Dos cubanas que habían sido secuestradas días atrás en México fueron asesinadas por sus captores, según informes de prensa.
Las mujeres, de 33 y 36 años respectivamente, fueron secuestradas por un grupo armado mientras se encontraban en un hotel y luego trasladadas a un sitio desconocido, refiere el Diario del Sur, que cita a una fuente oficial.
Una de ellas, nombrada Ana Mercedes y quien trabajaba en un bar, había aparecido después en un video en el que pedía a su familia el pago de un rescate a los secuestradores. Sin embargo, al parecer el dinero no fue pagado y ambas mujeres fueron asesinadas en represalia.
Sus cuerpos, desmembrados por demás, fueron abandonados en la carretera que conecta el cantón Pumpuapan con Nueva Granada en la zona alta de Tapachula, en Chiapas. Allí fueron hallados el pasado fin de semana, de acuerdo con el reporte.
Los cuerpos de las víctimas fueron encontrados el sábado dentro de un tambo y abandonados en la carreterahttps://t.co/5KGCGSf9wb
— Diario del Sur (@diariosur_oem) November 20, 2024
Tras el examen forense se confirmó la identidad de las cubanas asesinadas. Los restos fueron también identificados por sus familiares este miércoles y entregados a estos para su funeral.
Los dos cubanas no fueron las únicas víctimas. Un joven de 18 años que pasaba en una motocicleta por el lugar donde los cuerpos de las mujeres estaba siendo abandonado fue asesinado a tiros por los secuestradores, apunta el medio mexicano.
Según el Diario del Sur, la Fiscalía General de Chiapas continuará con las investigaciones correspondientes sobre el caso.
El medio señala que “colectivos y activistas exigieron a las autoridades la implementación de estrategias para detener la violencia hacia las mujeres migrantes, quienes a diario transitan por la frontera sur y ponen en riesgo sus vidas”.
Los migrantes y en particular las mujeres son a menudo víctimas de hechos de violencia por parte de grupos criminales en México. Los cubanos, muchos de los cuales buscan llegar a Estados Unidos, no escapan de esta realidad y han sufrido secuestros, asaltos, heridas y hasta asesinatos, como en este caso, durante su travesía migratoria y su estancia en territorio mexicano.
Cuba registra en los últimos años un éxodo migratorio sin precedentes tanto por el volumen de migrantes como por su extensión temporal.
Esta oleada tiene como catalizador la grave crisis económica que sufre el país —reforzada por la pandemia, las sanciones estadounidenses y las dificultades e ineficiencias internas—, con frecuentes cortes eléctricos, escasez de productos básicos, medicinas y combustible, inflación y una dolarización parcial de la economía.