La tumba de La Milagrosa en el cementerio de Colón sigue llena de flores a más de cien años de la muerte de Amelia Goyri de la Hoz. Símbolo de la maternidad, del amor a los hijos, de la pasión eterna entre dos enamorados, el nicho es frecuentado a diario por curiosos, turistas y, en especial, por devotos. Visitarla es un ritual para pedir por la fertilidad, la salud de las criaturas y de los progenitores o para agradecer por el milagro concedido. Este Día de las Madres, como siempre, la leyenda se multiplicó, mientras un pueblo desfiló por un camino de flores, golpeó las argollas entre rezos y plegarias hasta retirarse sin dar la espalda nunca a la imagen de mármol de la joven Amelia, La Milagrosa de los cubanos.
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Lo mejor de las leyendas es creérselas… y esta es una que nunca va a morir… que no haría una madre por su hijo, un padre por su hijo, incluso, uno de estos hijos por su hermano… Muy buenas fotos, gracias por ayudar a mantener viva la tradición de un pueblo que cree…
Por favor Amelia en el nombre de jesus te pido me ayudes a conservar mi casa que tenga todos los meses el dinero para pagarla. Te pido salud paz y prosperidad para mi y mi familia. Y me ayudes a cumplir mi sueno de terminar mis estudios de RN. Por jesus te lo pido Amelia. Amen. Y te juro que te cumplo lo que te prometi.Amen
Gracias por todo lo que me has concedido. En especial mi niño Miguel Alejandro.
Te estamos agradecidos por siempre.
Jose M y Giselle