A las reiteradas averías en las termoeléctricas y la ya crónica falta de combustible, se ha sumado una nueva variable en la ya prolongada crisis energética que sufre Cuba: la falta de aceite en la generación distribuida.
Aunque ya este problema ha sido reportado anteriormente por la Unión Eléctrica (UNE), en los últimos días la afectación por esta causa ha superado los 200 MW y ha aumentado la deuda acumulada por esos motores por causa del déficit de combustible.
Este viernes dejarán de producirse 215 MW por la falta de aceite, lo que elevará a 715 MW los faltantes en la generación distribuida durante el día cuando se suman otros 500 que no se generarán por no contar con el diésel necesario. De ellos, apenas se recuperarán 50 en la noche.
Ayer fueron 240 MW afectados por el aceite y el miércoles habían sido 225 MW. En ambas jornadas el total de MW paralizados en la generación distribuida había rondado los 700.
Esta afectación se une a la baja de unidades térmicas por roturas o mantenimientos. Hoy son seis los bloques parados tras la sincronización ayer de la unidad 1 de Santa Cruz del Norte.
Mientras, las limitaciones en las termoeléctricas en funcionamiento ascenderán a 293 MW.
Con ese escenario, la generación volverá a quedar por debajo de los 2000 MW en el horario pico, cuando la afectación máxima pronosticada por la UNE llegará hasta los 1485 MW.
Este jueves fue de 1506 MW a las 8:50 PM, y luego el déficit se mantuvo toda la noche y madrugada. A las 7:00 de esta mañana era ya de 1056 MW y al mediodía se debe mantener en ese rango: 1080 MW.
A que no sea mayor deben contribuir los 12 nuevos parques solares, que luego de algunos días a la baja ayer tuvieron una mayor producción (1285 MWh), según las estadísticas de la UNE.
No obstante, el déficit sostenido en la generación eléctrica, expresado en las estimaciones oficiales, apunta a otra larga jornada de apagones en el país, que pudiera agudizarse de ocurrir una nueva avería.