Tres meses después de su polémico tarifazo, la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) anunció que el próximo viernes se ejecutará un “cambio tecnológico” en la plataforma que hospeda el 67 % de todos los servicios móviles en la isla.
Estos trabajos técnicos, de acuerdo con el monopolio estatal, forman parte de la “estrategia de modernización tecnológica para el fortalecimiento de la infraestructura de telecomunicaciones puesta en marcha en el último período”.
En consecuencia, en la madrugada del 29 de agosto —entre la medianoche y las 6:00 a.m.— se afectará el servicio en las líneas móviles con numeraciones que inicien por 500, 501, 502, 503, 504, 509, 51, 52, 55, 56, 58, 59 y 62, según una publicación de la empresa en sus redes sociales.
La renovación tecnológica prevista busca responder a distintas “solicitudes de clientes de estas numeraciones”.
Entre estas, Etecsa enumera los “cambios de líneas móviles en caso de pérdida o deterioro, siempre y cuando exista la disponibilidad de las tarjetas SIM en las oficinas comerciales”.
También los “cambios de número o de titularidad de servicio” y la “gestión de servicios suplementarios como desvío, transferencia de llamadas, llamadas en espera y buzón de voz, entre otros”.
Trabajos técnicos en tiempos de tarifazo
Estas labores también impactarán a usuarios de la Telefonía Fija Alternativa (TFA) —los llamados teléfonos de minutos—, los cuales, de acuerdo con la nota, están siendo contactados directamente por especialistas de la red comercial de la empresa.
Por todo lo anterior, Etecsa agradeció la comprensión de sus clientes que se verán afectados por los trabajos, a quienes solicitó mantenerse informados al respecto a través de su sitio y perfiles institucionales, así como a mediante los medios de prensa oficiales.
Etecsa multiplica sus ingresos diarios por encima del 5 000 % luego del tarifazo
Este cambio tecnológico se llevará adelante a tres meses del controvertido tarifazo implementado sin previo aviso a fines de mayo, justamente después de trabajos técnicos realizados en las plataformas de la telefonía móvil.
Como parte del mismo, Etecsa limitó a 360 pesos (CUP) las recargas nacionales que pueden hacer sus clientes durante un mes y estableció planes extras a precios muy elevados para la mayoría de los cubanos, tanto en CUP como en dólares.
La empresa argumentó entonces que el tarifazo era necesario debido a su “elevado endeudamiento” y a la caída en picado de sus ingresos en divisas (en torno al 60 %), logrado principalmente con recargas desde el exterior.
La medida generó una oleada de cuestionamientos y quejas en toda Cuba, con los universitarios a la cabeza. En respuesta, Etecsa creó un plan específico para los estudiantes y otro “intermedio” para el resto de sus clientes, a un precio aún inaccesible para muchas personas y sin que luego se hayan anunciado otras modificaciones y variantes a las tarifas establecidas.