El cubano Mijaín López, único deportista en el mundo que ha conquistado títulos de una misma prueba en cinco juegos olímpicos consecutivos, expuso que la Isla necesita una “apertura” al mundo y a la profesionalización con el fin de rescatar los éxitos que le convirtieron en potencia deportiva global.
“El deporte cubano está pasando por un momento muy delicado”, dijo el legendario gladiador de 43 años durante una entrevista concedida recientemente a la agencia AFP en la ciudad de São Paulo, donde participa en la COB Expo, feria anual del Comité Olímpico Brasileño.
La delegación cubana se despidió de la cita olímpica de París 2024 con de dos medallas de oro, una de plata y seis de bronce, la cosecha más baja desde que reanudó su participación en la edición de Barcelona 1992, tras las ausencias en las de Los Ángeles 1984 y Seúl 1988.
Precisamente en la Ciudad Condal los deportistas de la isla habían firmado su actuación más destacada en estas lides, al conquistar 14 títulos, seis preseas de platas y 11 bronces.
“Hemos perdido muchos talentos…”
Para Mijaín, en la actualidad “el deporte a nivel internacional es un negocio, en el deporte hay sponsors (patrocinadores), cosas que en el mundo entero son cosas normales y a Cuba ese desarrollo no ha llegado”.
Agregó que más allá del descenso en el nivel del béisbol y el boxeo, en los que Cuba fue referente mundial, se necesita “hacer un experimento” y revisar “qué es lo que se va a hacer”.
“Hemos perdido muchos talentos. La emigración (las deserciones) ha sido parte de todas esas cosas que están pasando. Los centros de entrenamiento se han deteriorado”, precisó.
A su vez, se mostró partidario de que los deportistas cubanos incursionen en las mejores ligas profesionales del mundo, como pretendía el malogrado acuerdo entre la Federación Cubana de Béisbol y Sóftbol (FCBS) y las Grandes Ligas de béisbol de Estados Unidos (MLB, por sus siglas en inglés).
Mijaín López fue el mejor deportista de América en 2024, según la prensa especializada
“Hemos perdido a nuestros atletas en la parte de crear sponsors, que los atletas sean conocidos en las marcas, en todos los aspectos profesionales, como en el mundo entero (…). Tiene que haber un cambio pronto, porque estamos empezando un ciclo olímpico y ya se está viendo que hay desmejora en el deporte cubano”, subrayó.
Sobre los anhelos que llevan a muchos atletas a abandonar la isla y su decisión de no seguir ese camino, Mijaín remarcó que “soy cubano, seguiré siendo cubano y me moriré cubano (…). Nunca dudé (…). Siempre iba con la mentalidad de que iba a obtener una medalla para todo el pueblo de Cuba (…), si no respetas a tu país, no respetas a nadie”.
“Calentar las redes”
También desmintió rumores sobre la posibilidad de volver a luchar en la cita olímpica de Los Ángeles 2028.
Según sus palabras, fue una jocosidad que hicimos Yasmani (Acosta, cubano que compite con Chile y su rival en la final de París 2024) y yo para “calentar un poquito las redes”.
“Ya hice lo que tenía que hacer y los años no pasan en vano. Fueron 32 años de carrera deportiva, 24 años dominando prácticamente el mundo, y llegó la hora de marcharse. El deporte es bonito, pero es sabio saber cuándo irse (…). Me siento orgulloso y ahora viene otra vida”, explicó al medio francés.
Sobre su actualidad, se refirió a su papel como embajador internacional (de la Organización Mundial de Lucha), algo que le “da la oportunidad de aportar un granito de arena a los jóvenes para que lleguen lejos”.
Mijaín confirmó que extraña su vida sobre los colchones, aunque después de terminar un combate o entrenamiento “le duele el cuerpo entero”. No obstante, consideró que ahora vive otro tipo de experiencia y “es algo bonito”.