El pasado 28 de noviembre la agencia de inmigración de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) cometió un error digital que impacta el futuro de decenas de cubanos que han pedido asilo en Estados Unidos. Publicaron en su sitio web los nombres, fechas de nacimiento, nacionalidades y direcciones de 6 251 extranjeros, entre ellos los de decenas de cubanos hoy presos esperando una decisión sobre su pedido de asilo.
Pero no solo es eso. Durante las negociaciones con la parte cubana un funcionario de ICE que coordinaba la devolución de ciudadanos cubanos con órdenes de deportación dijo que algunos nombres de la lista serían suspendidos de momento mientras se resolvía esa quiebra de confidencialidad. Con ello se puso en alerta a las autoridades de la Isla sobre la identidad de esas personas.
ICE se ha disculpado con los afectados. En una carta personal a cada uno les ha informado que sus casos están en suspenso durante un mes para darles tiempo a rediseñar con sus abogados la estrategia judicial a seguir luego de la revelación confidencial, indicó el diario Los Ángeles Times, que reveló el escándalo por primera vez el pasado lunes por la noche.
Pero los cubanos afectados siguen preocupados porque las deportaciones no han sido canceladas. “No entendemos cómo después de que se publica esta información, en lugar de darnos apoyo, ¿cómo nos van a deportar?”, dijo al diario Miami Herald Bernal Castillo, actualmente en un centro de detención de ICE para inmigrantes en Pompano Beach, al norte de Miami.
Este martes varios abogados de Miami comentaron el escándalo. “Estas personas tienen razones válidas para tener miedo si las regresan porque Cuba tiene un patrón de comportamiento de castigar a sus desertores. Ahora ya saben sus nombres y los están esperando”, le dijo a OnCuba la abogada Marilyn Santana.
El gobierno cubano no se ha pronunciado sobre el asunto. Por otro lado, ICE no ha informado sobre la suerte de los demás migrantes de otras nacionalidades cuyos nombres también fueron accidentalmente filtrados. Al menos por ahora, el escándalo se ha enfocado solo en la situación de los cubanos.