Grillos

El nuevo hallazgo es el último de una serie de hipótesis sobre lo que podría haber ocurrido en La Habana

Embajada de Estados Unidos en La Habana. Foto: Desmond Boylan / AP / Archivo.

Imagen de archivo de la Embajada de Estados Unidos en La Habana. Foto: Desmond Boylan / AP/Archivo.

Un equipo de zoólogos y biólogos ha llegado a la conclusión de que los llamados ataques sónicos experimentados por personal diplomático norteamericano y canadiense en Cuba corresponden en realidad a sonidos emitidos por un tipo específico de grillos. El nuevo hallazgo es el último de una serie de hipótesis sobre lo que podría haber ocurrido en La Habana.

Se pensaba que el ruido en cuestión (que solo algunos de los diplomáticos estadounidenses y canadienses afectados informaron haber escuchado) estaba relacionado con los síntomas físicos que describían: pérdida de audición, problemas del habla, problemas de equilibrio, daños en el sistema nervioso, dolores de cabeza y zumbidos en los oídos, náuseas, e incluso algunos signos de lesión cerebral traumática leve.

Lo anterior llevó a la especulación sobre un “ataque sonoro” utilizando un arma desconocida. Estudios previos de los sonidos sugirieron que podría haber una misteriosa y peligrosa fuerza de daño cerebral. Otros mencionaron la posibilidad de que los chirridos fueran producidos por armas que emplean radiación de microondas.

Pero la investigación de ahora, desarrollada por las universidades de Berkeley, en California, y de Lincoln, en el Reino Unido, ha llegado a una conclusión distinta. Segun los profesores Alexander Stubbs y Fernando Montealegre-Zapata, “el canto del grillo de cola corta de las Indias (anurogryllus celerinictus) concuerda con el sonido registrado en una grabación de Associated Press (AP) en términos de duración, ritmo de repetición de la vibración, espectro de intensidad, estabilidad del ritmo y oscilaciones. Esto proporciona fuertes pruebas de que el eco de un canto de grillo, más que un ataque sónico u otro dispositivo tecnológico, es el responsable del sonido de la grabación difundida”.

Los grillos machos de esa especie –argumentan– producen cantos de estructura regular durante el cortejo, y las hembras se sienten atraídas por determinados grillos: “No me sorprende que ese canto pueda molestar a personas no familiarizadas con los sonidos de los insectos”, aseguró Montealegre-Zapata, a quien los sonidos de la grabación de AP le recordaron a los de los grillos que capturaba y guardaba en cajas de cartón durante su niñez en Sudamérica.

“Todo lo que puedo decir de manera bastante definitiva es que la grabación de la AP es de un grillo, y creemos que sabemos de qué especie es”, dijo a The New York Times el autor principal del estudio, Alexander Stubbs.

What Americans Heard in Cuba Attacks: The Sound

Los autores señalaron, sin embargo, que “el hecho de que el sonido en la grabación fuera producido por un grillo del Caribe no descartaba la posibilidad de que el personal de la embajada haya sido víctima de otra forma de ataque”.

En sus informes sobre la experiencia, algunos diplomáticos dijeron que el ruido que escucharon fue como un “sonido fuerte o un chirrido agudo, similar a los grillos”.

La primera persona que se presentó en Cuba quejándose de problemas de salud dijo que el ruido que escuchó se detuvo abruptamente cuando abrió la puerta principal. Otros dijeron que el sonido se detuvo cuando se movieron a un área diferente de la casa. Estos cambios podrían estar relacionados con la forma en que los grillos se comportan, callándose si perciben peligro.

Muchos diplomáticos se quejaron de que escuchaban los sonidos en la noche, el momento de canto favorito de un grillo.

Sin embargo, no todos describieron el mismo sonido. Uno informó un “estruendo, ruido de rechinamiento” que lo despertó, según la AP, mientras otros dijeron que podían caminar “adentro” y “fuera” oyendo fuertes ruidos solo en lugares específicos. Algunos reportaron que no recordaban haber visto u oído nada fuera de lo normal antes de que comenzaran sus síntomas.

Salir de la versión móvil