La Asociación Estadounidense de Touroperadores de Cuba (ATOC, por su sigla en inglés), que representa a más de 50 compañías de ese país que operan en la Isla, enfatizó en un comunicado que ningún turista de los Estados Unidos ha sufrido supuestos “ataques acústicos” durante sus visitas a Cuba.
“El público estadounidense debe entender que todos los individuos que sufrieron síntomas eran residentes del gobierno de los Estados Unidos y Canadá, así como personal diplomático. No ha habido un solo incidente que afecte a un turista o a un visitante civil de cualquier nacionalidad, mucho menos estadounidenses”, asegura la organización.
“Con la sola excepción de un hotel [Capri] donde residía personal estadounidense por largo tiempo, todos esos incidentes tuvieron lugar en residencias y lugares gubernamentales oficiales”, agrega el comunicado.
El gobierno estadounidense dio este viernes una respuesta drástica a los supuestos “ataques” que han sufrido al menos 21 de sus funcionarios en Cuba, al ordenar la retirada de la mayoría de su personal en la Isla y suspender la emisión de visados desde su embajada en La Habana.
Además, aconsejó a los estadounidenses que no viajen a Cuba “por su seguridad”.
La Habana recibe primeros vuelos regulares de los Estados Unidos
Luego de dos meses de informaciones sobre “incidentes” que causaron síntomas auditivos a diplomáticos estadounidenses en la isla, y pese a no tener claro quién es el responsable de los hechos, la administración Trump tomó medidas que buscan minimizar los viajes de los estadounidenses a Cuba y de los cubanos a los Estados Unidos.
En una alerta de viaje, el Departamento de Estado sugirió a los ciudadanos de su país no visitar la Isla e indicó la retirada del personal no esencial de su embajada en La Habana debido a los “ataques específicos dirigidos contra diplomáticos” estadounidenses, que han provocado “daños significativos” a al menos 21 de ellos.
Esos funcionarios han experimentado síntomas como “problemas en el oído y pérdida de audición, mareos, dolores de cabeza, fatiga, problemas cognitivos y dificultad para dormir”, indica la alerta.
ATOC consideró que la decisión del gobierno estadounidense es “difícil de entender”, ya que “los hechos y circunstancias de estos misteriosos incidentes nunca han supuesto una amenaza tangible para los visitantes estadounidenses en Cuba”.
Asimismo, la organización considera que la medida “posiblemente esté motivada por razones políticas” y conlleva un mensaje de “miedo e incertidumbre” basándose en “pobres evidencias”.
Por último, indicó que “la administración de Trump ha abrazado una política aislacionista y de acciones punitivas contra Cuba”.
Durante su campaña presidencial, Donald Trump prometió revertir el acercamiento a Cuba promovido por la administración Obama y una vez que llegó a la Casa Blanca ordenó una revisión inmediata de la política hacia la Isla.
En junio pasado, en un discurso en Miami, anunció cambios que su gobierno espera instrumentar en sus relaciones con Cuba, los cuales incluyen restricciones en los negocios y de los viajes a la Isla. Y aunque estos cambios no han entrado oficialmente en vigor, las tensiones entre los dos países se han incrementado tras las denuncias de los supuestos “ataques acústicos”.
Cuba ha negado totalmente su responsabilidad en estos hechos y ha reiterado su voluntad de colaborar en la investigación de lo sucedido.
Cuba dice que no existen evidencias del ataque acústico a diplomáticos de EEUU
Ante la decisión de este viernes del gobierno estadounidense, la directora general de la cancillería cubana, Josefina Vidal, emitió una declaración que afirma que la medida del Departamento de Estado es “precipitada y va a afectar las relaciones bilaterales” al tiempo que niega cualquier responsabilidad de su gobierno en los incidentes imputados.
EFE / OnCuba
Les autorités Américaine mélangent les cartes! Sûrement que ces fonctionnaires qui travaillent pour le gouvernement américain a Cuba ont trop forcé sur l’écoute électronique…et ils sont pris par leur propre abus de vouloir tout savoir ! Trop c’est trop!
Les touristes américains ne devraient pas être pénalisé pour cela.
Los afectados en Cuba no son precisamente los turistas, son los nacionales residentes en el pais. Saludos.