidos por la Separación de la Iglesia y el Estado y la Fundación para la Libertad de la Religión) en la demanda contra la ley, firmada el miércoles por el gobernador republicano del estado, Jeff Landry.
Landry, que sucedió al exgobernador demócrata John Bel Edwards en enero, declaró después de firmar el texto: “No puedo esperar a que me demanden”.
Estado de Luisiana aprueba ley que permite colocar los Diez Mandamientos en las escuelas públicas
Los cuatro grupos inmediatamente aceptaron su desafío y anunciaron que estaban haciendo precisamente eso. “Estamos demandando a Luisiana por exigir que todas las escuelas públicas exhiban los Diez Mandamientos en cada aula”, publicó la ACLU en X.. “Las escuelas públicas no son escuelas dominicales”.
En una declaración conjunta, la ACLU y sus aliados dijeron que la ley HB 71 equivalía a coerción religiosa. También dijeron que violaba la ley del estado de Luisiana, un precedente de larga data establecido por la Corte Suprema de Estados Unidos y la primera enmienda de la Constitución estadounidense, que garantiza la separación de la Iglesia y el Estado.
“La primera enmienda promete que todos podremos decidir por nosotros mismos qué creencias religiosas, si las hay, mantener y practicar, sin presión del Gobierno. Los políticos no tienen por qué imponer su doctrina religiosa preferida a los estudiantes y familias en las escuelas públicas”, dice el comunicado.
“Las comunidades y escuelas públicas de Luisiana son religiosamente diversas, sin embargo, la HB 71 requeriría que los funcionarios escolares promuevan creencias religiosas específicas que las personas de muchas religiones”.
La legislación exige que para 2025 un cartel de 11 por 14 pulgadas de los Diez Mandamientos debe exhibirse de manera destacada en las aulas de todas las instituciones educativas financiadas por el estado, desde el jardín de infantes hasta la Universidad.
Los críticos señalan que la redacción de los Diez Mandamientos varía dentro de las diferentes ramas del cristianismo y que también son una parte central del judaísmo. La legislación de Luisiana parece favorecer la redacción protestante, a pesar de la presencia de una minoría católica que comprende alrededor del 22% de la población del estado.
“Incluso entre aquellos que creen en alguna versión de los Diez Mandamientos, el texto particular al que se adhieren puede diferir según la denominación religiosa o la tradición”, dijeron los grupos aliados en su declaración. “El Gobierno no debería tomar partido en este debate teológico, y ciertamente no debería obligar a los estudiantes a someterse día tras día a promociones inevitables de la doctrina religiosa”.
Se han propuesto proyectos de ley similares en otros tres estados (Texas, Oklahoma y Utah) pero, en medio de amenazas de sus opositores de presentar impugnaciones legales, aún no se han convertido en ley.
Una ley similar aprobada por Kentucky en 1980 fue anulada por la Corte Suprema de Estados Unidos alegando que violaba la cláusula de establecimiento de la primera enmienda de la Constitución, que dice que el Congreso no puede “promulgar ninguna ley respecto del establecimiento de una religión”.