Michel Contreras
Con el cine pornográfico sucede lo mismo que pasaba unos años atrás con las creencias religiosas. O sea, aquello que Adalberto Álvarez resumió socarronamente con dos versos: “Hay gente que te dice que no creen en ná, / y van a consultarse por la madrugá”.
Porque el porno es ilícito, y en algunos oídos suena indecorosa la aceptación de su disfrute. Pero vamos a ver: ilícito es también comprarle aceite al vecino bodeguero, o poner la moneda del pasaje en la mano del chofer, en lugar de colarla en la alcancía. Y esas cosas… que me tire una piedra el que nunca las hizo.
(En verdad, hay algunos que jamás se subieron a una guagua ni le vieron la cara al bodeguero. Mas son pocos y, por ende, matemáticamente despreciables)…
A mí me gusta el porno. Y muy posiblemente a usted también, si pertenece a esa divina especie en vías de extinción, el ser humano. Como decía una sexóloga alemana que residía acá, Mónica Krause, “la gente enloquece por saber qué hacen los otros entre cuatro paredes”. No lo dudo: al final todos tenemos nuestra parte voyeur. Unos más, otros menos, y los otros aún más.
El cine X se parece a la pintura: hay que tomar distancia para asimilarla cabalmente. Existe la sensación mayoritaria de que las ‘películas azules’ van exclusivamente destinadas a sofocar hormonas, sin tocar ningún otro resorte en sus espectadores. Pero lo cierto es que hay filmes porno buenos y filmes porno malos, como mismo sucede con el cine convencional, los bates de madera o las galletas dulces.
Por citar solo unos ejemplos, en los años setenta –la indiscutible Edad de Oro del cine X- se rodaron maravillas como Detrás de la Puerta Verde, El Diablo en Miss Jones o La Apertura de Misty Beethoven. Ya en el nuevo milenio, un gran danés llamado Lars Von Trier se contó entre los productores de Todo sobre Ana, y el año 2005 vio el estreno de Piratas, la primera película clasificada como ‘pornográfica de acción’. Se dicen cosas grandes de Ginger en las Rocas y Debbie does Dallas, mas no he podido verlas. E incluso el aclamado director Agustí Villaronga (El Niño de la Luna, Pan Negro) llegó a comparar La Orina y el Relámpago con la filmografía –wow!- de Stanley Kubrick.
No hay que sentirse especialmente lúcido para advertir que el cine porno complementa a la versión convencional, toda vez que se encarga de mostrar lo que ésta nos esconde. En tal sentido es –cabría considerarlo así- un cine más honesto. Sin embargo, siempre habrá detractores…
¿Que a menudo nos miente con dimensiones fálicas trucadas o con una imposible avalancha de semen? Pues igual son mentira los ninjas voladores y los autos que explotan como bombas de racimo. ¿Que las artistas fingen? También Meryl Streep actúa sus lágrimas. ¿Que no hay un argumento interesante? Eso será en el cine Gonzo, porque el Feature conoce de historias perfectamente estructuradas. (A estas alturas vale recordar, por si las moscas, que Gore Vidal fue guionista de un Calígula destrozador de mojigatos y patéticos termómetros morales).
Pero todo sea dicho: el cine X ha emprendido un trayecto descaradamente comercial, y en el camino se llenó de estereotipos. Que son barro, a la hora del recuento. De ahí la proliferación de actrices entre 20 y 35 años, definidos los pechos, proporcionado el cuerpo, rasurada la ingle, zapatos de tacón y pelo claro. O los actores recién salidos del gimnasio, sudorosos, bronceados, con instrumentos genitales de 25 y más centímetros. O los gemidos monocordes. O los constantes planos de contrapicado.
Es lo de siempre: Don Dinero maneja las riendas, y lo que podría (y debiera) ser la mejor representación sensorial del universo, ha asumido que basta con darle el papel protagónico al pene, bautizado por un antropólogo español como “documento del mundo occidental”. Ron Jeremy y John Holmes, Rocco Siffredi y Peter North, siempre fueron menos protagonistas en sus filmes que los apéndices germinativos que la vida les puso entre las piernas.
De eso se trata el porno hoy, y así ha logrado convertirse en una industria cuya facturación supera a la del cine convencional de Hollywood. A fin de cuentas, el sexo es uno de los poquísimos productos –quién sabe si el único- que no necesita de buen marketing para garantizar mares de venta. ¿O acaso nuestra historia no está escrita con episodios X?: Sodoma y Gomorra, Leda y el cisne, Cleopatra, las orgías romanas, la impudicia de las monarquías absolutas en el siglo XVIII, Clinton y Lewinsky…
Hace un tiempo, en alguna comedia olvidable, me encontré con un diálogo genial. Ella le dice: “¿Por qué no hacen una película sobre lo que pasa después del beso final?”. Y él le contesta: “Sí lo hacen, se llama porno”. Por ahí anda la cosa. Se trata de la construcción de un mundo alternativo al mundo socialmente reconocido como respetable. Un mundo del que he salido haciéndome mi propia Frankenstein con el rostro de Jenna Jameson, los labios de Katsuni, los senos de Tera Patrick, las nalgas de Gina Lynn, el morbo de Sasha Grey, la pasión de Belladona…
De alguna manera, San Fernando Valley –el estómago universal del cine porno– está tan implicado en la cultura contemporánea como el Museo del Louvre. Gústele a quien le pese.
espectacular! trabajo
Michel, si quieres ver lo que los demás hacen en privado, no te recomiendo cine porno, más bien que busques una hendija en algún cuarto de alquiler, te aseguro que muchos pagarían por ello, lo otro es pura manipulación y comida para impotentes. Es mi criterio como mujer, quizás a los hombres lo muevan otros resortes.
En Cuba además tiene el velo de lo prohibido! qué valiente hablar de eso! A mi me gusta tambien el porno, siempre se cogen ideas…igual no abusar ni creer en el falso placer de los penes demoledores…eso no hay quien lo aguante por Dios!
Este artículo, como el que escribió Carlos Manuel sobre la palabra follar, en sólo unas horas se convertirá en el más leído de OnCuba. Que no se quiera hablar de lo que todo el mundo hace y sabe, por aquello del que dirán o porque no es políticamente correcto, me parece absurdo, es efectivamente, como el cuento del que no cree y va a consultarse por la madrugá. Muy valiente por tu parte Michel, reconocer que te gusta el porno. No hay que temer a decirlo claro. Para que no sólo tu recibas críticas por decir que te gusta el porno, que ya sé que sabias desde que se te ocurrió escribir este artículo recibirías, yo también dejó claro que me gusta, y al que no le gusta antes de criticar que piense por un momento en lo que a el le gusta y a otros no, que para gusto los colores y cada cual tiene derecho a decir y decidir que le gusta, mientras lo haga siempre dentro del marco legal. Por cierto Michel nos has tirado un cambio de bola, que nos ha dejado a todos los que estamos acostumbrados a enmarcarte y definirte como un periodista deportivo, que sólo escribe de béisbol, con el bate al hombro, pues nos esperábamos este lanzamiento. El artículo es osada, valiente y rompedor de los esquemas a los que están sometidos los medios de prensa y quienes lo implementan en Cuba
Tu ves Michel este articulo si me gusto, el del viaje sigue sin gustarme, pues hablas d una realidad poco tocada y que en Cuba es maximo tabu aunque dentro d cuatro paredes como tu dices pasan muchas cosas. Nunca entendi porque el socialismo esta en contra de los placeres del hombre no tradicionales. En Cuba esta prohibida la pornografia pero eso es en papel na ma pues quien no le han pasado una pelicula o una revista bien calentica… Entonces como todo en Cuba lo prohibido solo hace aumentar el apetito d las personas por consumirlo. Aqui en Canada la prostitucion esta prohibida pero la pornografia es legal y se consume por supuesto en su lugar, no veras un juguete sexual o una revista porno en waltmart pero si vas a la tienda especializada podras encontrar como decimos en Cuba d todo como en botica jejeje. Muy valiente tu articulo demostrando q eres un excelente periodista, apartando lo de la lloradera d quiero mi viaje por supuesto ☺.
A mi también me gusta el porno. De hecho me encanta el porno. Veo lo mismo hetero,bisexual que homo. Y no me considero un enfermo. Trabajo. Soy universitario, y es mi derecho hacer con mis ojos, mis manos, mi boca o mis nalgas lo que me de la gana. Me gusta más cuando es en grupo. Es el cuerpo humano lo que importa. Solo allí se rompen las barreras y el cuerpo se libera. Al porno deberían darle un Premio Nobel: no mata, no hace infeliz a nadie, baja las malas formas y relaja tanto como la droga, pero sin los daños de esta última. Yo de verdad ruego porque un día deje de ser sancionado en Cuba, porque cuando entre por el aeropuerto no tenga que declararlo en la misma hoja de las armas de fuego y la coca. Tampoco necesito un psiquiatra. Tengo pareja y a él también le encanta. Incluso mi padre lo esconde en un DVD para que mi mamá no lo vea y mi sobrino lo trae en una flash que le copió un amigo. Mi padre también se lo pasa a su jefe por el cel en 3 gp para que se vea bien. El informático de mi trabajo lo tiene en una parte escondida del disco duro para que la seguridad informática no le provoque el despido. Al hijo de la jefa de mi madre lo botaron del trabajo por poner en google:De qué tamaño le gustan los penes a las mujeres? El porno no enferma a nadie. Mi amigo Orlando hetero 100% veía porno gay en mi laptop y no se enfadaba. Algunas veces lo vió a mi lado y no por ello follamos, ni mucho menos él se vonvirtió a homosexual. Él incluso perdió los prejuicios y disfruta que su novia le bese más allá de la espalda. Dice que descubrió un placer extraordinario gracias a las pornos que vee. Él trabaja y pronto será papá. Dice que un día le regalará los mejores filmes a su hijo para que no se avergüence después, como le sucesió a él. Todo el mundo ve porno en Cuba, pero casi nadie lo asume. Quien sabe, a lo mejor un día la Asamblea Nacional promulga un decreto que lo respalde. Uff que tonto soy: aún creo en eso.
PD: Contreras. Bien. Pero deseo uno sobre la ley en Cuba en ese tema. Debe ser para orinarse de la risa. A lo mejor Arlin podría ponerlo sobre la mesa. Se atrevería?
Por si acaso, aclaro: me encantan los policías y el cuero.
muy buen articulo michel…genial
Un dato menor (?): Helen Mirren fue protagonista de Calígula
Buena publicación! …”la gente enloquece por saber qué hacen los otros entre cuatro paredes”…no tanto como enloquece, la curiosidad es humana pero lo que se dice enloquecer-enloquecer por algo que puede disfrutar uno en primer plano… eso si es de locos, creo yo…
no no no michel, las nalgas, las de Alexis Texas, la pasión se la dejo a Katsuni, a Jenna Jameson, la entrega total a la industria y a Belladonna la espectacularidad de la puesta en escena, y te faltaron los ojos de Sophie Dee ssssaludos
un tema calentico que para los cubanos es otro punto en el horizonte, que para disfrutarlo a plenitud concientemente se debe esconder de la vista pública. recuerden que si no llegamos nos pasamos. no imagino que se haría en cuba si se llegara a permitir trasmitir porno en el horario de la madrugada por cubavisión.
¡Un tema complicado! Es cierto que la gente quisiera saber lo que pasa entre las otras cuatro paredes, pero lamentablemente el cine porno, no nos lo muestra. Recuerdo que en las décadas de lo 70 y 80 se proyectaron en Cuba filmes (en su mayoría italianos) que si bien no mostraban eso que muestra el cine porno, es decir, el coito con todas sus luces y variantes, aquel cine era capaz de trabajar sobre la mente del espectador con sus sugerencias de tal manera que pienso podía experimentarse más placer en ver esos filmes que uno porno. Como es sabido, sobre todo en los varones los estímulos de la imaginación en el sexo pueden llegar a ser tan fuertes como en el acto mismo, lo que no sucede con las mujeres quienes reaccionan más al estímulo táctil que a la imaginación. En fin, he visto algunos filmes porno que han intentado mostrar algún argumento, lo cual los enriquece, pero como regla carecen de argumentos, sólo pretenden mostrar determinadas cualidades de los protagonistas y con ello excitar al espectador.
Michel ¡Hay que tenerlos bien puestos para confesar algo como esto! Cuando yo era joven también me gustaba el porno. Ya con las edades que transito prefiero evitarme la vergüenza y el poco estímulo hormonal. Siempre te leo. Nadie escribe como como tu ahora y desde aquí. A ver si un día va y nos conocemos personalmente. Creo que nos caeríamos bien.
A mi me ha gustado siempre “hacer”, no ver a otros “haciendo”. Honestamente, no le veo mucha cosa a las películas porno.
Michel, para mi tiene un gran mérito como periodista y es el hecho de abordar temas poco común en nuestra prensa y que a nivel de sociedad están llenos de ” mistrrios” , muchas veces injustificados, y por tanto es valiente al tratarlos.
Oye Michel apretaste brother. Es increible el dominio q tienes de los titulos y nombres, con clasificacion de las actrices por sus atributos fisicos y actorales incluida, teniendo en cuenta q en Cuba esta estrictamente prohibida la distribucion y tenencia de pornografia. Si vivieras aqui en Miami fueras el Eusebio Leal del porno. Saludos.
En Cuba hay mucha mojigatería. Si te cogen una película porno o un juguete sexual en la aduana, te los quitan. No saben los matrimonios que se salvan de la monotonía con esas cosas.
¿Y de verdad los cubanos necesitamos promover la pornografía o algún tipo de “liberación sexual”? Si me hablaran de los Suecos que aunque es un pueblo con muchas virtudes, en esto de lo sexual los pobres no pueden ser mas sonsos, lo entendería. ¿Pero en Cuba? Dejémonos de estar copiando los males del primer mundo y promovamos otras virtudes de ellos. En esos países la pornografía es un verdadero cáncer social que no aporta nada a la sociedad. En los mismos Estados Unidos se ha convertido en una negocio de mas de 14 Billones de dolares, solamente en la venta de vídeos. Superior a la pelota, el fútbol y al baloncesto juntos. No hay un barrio en pueblos de EEUU que no tenga una tienda porno. Las hay con cabinas para ver las películas donde la gente se encierra y se masturban ahí mismo. Esta industria junto con el Imperio de la industria sexual de Hugh Hefner (Playboy magazine, cadenas de televisión, cine, radios etc,) se ha convertido en unos de los lobby político mas influyente en los Estados Unidos apoyando a políticos entre los mas anti-feminista, racistas y derechistas del país como Donald Trump y otros. Contreras, ¿Lo tuyo no era el deporte?
Mariana, es más que mojigatería: es delito y se llama Ultraje sexual (que tiene un amplio margen de verbos rectores – aquellos que definen la conducta ilegal – y un sujeto general). El que… produzca, ponga en circulación, etc. materiales de índole obscena… se sanciona con… Si tan fuera cosa de moral, pero puedes ir preso por ese tipo de material. Incluso, si empiezas a buscar la palabra en Google, en tu trabajo, puedes despertar ‘sospechas’. Nada edificantes. El hecho de escribir un alegato en favor, puede no pasar inadvertido.
Oiga Ezapo, Helen Mirren trabaja en Caligula, excelente tratamiento a un tema tabu, oiga, ademas de lo dicho cuantas enfermedades se han evitado por consumir esta manera sexual,
Y no se trata de mirar el asunto como pervertidos a los que los ven, solamente con lo expresado basta
En La Habana conocí dos chicas de cine porno cubano clandestino. Muy bueno Michel. Yo veo algunas de todos los tipos, aunque metro pcs no me deja bajar pelis porno o cine x. En verdad eres un gran tipo como periodista, se te da muy bien todo la escritura. Hay una peli japonesa de los 70 que es considerada cine x por algunos críticos.
Completamente de acuerdo, es cine, como cualquier cine, al que no le guste, pues que no lo vea y punto.
Tony, lo mío es el periodismo. Saludos.
“(En verdad, hay algunos que jamás se subieron a una guagua ni le vieron la cara al bodeguero. Mas son pocos y, por ende, matemáticamente despreciables)”, ja ja ja me encanta esta idea…tiene tanto contenido en sí misma
No obstante, si continuamos viendo todo lo relacionado con el cuerpo, el sexo y todo esto como tabu, estamos demostrando que los animales en eso nos tienen que enseñar mas, y no se trata de promiscuidad, se trata de ver el asunto como algo partcular y normal.
Tony, como tu dices en Cuba no hace falta el porno. Por eso cuando el cubano llega a Estados Unidos no la ve tampoco, verdad?
Miguel lo que escribió Carlos Manuel, no se acerca ni en chancletas a este articulo. De hecho lo que escribe Carlos Manuel es pura escritura ·intelectualoide rebuscada” que pretende impresionar con términos y conceptos heteroelevados. Esto si es un artículo con peso y no del que se usa para comprar algo, por cierto el peso cubano no alcanza para pagar porno en ningún lado. Gracias Michel por escribir con deseos y base sobre algo complicado. Por cierto viste la pelicula Love que se mostró fuera de concurso en Cannes? Es porno intelectual…
He leído tu artículo y realmente estoy un poco decepcionado por la superficialidad con la que tratas el tema. La verdad es que mientras lo leía se me aparecía la imagen del iceberg (solo vez un 1/7 de su tamaño). Desde mi más profundo respeto por la diversidad y la opinión de todos los que ha dedicado un momento a comentar el tema, te propongo lo siguiente: haz un segundo artículo donde hables de impacto de porno en la sociedad (la global esa que tiene libre acceso al porno y por supuesto de la que puedes encontrar muchísimos estudios) y si puedes responder a las siguientes preguntar mejor:
¿De qué manera ha cambiando el porno en las relaciones de la sociedad actual?
¿Por qué el porno genera más violencia, específicamente violencia machista?
¿Qué papel ha jugado el porno en el aumento de las violaciones? Incluida las violaciones de menores.
¿Por qué llega el porno a niveles tan irracionales como la violencia física o el porno infantil?
¿Puede el porno traumatizar la salud sexual de una persona?
¿Es el porno una adicción?
Porno, droga y trata de mujeres ¿Cómo se relacionan en el mundo liberal estos factores?
Pudiera escribirte 10 preguntas pero para empezar está bien. Acabo de hacer mi movida ahora te tocará a ti.
Muchos pueden pensar que soy un “contracorriente” o peor. Yo, en cambio, humildemente les invito (si tienen acceso a youtube por supuesto) a introducirse en el tema a través de esta charla TED.
https://www.youtube.com/watch?v=gRJ_QfP2mhU
(pueden activar los subtítulos en español está habilitados en: Configuración)
– 3 Comentario –
Es lamentable que mi primer comentario donde te invito a investigar el tema de la pornografía con mayor rigor y profundidad, además de invitarte responderme preguntas directas al respecto finalmente no saliese en los comentarios. En cambio el segundo, o mejor aún, continuación del primero sí. Espero que no sea “censura”.
Antes de empezar mi comentario, mis respetos para usted Michel Contreras. Ha sido valiente al escribir un artículo sobre un tema tan lleno de tabúes alrededor del mundo, pero más en nuestra pequeña Isla. Es de esperar que tenga críticas de todo tipo, tanto buenas como malas respecto al tema del Porno y todo lo que conlleva a él. Pues como dice el dicho “para gusto se hicieron los colores” verdad? y de igual manera son todas las opiniones y puntos de vistas, simplemente diversos! porque eso es lo que somos.. diversos, diferentes! tanto como una huella dactilar, así es nuestro pensamiento y por eso cada uno desde su razón cree decir lo correcto a su manera. Si todo el mundo pensara igual y opinaramos igual seríamos robots y no humanos! Aquí han comentado personas que pueden no coincidan contigo ni les guste el Porno en un 1% e incluso te inviten a hacer otros artículos profundizando en el tema desde su arista más negativa y más cruel, llegando hasta sentir decepción por tí (probablemente por declarar que te gusta el Porno). Otros sin embargo probablemente coincidan contigo en un 100% y te feliciten, te agradecen, etc.. pero eso no es lo esencial del tema, no es cuestión de gustos, ni lo dañino o no que pueda ser el Porno. En realidad la gran mayoría lo ha visto aunque sea alguna vez en su vida e incluso muchos no lo aborrescan tanto y les guste a pesar que no lo expresen de la misma manera. Pienso que lo esencial, es expresarlo de una forma correcta y sin fanatismo, que no se trate el tema como si fuese el fin del mundo, sabiendo que es algo vigente y que cada día cobra más fuerza, saber vivir con los aconteciemientos y la realidad por muy cruda que les paresca a muchos, pues así tendrían argumentos para explicarles a sus hijos si algún día les tocan el tema. La cuestión ante todo es sacar siempre lo positivo en cualquier cosa, no solo ante esto.. por qué siempre vamos directo a la censura y satanizarlo todo? No, lo que no se debe es obligar a nadie a que tenga que gustarle o nó gustarle, así de sencillo. Si alguien ve porno por qué pensar que es un enfermo mental? Dejenlo, es su gusto. Si alguien no lo ve por qué pensar que es un inculto o hipócrita, para nada señores, es su deseo simplemente no verlo. Algo que si deberíamos reprochar y estar en contra es ver que una chica decente, de buenos modales y buena conducta, sea filmada sin saberlo haciendo el amor con su pareja y luego ante una separación ese video recorra la ciudad entera, viendose e incluso hasta vendiendose como “Porno” sin realmente serlo. Eso si es lamentable y triste a la vez, eso si se debería criticar y combatir. En fin, el Porno no es algo que mate ni mucho menos, pero todo tiene que ser con medida y sin “fanatizarse” como ya dije, creo que así no hace daño. Y por si quieren saber mi gusto personal, me dá igual ver una película de porno o nó, no me mando a correr si me traen una, la veo y luego la borra y mas ná. No soy coleccionista pero no critico al que lo sea, cada cual es feliz a su manera, no se autorrepriman y defiendan sus gustos y deseos, es todo.
Andres, estoy de acuerdo con usted en su posición de respetar las ideas de otras personas y sus gustos individuales, pero en mi caso no me he referido a ningún gusto personal sobre el tema de la pornografía, sino a sus consecuencias negativas tanto SOCIALES como POLÍTICAS poniendo uno de los tantos ejemplos. Ese es el tema principal, no otro. Asimismo uno puede respetar las ideas y gustos de otras personas, pero respetar no quiere decir que tengamos que aceptarlas ni promoverlas. Espero que no exista ningún “Tabú” en la practica de disentir.
Ademas, valga decir que que hay gustos y hay gustos. No es lo mismo que a usted le guste el helado de fresa y a mi el de vainilla, en cuyo caso ninguno de los gustos diferentes tendría ninguna trascendencia, que si a unos de los dos nos gustase torturar a otras personas. Por mucho “gusto personal” que tenga la cosa, no seria lo mismo que el gusto del helado. Si usted considera que la preferencia o gusto de una persona hace daños a otras o a la sociedad en general, ¿Diria usted tan tolerablemente que “para gustos se hicieron sabores? Si usted tiene una preferencia por algún sabor, bien, pero si su preferencia tiene grandes consecuencias políticas y sociales, entonces tiene que defendedlas con argumentos políticos y sociales, no como que de “Arte” o “Cinematografía” se tratara. DrDry esta justificado en pedirle argumentos y pruebas al articulista sobre lo que el promueve: “Pro Porno”
Original articulo ,nunca pense leer algo asi ,y menos desde Cuba ..me encanta las pornos en toda su expresiones.Que bueno es leer sobre algo que no todo el mundo se atreve a hablar y menos escribir.