Cuba recibió a 3 millones de visitantes extranjeros hasta este jueves con Canadá como su primer mercado emisor, pese a un decrecimiento de viajeros debido principalmente al endurecimiento de las sanciones de Estados Unidos y a la prohibición de los viajes de cruceros desde ese país a la isla caribeña.
El Ministerio del Turismo (Mintur) cubano dijo este jueves en un comunicado que el arribo de los tres millones de viajeros internacionales “se alcanza a pesar de las campañas focalizadas y dirigidas por el gobierno de los EE.UU. para impedir el flujo de turistas a nuestro país”.
“Asimismo demuestra la confianza y el reconocimiento alcanzado por el turismo cubano como un destino que ofrece seguridad y hospitalidad a sus visitantes”, subrayó.
Cuba prevé cerrar el año con 4,3 millones de turistas en lugar de los 5,1 millones que había estimado inicialmente, lo que impactará en un 10 % interanual menos a la industria turística y de ocio local que representa la segunda fuente de ingresos de divisas al país.
El ministro del Turismo, Manuel Marrero, explicó en julio pasado durante las sesiones del Parlamento que la suspensión de la visita de los cruceros por parte de la administración de Donald Trump afectará a “más de 560.000 estadounidenses en lo que resta de año”.
Las nuevas medidas de Estados Unidos, que desde junio pasado prohíben los viajes en aviones privados, yates y cruceros, dificultan aún más las limitadas visitas de estadounidenses a la isla, restringidas por el embargo que ese país aplica a Cuba desde 1962.
La nota del Mintur indicó este jueves que Canadá se mantiene como principal mercado emisor de turismo a la isla seguido por los mercados europeos.
Además destacó a Rusia como “el de mayor ritmo de crecimiento” y con “perspectiva de desarrollo para las venideras temporadas” del turismo en la isla.
En 2018 Cuba recibió alrededor de 137.000 visitantes de Rusia y en lo que va de este año ha crecido un 40,3 por ciento, según datos oficiales.
“Una vez más se ratifica a nuestro país como destino del Caribe por su naturaleza, patrimonio, cultura, seguridad y la hospitalidad de su pueblo”, afirmó el Mintur.
Las autoridades turísticas cubanas han manifestado su objetivo de apostar por la modalidad del turismo de eventos y convertir a La Habana en el principal centro de reuniones internacionales, que este año festeja sus 500 años y recibe más del 50% de los visitantes que llegan a la isla.
El turismo -una de las actividades que aporta mayores ingresos a la frágil economía cubana- se ubica por detrás de la venta de servicios profesionales al exterior, con lo que contribuye en un 10 por ciento al Producto Interno Bruto (PIB), genera medio millón de empleos y también inversiones en el sector.
Las previsiones oficiales que de inicio fijaron la visita de 5,1 millones de turistas extranjeros en 2019 habían calculado por primera vez una factura de 3.000 millones de dólares en ingresos.