La Unión Eléctrica (UNE) informó que este viernes –después del horario pico nocturno– la Central Termoeléctrica “Antonio Guiteras” saldría de circulación para realizar una serie de reparaciones, las cuales se extenderán durante un período de 96 horas y “permitirán mayor seguridad en la operación de la unidad”.
“Se ha decidido sacar fuera de servicio la termoeléctrica Antonio Guiteras para limpiar los calentadores de aire regenerativos y solucionar un salidero en la caldera”, precisa el comunicado de la UNE, difundido en los medios de prensa nacionales.
La Guiteras, ubicada al norte de la provincia de Matanzas, es la unidad de mayor rendimiento en el Sistema Electroenergético Nacional y su salida de circulación provocará una “reducción en los niveles de reserva en la potencia disponible para la generación eléctrica”.
No obstante, si se mantienen las condiciones actuales de generación en el resto de las centrales del país, no deben existir afectaciones en el servicio eléctrico durante el período de reparación.
En función de ello, se han planificado medidas en el sector estatal para “garantizar el cubrimiento de la demanda” desde la noche del viernes hasta el próximo martes 1 de junio. De cualquier manera, la UNE exhorta al sector residencial a “reforzar el uso racional de la electricidad en los hogares” para evitar sobrecargas en el sistema.
Cuba: sistema electroenergético comienza a recuperarse luego de roturas
Hace solo dos semanas, la Guiteras y la termoeléctrica de Santa Cruz del Norte –centrales más importantes del Occidente de Cuba– tuvieron diversas averías al unísono, lo cual provocó que el grueso de la generación del país recayera en las unidades de la zona centro-oriental, desde donde se transfirió energía por las líneas de transmisión.
Sin embargo, debido a requerimientos técnicos que solo permiten el paso de 300 megawatts de potencia por las líneas de transmisión, el balance de energía disponible en el país se vio limitado, según explicó en la televisión nacional Liván Arronte Cruz, ministro de Energía y Minas.
Esta situación, unida a los bajos niveles de inventario de combustible en algunas regiones del país, condujo a la pérdida de casi 600 megawatts de potencia en la generación base del sistema, y se produjeron una serie de apagones en varias provincias, los cuales fueron disminuyendo paulatinamente en un período de 48-72 horas.