El miércoles la Unión Eléctrica (UNE) registró el déficit de generación más alto informado hasta ahora. Fue de 1735 MW a las 18:20, “coincidente con la hora de máxima demanda”.
Eso, sin contar que había afectados 40 MW por averías provocadas por el Huracán Rafael en la provincia de Artemisa, según la propia empresa.
Para esta jornada, la UNE prevé que el déficit sea algo menor, ya que la afectación será de 1495 MW, lo que significa apagones en el 48 % de durante el horario de mayor consumo de energía, apunta la agencia española Efe.
Esta extenuante crisis energética se ha agravado de forma notable desde finales de agosto, al punto que en La Habana se vienen programando apagones diarios de al menos cinco horas, mientras que en la mayoría de las provincias tan solo se garantizan cuatro horas de corriente al día, y los cortes persisten en la madrugada.
Tras este 52 % de déficit, la mayor tasa hasta el momento en 2024 en condiciones ordinarias fue la anunciada el pasado 17 de octubre, con cerca del 51 %.
Al día siguiente, una avería en la termoeléctrica Antonio Guiteras produjo un apagón total. El paso del huracán Rafael apenas tres semanas después llevó a la segunda desconexión completa del Sistema Energético Nacional (SEN).
Según la UNE, hay averiadas unidades de cuatro centrales termoeléctricas mientras que notifica mantenimientos en unidades de tres.
“Se encuentran fuera de servicio por combustible 45 centrales de generación distribuida con 216 MW, la patana de Santiago de Cuba (67 MW) y 4 motores en la patana de Melones (65 MW) para un total afectado por esta causa de 348 MW”.
El SEN se encuentra en una situación precaria por la carencia de combustible y las repetidas averías de las obsoletas centrales termoeléctricas, con más de 40 años de explotación y déficit crónico de inversión y mantenimiento.