Cuba experimentó este domingo un déficit máximo de 843 Megawatts (MW) en la capacidad de generación eléctrica de su Sistema Electroenergético Nacional (SEN), según la nota informativa divulgada por la Unión Eléctrica (UNE).
La falta de servicio eléctrico se extendió durante toda la jornada, pero la máxima afectación ocurrió alrededor de las 21:50 horas, coincidiendo con el llamado “horario pico” debido a la alta demanda de consumo eléctrico, agrega el reporte.
Según la UNE, las afectaciones se extendieron durante la madrugada del lunes y se estima una afectación máxima de 850 MW en el horario diurno de hoy.
De tal forma se cerró un fin de semana “muy complejo” para el SEN, pues en la jornada anterior el déficit en la generación había alcanzado un tope de 818 MW a las 20:30 horas, después de un día marcado por las afectaciones constantes del servicio de electricidad al sector residencia, estatal y déficit de 860 MW a las 20:40.
En su informe, la UNE confirma que en estos momentos se encuentran fuera de servicio por averías ocho unidades del SEN. Ellas son la 6, 7 y 8 de la Central Termoeléctrica (CTE) de Mariel, la unidad de la CTE Otto Parellada, las unidades 4 y 5 de la CTE Nuevitas, las unidades 1 y 2 de la CTE Felton y la unidad 5 de la CTE Rente, lo que mantiene limitaciones en la generación térmica en torno a los 495 MW.
Agrega la nota que en la generación distribuida no estarán disponibles 1114 MW ( por averías) y 440 MW (debido a mantenimientos).
La tensa situación pudiera tener un momentáneo de alivio en el horario pico de hoy si se concreta la pronosticada entrada al SEN de la unidad cinco de la CTE Rente, con 85 MW, la de la unidad uno de la CTE Felton con 250 MW, así como la utilización de 128 MW generados por motores diésel.
Cumplidas esas previsiones, la UNE estima para el horario pico una disponibilidad de 2608 MW y una demanda máxima de 3 000 MW, para un déficit de 392 MW, por lo que de mantenerse las condiciones previstas la afectación sería de 462 MW en el horario pico.
Cuba atraviesa una compleja situación electroenergética, signada por la escasez de combustible y las continuas averías de las plantas generadoras. Por tal motivo, desde hace meses se vienen programando largos apagones a lo largo de la Isla, a los que se han unido otros “imprevistos” por roturas y fenómenos naturales.
Estos cortes eléctricos en el período veraniego, que suelen ocurrir más de una vez por día y extenderse incluso al horario de la madrugada, han aumentado el descontento social en el país, a la par de la profunda crisis económica, por lo cual se ha convertido el tema en una prioridad de las autoridades, que informan sistemáticamente sobre las afectaciones existentes y las acciones que se realizan para superarlas.