La compañía Air China, la aerolínea de bandera de esa nación asiática, comenzará a volar a Cuba a partir de mayo, de acuerdo con fuentes oficiales.
La información fue confirmada por la Corporación de la Aviación Cubana S.A. (CACSA), aunque sin ofrecer detalles sobre la fecha exacta del inicio de las operaciones ni las frecuencias de vuelo.
El director de CACSA, Joel Beltrán Archer Santos se reunió este sábado con ejecutivos chinos que participaron en la recién finalizada Feria Internacional de Transporte y Logística, la cual concluyó con la firma de varios acuerdos entre entidades cubanas y extranjeras.
La noticia del nuevo puente aéreo hacia la isla trascendió de este encuentro entre directivos empresariales de ambos país, apunta Prensa Latina (PL).
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El inicio de operaciones de Air China en Cuba tendrá lugar en momentos en que la isla busca hacer despegar su industria turística, que no ha logrado la recuperación esperada tras la pandemia y con las sanciones de Estados Unidos como telón de fondo.
Ante este escenario, el sector turístico cubano busca potenciar mercados emergentes, como el chino y el ruso, este último con un ascenso sostenido en los últimos años.
Además, conecta con el reforzamiento en marcha de las relaciones bilaterales, al menos a nivel de convenios e intenciones gubernamentales, en momentos en que Cuba atraviesa una severa crisis.
Esta misma semana fueron firmados varios memorandos de entendimiento y autoridades de ambas naciones sostuvieron conversaciones para potenciar la cooperación en sectores como la industria agroalimentaria, la biotecnología, las comunicaciones y el transporte.
En este contexto, el presidente Miguel Díaz-Canel se reunió en La Habana con el presidente de la Agencia de Cooperación Internacional para el Desarrollo de China, Luo Zhaohui.
Como parte de la Feria de Transporte, Cuba también firmó un acuerdo con Uruguay con la intención de “optimizar” los sistemas de transporte, en especial, las condiciones de infraestructura y logística de las aerolíneas.
Este convenio, según Eduardo Rodríguez, ministro cubano del sector, “abre las puertas y establece las condiciones legales para beneficiar a la transportación aérea de las dos naciones”.
Además, se espera que no se solo un impulso a la aeronáutica, sino a otras esferas como el turismo y, en consecuencia, a la economía de los dos países.