El Gobierno cubano incautó un barco estadounidense al que declaró en abandono, luego de varios años anclado en la isla sin el pago correspondiente y ante “el desinterés de su propietario”.
El barco en cuestión es el motovelero Deux Amis, de nacionalidad estadounidense, que se encontraba desde 2016 “fuera de operaciones náuticas”, en la Marina Marlin de Santiago de Cuba, según refiere una resolución del Ministerio del Interior (Minint).
Su incautación se anuncia tras vencerse el permiso especial otorgado por la Capitanía del Puerto y ante el incumplimiento de “las obligaciones contractuales al no sufragar la deuda contraída con la referida entidad” y “el desinterés de su propietario por continuar explotándola”.
De acuerdo con la resolución, el propietario del barco es un ciudadano alemán nombrado Kurt Henz Burian, quien no se presentó “por sí o mediante apoderado o representante legal, tras ser notificado por las autoridades cubanas para eliminar a su costa la causal de abandono”.
Ante esta situación, y en virtud de la legislación cubana para estos casos, el Minint procedió a la Declaración Administrativa de Abandono del motovelero Deux Amis —con 10.33 metros de eslora, 3 de manga, 2 de puntal y 1,52 de calado— y dispuso su “ingreso al patrimonio del Estado cubano”.
En este sentido, y tras considerar que el estado técnico del barco “posibilita su uso”, lo asignó al Centro Regional de Gestión y Manejo del Patrimonio Natural y Cultural Subacuático de Santiago de Cuba.
La asignación incluye igualmente su motor de 2 cilindros y 25 caballos de fuerza (Hp), y un medio auxiliar con su propio motor fuera de borda de 2 Hp.
La resolución, del pasado mes de abril, entró en vigor tras su publicación este martes en la Gaceta Oficial.
Con anterioridad, el Minint ha reportado la confiscación de embarcaciones en Cuba, aunque generalmente se trata de medios hallados en el mar y cuyos propietarios luego no los han reclamado ante las autoridades de la isla.