La central termoeléctrica Antonio Guiteras, cuya “salida imprevista” esta semana desencadenó una nueva caída del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), saldrá próximamente de mantenimiento capital con vistas a resolver los problemas acumulados durante años.
Las labores en el mayor bloque unitario de Cuba —que ayer sufrió otra falla, aunque pudo reconectarse— comenzarán a finales de 2025 y se extenderán por seis meses, según informó este jueves Alfredo López Valdés, director general de la Unión Eléctrica (UNE), quien no precisó una fecha exacta para la desconexión de la Guiteras.
Durante una intervención en el programa Mesa Redonda, el directivo explicó se realizarán trabajos profundos en la caldera, que deben mejorar su funcionamiento en el futuro, pero aclaró que “no puede decirse que va a ser una caldera nueva”, pues no se sustituirán todos sus elementos.
Entre los trabajos previstos está el cambio completo del recalentador —que, según detalló, “tiene 15 kilómetros de tubería”—, así como de una parte importante de los calentadores regenerativos, los conductos de aire y gases, los quemadores y las bombas del economizador.
Además, se realizará un lavado químico a la caldera “para proteger su funcionamiento futuro una vez concluidos los trabajos”.
También se debe trabajar en la turbina —incluyendo sus cilindros, válvulas y chumaceras—, cambiarse equipos auxiliares, incorporase calentadores de alta presión y terminarse el montaje de los sistemas de filtrado y el “cambio de conductos de agua de mar de circulación”, que se utilizan para enfriar el vapor que sale de la turbina.
Más de 15 años después
Aunque en los últimos años ha sido sometida a varios mantenimientos programados y reparaciones luego de sus no pocas averías, la Guiteras acumula más de 15 años sin recibir un mantenimiento general en profundidad.
En el caso particular de la caldera, esta no ha recibido un mantenimiento capital desde que la planta fuera inaugurada en 1988, según explicó el pasado mes de julio el periodista José Miguel Solís, quien habitualmente informa sobre las labores en termoeléctrica de Matanzas.
El mantenimiento que al parecer finalmente se ejecutará antes de que finalice el 2025 había sido varias veces postergado en medio de la prolongada crisis económica y energética en la isla y la acentuada carencia de divisas para ejecutar una tarea de esta envergadura.
En junio, al anunciarse una parada técnica de la planta de cara al verano, su director, Rubén Campos Olmo, adelantó que ya se trabaja en la logística de una “gran intervención” programada para finales de año, en la que se laboraría en componentes como la caldera, la turbina y el generador.
Entonces explicó que existía un proyecto para instalar una planta desaladora en la termoeléctrica, en busca de la sostenibilidad industrial y la independencia hídrica, pero apuntó que dicho proyecto estaba aún “en espera de financiamiento”.
Este jueves, el director general de la UNE no hizo referencia a la instalación de esa planta entre los trabajos previstos en el próximo mantenimiento capital, al menos según la reseña de Cubadebate.
Cuba atraviesa un agravamiento de su crisis energética, con apagones de 20 y más horas en localidades de la isla y cinco caídas totales del SEN en menos de un año, la más reciente esta misma semana.
Este viernes, un día después de la reconexión del país, la UNE pronostica una afectación máxima de 1595 MW en el pico nocturno, mientras que la disponibilidad será de apenas 1775 MW, con ocho unidades paradas por averías o mantenimientos, 354 MW fuera de servicio por limitaciones térmicas y 44 centrales de generación distribuida sin funcionar por falta de combustible.