Los casos de la COVID-19 a nivel mundial han aumentado un 30 % en tan solo dos semanas y en Europa, en particular, las subvariantes BA.4 Y BA.5 de Ómicron son responsables de esta nueva ola de infecciones, según informó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En la India, donde la pandemia ha causado más de medio millón de muertes confirmadas, se ha detectado una nueva subvariante, denominada BA.2.75, que los expertos están siguiendo con atención, refiere un despacho de la agencia EFE.
No obstante, todo indica que la tasa de muertes por la COVID-19 “se ha desvinculado” del número de casos, que si bien se ha disparado no ha provocado un aumento significativo de hospitalizaciones en cuidados intensivos o decesos, refiere la OMS.
El director general de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que esta situación pone claramente en evidencia problemas sobre los que su entidad lleva meses alertando, como la fuerte caídas de pruebas de diagnóstico en numerosos países.
“Esto oculta la verdadera evolución del virus y la carga real de casos de COVID-19 en el mundo”, comentó, citado por el medio español.
Otro problema identificado es que no se están administrando los tratamientos que hay en el mercado lo suficientemente pronto como para prevenir casos graves y muertes. Ello está ocurriendo sobre todo en los países pobres, “a donde los nuevos tratamientos, especialmente los nuevos antivirales orales, no están llegando”, sostuvo Tedros.
Frente a esta situación, el directivo subrayó que los grupos de riesgo deben recibir la vacuna de refuerzo. Al hecho de que cada infección tiene un impacto en el círculo familiar y laboral —y a mayor escala en la economía de los países—, se suma el riesgo de sufrir un COVID largo.
De acuerdo con el despacho noticioso, Tedros pidió a la farmacéutica Pfizer que acepte colaborar con organismos de salud y con los países para su nuevo antiviral sea accesible pronto.
La farmacéutica Pfizer anuncia éxito de su píldora contra la COVID-19
La OMS cree que la nueva ola de la COVID-19 que empieza a observarse tiene su origen en la percepción de la gente de que este virus se volverá endémico y en el relajamiento total de las medidas de prevención con la llegada del verano en el hemisferio norte.
“Pero no es tiempo de declarar el fin de la pandemia”, dijo el experto de la OMS, Abdi Maha, quien aseguró que la enfermedad todavía puede causar mucho daño y pidió que se proteja a los grupos de mayor riesgo con medidas fáciles, como el uso de mascarilla en espacios cerrados y en lugares donde haya mucha gente.
“No les decimos a nadie que hay que volver al encierro, a los confinamientos, hemos tenido dos años y medio difíciles, la gente quiere volver a la vida normal, pero les pedimos a los países que protejan a los más vulnerables”, señaló, por su parte, el director de Emergencias de la OMS, Mike Ryan, citado por EFE.
Mientras, una investigación determinó que la variante Ómicron tiene una elevada capacidad de sortear los anticuerpos naturales generados por una infección previa por coronavirus, al tiempo que las personas vacunadas muestran una resistencia mucho mayor.
El estudio realizado de conjunto por la Universidad de Ginebra y el Hospital Universitario de esa ciudad suiza, concluyó que Ómicron tiene una capacidad “excepcional” para franquear la inmunidad desarrollada naturalmente por el organismo tras contraer otras variantes del coronavirus, como la Delta, Alpha o Gamma, a las que Ómicron ha dejado fuera de juego al reemplazarlas casi en su totalidad, apunta un reporte de EFE.
Otro hallazgo importante del estudio es que la capacidad de esta última variante para provocar hospitalizaciones y muertes es muy reducida cuando se trata de personas que han sido vacunadas contra la COVID-19, añade la agencia española.
El equipo de investigación tomó muestras de sangre de 120 voluntarios de entre 28 y 52 años vacunados y no vacunados, que se habían infectado antes o después de haber recibido la vacuna.
Los expertos corroboraron que las personas vacunadas tienen diez veces más anticuerpos que aquellos que desarrollaron una inmunidad como consecuencia de un contagio. La combinación de anticuerpos naturales y anticuerpos inducidos por la vacunación, conocida como inmunidad híbrida, surge como la barrera más fiable contra la enfermedad.
Según los autores, es esencial mantener la vigilancia contra el virus frente a su “sorprendente capacidad de mutación” y tras el pronunciado aumento de casos que se registra a partir de la aparición de la subvariante de Ómicron BA.5.
EFE / OnCuba