Medios locales difundieron la noticia del nacimiento este domingo de un niño en el municipio montañoso Bartolomé Masó, en la provincia de Granma.
El hecho habría sido intrascendente de no ocurrir poco después de los dos sismos reportados al sur del territorio, exactamente cerca de allí, en la localidad de Pilón, y que sacudieron varias zonas de la isla.
“En medio de un domingo bien movido en la Provincia Granma, un equipo de especialistas del Hospital Mariano Pérez Balí, del municipio de Bartolomé Masó, realizó un parto mientras sucedían réplicas del sismo de esta mañana”, apuntaba un reporte de Radio Bayamo.
El medio reproduce algunas opiniones de funcionarios locales, que no tardaron en denominar el hecho como un parto “en condiciones de guerra, entre réplicas”.
Los dos sismos del domingo tuvieron magnitudes supriores a los 6 grados y ocurrieron entre las 10 y las 11 y 46 de la mañana.
Según el perfil en Facebook de Yaneysi Contrera, los especialistas “supieron conservar la calma y darle la bienvenida a este bebé, momentos inolvidables para todos y una historia pendiente a contar cuando crezca este pequeñín”.
Severas afectaciones
Sobre los sismos, el especialista Enrique Diego Arango escribió este lunes también desde Facebook que en las últimas 24 horas se habían sucedido 885 sismos, aunque no queda claro cuántos de ellos fueron réplicas o el total de los que fueron perceptibles.
Datos preliminares daban cuenta de severas afectaciones en el fondo habitacional e infraestructuras estatales de varios sectores, entre ellos Educación, Salud Pública, Salas de Televisión y Patrimonio; al tiempo que existen, además, reportes de deslizamientos de tierra en zonas montañosas.
Sismos de este domingo podrían tener réplicas durante los próximos meses
Hasta el momento, solo en Pilón fueron registrados tres derrumbes totales y más de 200 afectaciones parciales, mientras no se reportan fallecidos y sí dos personas lesionadas: una menor de cinco años de edad y una mujer de 48, subraya un reporte de la Agencia Cubana de Noticias.
Según recuerda Prensa Latina, históricamente, la región oriental de Cuba registra los mayores y más frecuentes terremotos del país y recuerda los sismos de 1766 y 1852 con intensidad de nueve grados en la ciudad de Santiago de Cuba, que provocaron la pérdida de vidas humanas y cuantiosos daños materiales.