La Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) volvió a defender las medidas anunciadas el pasado viernes, en medio de una ola de críticas y reclamos contra las mismas a lo largo del país, y en particular en las universidades cubanas.
Aun cuando los directivos de Etecsa aseguran seguir abiertos al debate y mantienen la promesa de implementar un paquete intermedio más asequible que los prohibitivos planes extras ya en vigor, este miércoles insistieron en la necesidad para la compañía de aplicar el impopular tarifazo.
Durante una nueva emisión de la Mesa Redonda dedicada al tema del momento en la isla, representantes del monopolio estatal reiteraron el complejo panorama que el mismo enfrenta, con una infraestructura con problemas, una fuerte caída en sus ingresos y un elevado endeudamiento, entre otras dificultades.
Ante este crítico escenario, y tras evaluaciones, propuestas y discusiones con “el primer nivel de dirección” del país, la empresa decidió finalmente lanzar las nuevas tarifas, explicó su vicepresidenta comercial Lidia Esther Hidalgo Rodríguez.
“Elaboramos alternativas y realizamos un estudio continuo para asegurarnos de que no existía otra vía para recuperar el financiamiento necesario. Los costos siguen presentes y elevados, y nosotros apostamos por seguir transformando y garantizando un nivel de acceso”, aseguró.
A pesar de los numerosos cuestionamientos a la restricción de las recargas nacionales hasta solo 360 pesos (CUP) en un mes —con la excepción hasta ahora para los estudiantes universitarios, que pueden duplicar esa cifra— y las limitadas ofertas de datos que se pueden comprar con ese dinero, Hidalgo Rodríguez sostuvo que con ello se “garantiza el acceso a todos los cubanos”.
“Reiteramos que hoy pueden acceder a internet con 6GB como promedio mensual, sin límite de compra. De este modo, las personas más vulnerables que mencionamos están cubiertas con un escenario base de 360 pesos. Con este monto, jubilados y personas asistidas pueden adquirir el servicio”, defendió lo ya implementado.
Incluso, llegó a decir que “no es obligatorio adquirir los 6G o los 360 pesos”, pues “se puede optar” por paquetes menores. “Las necesidades de uso de internet son muy particulares. No todos utilizamos los servicios de la misma manera ni consumimos las mismas aplicaciones”, justificó.
Navegar de madrugada
En sus intervenciones públicas de este miércoles, los directivos de Etecsa también repitieron la promesa hecha días atrás sobre el próximo lanzamiento de un paquete intermedio “para evitar tener que acudir a la compra de planes extra”.
Recordemos que el más barato de estos planes extra ofrece solo 3GB por 3360 CUP, una cifra superior a muchas pensiones y salarios. Otros planes extra se venden a precios superiores, incluso a más de 11 mil pesos, mientras algunos se comercializan exclusivamente en dólares.
Los representantes del monopolio estatal también ponderaron la modificación anunciada el lunes de extender a 35 días la vigencia de los paquetes, una de las medidas cambiadas a raíz del fuerte reclamo popular contra el tarifazo.
”Antes, todo tenía vigencia de 30 días. Si un usuario compraba un plan el mismo día de recargar, al día 31 no podía adquirir otro plan sin recargar nuevamente. Ahora, con recargas de 30 días y planes de 35 días, se puede recargar antes de que venza el plan actual, protegiendo los recursos no usados”, alegó Arely González Fernández, directora de Relaciones Institucionales de Etecsa.
La directiva también precisó que quienes poseen cupones de recarga de 500 pesos —los cuales ya no se aceptan al limitarse las recargas nacionales a solo 360 CUP—, pueden ir a las oficinas comerciales para depositar directamente ese dinero en sus saldos.
“Ahí entregan el cupón y le recargan el celular, pero ya mediante el sistema. Así no pierden el dinero”, precisó.
Por su parte, la vicepresidenta comercial de la compañía aconsejó a las personas conectarse por la madrugada pues a esa hora la tarifa del dato cuesta la mitad y los megas “rinden el doble”. “En ese horario se pueden descargar mejor aplicaciones y videos, porque es menor el tráfico”, apuntó.
Según Rodríguez Hidalgo, “esta medida está establecida hace rato, lo que no le habíamos dado mucha divulgación”. La misma, dijo, “se mantiene con las nuevas regulaciones, porque es el momento en que la red está en mejores condiciones para ese tipo de descargas”.
A ETECSA lo que es de ETECSA y al gobierno lo que es del gobierno
En las universidades y en las redes
Mientras las autoridades cubanas y, en particular los directivos de Etecsa, siguen tratando de capear la avalancha de críticas a las nuevas tarifas y prometiendo algunos retoques, en las universidades los estudiantes mantienen sus reclamos contra las medidas anunciadas.
Desde pronunciamientos en las redes contra el tarifazo a nombre de la comunidad estudiantil hasta llamamientos a no asistir a clases hasta que Etecsa no dé marcha atrás a lo implementado, se han sucedido en los últimos días en distintas facultades de La Habana y otras provincias.
Los estudiantes —o, al menos una parte de ellos—, a los que la empresa les concedió la posibilidad de adquirir un segundo paquete de 360 CUP y prometió también mejoras de conectividad en sus centros de estudio, no se han contentado con esos alivios exclusivos y reclaman también mejoras generales o una reversión total de las medidas.
Sus argumentos, incluso vertidos ya en la prensa extranjera, van desde la relevancia de los servicios ahora encarecidos para sus estudios y su propia distracción en medio de la crisis y los problemas en la isla, hasta su oposición a las desigualdades sociales que alimenta la medida.
A la par autoridades, sedes universitarias y dirigentes juveniles, si bien han ponderado el diálogo entre representantes estudiantiles y el monopolio estatal, se han desmarcado de los llamados a no acudir a las aulas y afirman que lo que ocurre en las universidades está siendo manipulado desde las redes y el exterior del país, como parte de una guerra mediática contra el Gobierno cubano.
Mientras, en las redes se cruzan nuevos comunicados y otros desmentidos como fakes news, apoyos a los estudiantes desde dentro y fuera de Cuba —lo mismo de profesores e intelectuales en la isla, que de activistas opositores al Gobierno y políticos extranjeros— y también denuncias de presiones internas para que abandonen sus reclamos y nuevos llamados al diálogo.
De momento, la propia Etecsa reconoce que dentro y también fuera de las universidades “hay un nivel de insatisfacción y rechazo”, pero asegura que los debates con los estudiantes y otras personas “han sido ricos y nos han permitido recibir propuestas”.
“El proceso es diario, ha sido arduo y continuará”, aseguró al respecto en la Mesa Redonda González Fernández, lo que deja entrever más intervenciones y explicaciones oficiales y, quizá, nuevas modificaciones de lo ya anunciado.